Consejos de Vida

Capítulo 57

La mañana llegó radiante y Clara se despertó con una hermosa sonrisa en el rostro, estaba emocionada por su tarde de picnic en el parque de lagos. Sin embargo, antes de que pudiera prepararse para salir, su madre la llamó desde la cocina y se pregunto que quería tan temprano.

— Clara ¿Puedes venir un momento por favor? — dijo su madre con un tono que le indicaba que tenía algo importante que decirle.

Clara se levantó de la cama rápidamente y se dirigió a la cocina sin hacer escala, donde encontró a su madre preparando el desayuno. La mirada de su madre era seria, pero también llena de cariño hacia su pequeña quién había acabado de llegar.

– Hola mami, buenos días – dijo mientras dejaba un beso en su mejilla – ¿Qué necesitas?

— Buenos día mi vida. Quiero que me acompañes a un lugar importante esta mañana — dijo su madre sirviendo un poco de café — Es importante que hablemos sobre algunas cosas necesarias ahora que has comenzado tu vida sexual.

Clara sintió un ligero nerviosismo y el calor subió a sus mejillas, pero también sentía una profunda gratitud en su corazón. Sabía que su madre solo quería lo mejor para ella y estaba dispuesta a escucharla.

— Claro, mamá, iremos a donde tú me digas — respondió sintiéndose agradecida por la ayuda de su madre — ¿A dónde es que vamos exactamente?

— Quiero llevarte a una revisión médica con una ginecóloga — dijo su madre, mirándola a los ojos — Es importante que te cuides con algún momento anticonceptivo y también quiero que estés informada sobre la salud de tu cuerpo.

Clara asintió comprendiendo la importancia de lo que su madre estaba diciendo, eso era algo en lo que ella había estado pensando desde que comenzó su relación con Kevin y sabía que era fundamental estar bien informada y cuidarse. Aún era joven y tenía muchas cosas que vivir todavía.

— Gracias por llevarme, mamá. Sinceramente no sabía cómo dar ese paso — dijo Clara sintiéndose aliviada de poder hablar de estos temas con su madre — Aprecio que estés aquí para guiarme en todo momento como la madre especial que eres.

Su madre sonrió al escuchar eso, sintiéndose orgullosa de la madurez de su hija. Había pensado tal vez que sería más complicado convencerla, pero todo había salido mejor de lo que pensó.

— Siempre estaré aquí para ti, Clara — respondió tomando sus manos — Quiero que cada decisión que tomes siempre estés bien informada de todo y que te sientas segura en tu vida.

Solo tú puedes decir que hacer o no con tu cuerpo y mente.

Después de desayunar Clara y su madre se dirigieron a la clínica. Durante el trayecto su madre le explicó la importancia de hacerse chequeos regulares y de conocer su cuerpo a profundidad. Clara escuchaba atentamente cada palabra sintiéndose agradecida por la sabiduría de su madre y cada cosa que decía la dejaba grabada en su mente.

Al llegar a la clínica Clara se sintió un poco nerviosa, pero su madre la tranquilizó diciéndole que todo estaría bien. Sentía algo de vergüenza mientras muchas enfermeras la miraban y era como si en su frente estuviese grabando lo que venía a hacer.

— No te preocupes, cariño, todas aquí hemos pasado por esto — dijo su madre dándole una suave palmadita en la espalda — Esto es solo una parte del cuidado personal. Es normal sentirse un poco ansiosa y nerviosa, pero es importante.

Clara asintió un poco más confiada, sintiendo que la presencia de su madre la hacía sentir más segura. Pasaron a la sala de espera donde Clara se sentó a esperar su turno, sabiendo que estaba dando un paso importante hacia la madurez.

Después de la revisión con la doctora que la atendió, Clara se sintió aliviada y agradecida con ella. La doctora había sido muy amable en todo momento y le había proporcionado información valiosa sobre la salud sexual y la importancia de cuidarse.

Ella le había hablado de las enfermedades de transmisión sexual y como era necesario siempre hacer uso del preservativo para evitar un embarazo o alguna enfermedad.

Mientras salían de la clínica Clara sintió que debía hablar con su madre para darle las gracias por haberla traído. Ahora que había hablado con la doctora se sentía más segura de sí misma y confiada para dar cualquier paso importante.

— Gracias por traerme, mamá. — dijo sintiéndose más cercana a ella — Me siento más informada y segura después de esto.

— Me alegra escuchar eso —respondió su madre sonriendo— Siempre es bueno tener conversaciones abiertas sobre estos temas y qué mejor que él con un especialista. Además, Yo también estoy aquí para lo que necesites, así que no dudes en preguntarme cualquier cosa en el futuro.

Clara sonrió sintiendo que su relación con su madre se fortalecía. Sabía que, aunque estaba comenzando una nueva etapa en su vida siempre podría contar con el apoyo y la guía de su madre.

Al llegar a casa Clara se preparó rápidamente para su día de picnic. Se sintió emocionada por pasar tiempo con Kevin y sus amigas, sabiendo que había tomado decisiones responsables y que estaba lista para disfrutar de su día.

Mientras se vestía pensó en lo afortunada que era de tener una madre tan comprensiva y amorosa. Clara sabía que con el apoyo de su madre y la conexión que compartía con Kevin estaba lista para enfrentar cualquier desafío que se presentara en su camino.

Una vez estuve en la sala lista para irse una idea importante cruzó por su cabeza. Su madre había preparado todo para que ellos tuvieran un picnic delicioso, pero ella se quedaría encerrada en casa todo el día.

Su madre pocas veces salía de casa y todo debido a su padre. Ese señor le había prohibido tantas cosas a su madre por tantos años, pero ahora eso iba a cambiar. Si madre aún era joven y hermosa, tanto que cualquier persona voltearía para verla en la calle. Solamente necesitaría un poco de arreglo y una ropa más bella para que fuera la envidia de muchas