Entre libros y susurros

Amigas Locas

Capítulo 33

Clara llegó a la escuela con una sonrisa en el rostro, sintiéndose emocionada por el día que le esperaba. Había pasado la noche pensando en como hablaría con su padre sobre Kevin y la idea de verlo al llegar a la escuela la llenaba de energía.

Al girar en una esquina vio a su amado Kevin a lo lejos, esperándola cerca de la entrada con una amplia sonrisa que iluminaba su rostro. Hoy se veía más guapo que nunca vestido de forma casual, pero para ella él siempre se veía espectacular con sus formales trajes hechos a la medida. Siempre que lo veía en esos trajes se decía a sí misma que parecía un modelo de una marca famosa como Calvin Klein y aquel pedazo de hombre era solo para ella.

— ¡Clara! — gritó Kevin, levantando la mano para hacerle señas de que se acercará — ¡Buenos días!

Clara sintió que su corazón se aceleraba al acercarse a él y verlo con esa sonrisa perfecta. La calidez de su sonrisa y la forma en que la miraba la hacían sentir especial, pero solo lamentaba el no poder besarlo en este momento. Ambos estaban parados justo a un lado de la escuela y si alguien los veía sería un total escándalo.

— Hola, guapo — respondió Clara sintiendo que la felicidad la invadía – Te extrañé.

Sus miradas eran muy intensas desde el primer instante en el que se cruzaban y era obvio que querían decirse muchas cosas, sin embargo, antes de que siquiera pudieran intercambiar más palabras. Un grupo de chicas locas apareció de la nada, interrumpiendo su momento perfecto. Eran las amiga de Clara, quienes habían visto la escena desde lejos y no dudaron en ir a molestar un poco a la pareja feliz.

—¡Miren a la pareja más perfecta de todas! —exclamó Valeria, sonriendo de oreja a oreja, pero en voz baja — Se ven tan bien juntos que hasta dan envidia, pero de la buena.

Las amigas comenzaron a reír ante esas locas palabras y comenzaron a hacerles bromas a la pareja llenando el aire con un ambiente de alegría y complicidad. Aún quedaba tiempo antes de entrar a la escuela y debían aprovecharlo.

—¿Ya están planeando la boda? Me pido ser una de las madrinas y mi vestido será espectacular —bromeó su otra amiga, Sofía, mientras las demás se unían a las risas.

– Yo creo que están planeando su luna de miel por la manera tan intensa con las que se ven.

Clara se sonrojó al escuchar eso, sintiendo que la vergüenza y la diversión se mezclaban en su interior poniéndola totalmente roja.

Kevin, por su parte, sonrió, disfrutando de la atención de las chicas y por lo bien que se llevaban las cuatro. Tener amigos verdaderos era bastante difícil hoy en día, más porque los jóvenes solo se dedicaban a menospreciar todo a su alrededor.

— No, no estamos planeando nada de eso y ya paren de molestarnos — dijo Clara, riendo nerviosa — Solo estamos disfrutando de nuestras miradas hasta que ustedes llegaron a interrumpir y ya no pudimos decirnos nada más.

— ¡Exacto! — dijo Kevin, sintiéndose cómodo con la situación — Solo estamos viendo a dónde nos lleva un bello duelo de miradas, pero creo que voy a tener que ponerme a pensar seriamente en todas las cosas que nos acaban de aconsejar.

Las amigas intercambiaron miradas cómplices entre si viendo como Clara se ponía cada vez más roja por la vergüenza y Valeria, con una sonrisa traviesa les dijo:

— Hablando de eso ahora que son una pareja feliz y encima nos encanta como se ven juntos ¿Qué les parece si este sábado vamos a desayunar para pasar el rato? Podría ser una cita de amigos y así nos conocemos mejor. Sería bueno conocer a nuestro profesor fuera de la escuela.

Clara miró a Kevin sintiendo que la idea era divertida y emocionante, pero debía decidir con él. No podía tomar decisiones por su cuenta, sino que debía tomar decisiones que fueran en conjunto. Así que cuando este asintió la cabeza en modo de afirmación y le regaló una sonrisa, de inmediato supo que estaba de acuerdo con la loca idea de sus amigas.

— Está bien, eso suena genial — dijo Clara, sintiendo que la emoción la invadía — ¿Qué opinas, Kevin?

— A mi me parece una excelente idea y me encantaría ir — respondió él sonriendo — Será divertido pasar tiempo con tus amigas y así conocer más cosas de ellas. Si son tus amigas es porque las consideras especiales para ti y lo que es especial para ti, también lo es para mí

Las amigas aplaudieron comenzaron a hacer muchos planes, y Clara sintió que la alegría la envolvía. La idea de compartir un desayuno con Kevin y sus amigas la emocionaba, y sabía que sería una oportunidad más para divertirse y conocerse.

— Perfecto, entonces es un trato — dijo Valeria, sonriendo — Nos vemos el sábado entonces y ya después yo les envío la dirección por WhatsApp

– ¡Perfecto! – exclamaron todos.

Con eso, el grupo se dispersó y Clara junto con Kevin se quedaron a solas nuevamente por unos segundos. Clara sintió que la energía en el aire era diferente, y la idea de pasar tiempo con él la llenaba de felicidad.

— Me alegra que hayamos decidido hacerlo — dijo Clara, sintiendo que la emoción la invadía — Será divertido, estoy segura de eso las chicas son buenas.

— Sí, yo también estoy emocionado y sé que será divertido — respondió Kevin mirándola a los ojos — Además, también será una buena oportunidad para que todos nos conozcamos mejor y tus amigas sepan que voy muy en serio contigo.

Clara asintió, sonriendo, pero ya sabía que Kevin se había ganado a sus amigas desde mucho antes. Sin embargo, eso no se lo diría y lo dejaría ser para ver cómo se comportaban con él. Sabía que el desayuno sería un momento especial, y estaba lista para disfrutar de cada instante.

Mientras caminaban juntos hacia su primera clase, Clara sintió que el día prometía ser maravilloso y no veía la hora de que llegara su turno de literatura para exponer su trabajo. Con el apoyo de sus amigas y la conexión que compartía con Kevin, estaba lista para enfrentar cualquier desafío y dejar una huella en él.




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