Capítulo 23
Después de que la campana sonó Clara se sintió aliviada al ver que sus compañeros comenzaban a salir del salón. La tensión en el aire había sido palpable durante toda la clase y ahora que ya no había nadie, tenía la oportunidad de hablar a solas con Kevin. Su corazón latía con fuerza por todas las preguntas que quería hacerle después de lo sucedido y solo esperaba a que él le dijera todo.
Valeria que había estado a su lado todo el tiempo le dio un empujón amistoso antes de despedirse de ella.
— Ve a hablar con él muñeca —dijo Valeria sonriendo — Te estaré esperando afuera o en algún lugar con las chicas. Tu solo llama si me necesitas y aquí estaré.
Clara asintió sonriendo, sintiendo que debía hacer esto.
Esperó a que todos los demás estudiantes se fueran del salón y cuando este por fin se quedó vacío, se acercó a Kevin, que estaba organizando sus materiales en el escritorio. No sé había dado cuenta de que ella estaba ahí hasta que uso su metal de voz dulce para no asustarlo.
— Kevin ¿Puedo hablar contigo un momento? — preguntó Clara, sintiendo que la ansiedad la invadía.
Kevin levantó la vista y sonrió al verla. Hoy por tantas cosas que había pasado no habían podido tener un minuto a solas y se moría por besarla.
— Por supuesto Clara ¿Qué pasa? — pregunto con un tono cálido y acogedor debido a que no le podía decir ningún apodo cariños mientras estaban en la escuela.
Clara se sintió un poco más tranquila al ver su sonrisa, ya que significaba que estaba tranquilo después de lo ocurrido, pero la preocupación seguía presente en ella.
— Quería saber cómo te sientes después de tu discusión con Ryan —dijo Clara, sintiendo que debía abordar el tema sin rodeos —Escuché que hubo una fuerte pelea, y no quiero que te tengas problemas por eso. Ya sé que Rayan es un idiota, pero podrías perderlo todo por mi culpa si me defiendes tanto.
Kevin hizo una pausa, este iba a decir algo de lo que se arrepintió y Clara notó que su expresión se volvía más seria. Sin embargo, él rápidamente sonrió de nuevo y decidió dejarle las cosas claras para su mayor tranquilidad.
— No te preocupes por mí, Clara. Estoy bien —dijo Kevin con voz tranquila — Solo hice lo que creía que era correcto, ese chiquillo debía aprender a respetar y solo se lo dejé ver. Si lo que te preocupa es que los demás sepan de lo nuestro puedes estar tranquila, ya que te defendí como tú profesor y no como tú novio.
Clara frunció el ceño sintiendo que había algo más que no le estaba diciendo. No le había contado con exactitud cuales habían sido las palabras de Rayan.
— ¿Qué fue lo que escuchaste que hizo que me defendieras? — preguntó sintiendo que la curiosidad la invadía — Quiero saber si debo estar preparada para enfrentar el mundo tomada de tu mano.
Kevin se encogió de hombros, como si el tema no fuera importante, peor Clara no estaba conforme.
— Eso ya ni importa, lo que dijo Rayan es solo una parte de su inmadurez. Lo que realmente importa es que estoy feliz a tu lado y siempre te voy a defender — dijo mirándola a los ojos con sinceridad — No quiero que nada arruine lo que tenemos y Rayan no será un problema para nosotros.
Clara sintió que su corazón se aceleraba al escuchar eso. La forma en la que Kevin la miraba la hacía sentir especial, pero también la inquietaba que no le contara lo que había sucedido. Sin embargo, ya lo hecho no se podía cambiar y afrontaría los comentarios con la frente en alto. Él defendió su honor y ella defendería su amor sintiéndose orgullosa en todo momento.
— Kevin, estoy agradecida por lo que hiciste, pero no quiero que te metas en problemas por mí. Esto que tenemos no lo puede echar a perder alguien como ese idiota arrogante.
Kevin se acercó un poco más casi rozando sus labios y Clara sintió la calidez de su presencia cerca de ella.
—Te prometo que nada ni nadie nos va a separar. No quiero que te preocupes por mí, yo sé cuidarme —dijo con voz suave—Lo único que quiero en este momento es disfrutar de nuestro tiempo juntos y seguir teniendo citas en donde podamos ser nosotros mismos.
Clara asintió ante esa petición, aunque aún sentía una pequeña inquietud en su interior. Sabía que Kevin era fuerte y capaz de cuidar de sí mismo, pero no podía evitar preocuparse por él. Rayan le había demostrado una faceta que antes no hubiese imaginado que tenía y eso la preocupaba.
— Está bien, lo dejaré pasar, pero si alguna vez necesitas hablar, estoy aquí — dijo Clara, sintiendo que la conexión entre ellos estaba lista para el siguiente nivel.
— Lo sé, y lo aprecio — respondió Kevin, sonriendo —mEres increíble, Clara.
Clara sonrió, sintiendo que la tensión se desvanecía. Aunque no había obtenido todas las respuestas que quería, la sinceridad de Kevin la reconfortaba.
— Gracias por defenderme —dijo Clara, sintiendo que la gratitud la invadía y debía decirlo una vez más — Significa mucho para mí.
— Siempre lo haré, eres mi novia — dijo Kevin inclinándose un poco hacia ella dándole un rápido y corto beso — No dejaré que nadie te falte al respeto en mi presencia
Clara sintió que su corazón se llenaba de calidez y aunque había desafíos por delante, estaba dispuesta a enfrentarlos junto a él.
—Bueno, creo que deberíamos ir a clase. Usted debe trabajar querido profesor y yo debo estudiar —dijo Clara sintiendo que la emoción la invadía de nuevo.
—Está bien, vamos —respondió Kevin sonriendo mientras la acompañaba hacia la puerta.
Mientras salían del salón, Clara se sintió agradecida con la vida por tener a alguien como Kevin a su lado. Sabía que, pase lo que pase, enfrentarían juntos cualquier obstáculo.