Capítulo 64
Después de sacar a su padre de la casa, Clara y Lucas se sintieron un poco más tranquilos, aunque el dolor seguía presente en cada momento. La tensión en el aire era casi imperceptible y ambos sabían que el camino hacia la sanación sería largo.
Kevin consciente de la situación no quería dejar sola a Clara en un momento tan delicado. Se había enfrentado a su padre sin temor alguno y le había dejado perfectamente claro que ella no estaba sola. Él estaba ahí para defenderla y no le importaría pasar por encima de nadie para lograrlo.
— Amor, voy a llevar a las chicas a su casa. Sus padres ya las estaba llamando para que vuelvan — dijo Kevin mirando a Clara con preocupación porque no quería irse aún — Prométeme que si necesitas algo me llamarás de inmediato. Estaré pendiente de ti toda la noche y no dudaré en llegar corriendo si solo me llamas.
Clara asintió sintiendo una mezcla de gratitud y amor por su novio. En sus ojos veía que de verdad estaba dispuesto a hacer lo que decía y eso hacia que su corazón se llenara de dicha.
— Está bien, lo prometo —respondió con una sonrisa débil— Si necesito algo, lo que sea, no dudaré en llamarte.
Kevin le dio un suave beso en la frente antes de despedirse, sintiendo que era importante que Clara y su familia tuvieran tiempo a solas para procesar lo que había sucedido. Ya le peor parte de la tormenta había pasado y lo siguiente que quedaba era sobrepasar el mal trago.
Mientras él se alejaba Clara sintió que su corazón se llenaba de esperanza. Sabía que, aunque el dolor era real por la traición de su padre, también había una oportunidad para un nuevo comienzo. Un nuevo comienzo en donde su madre, Lucas y ella harían cosas para mejorar sus vidas.
Una vez que la familia se quedó sola Clara, Lucas y su madre se sentaron juntos en la mesa del comedor. La atmósfera era totalmente diferente, ya que ahora era más tranquila y era evidente que necesitaban un momento íntimo para hablar y apoyarse mutuamente.
La madre de Clara con lágrimas en los ojos, pero con una nueva determinación miró a sus hijos y tomo sus manos para que sintieran su conexión.
— Lamento todo lo que pasó m Quiero que sepan que, a partir de este preciso momento voy a ser una mujer diferente y fuerte — dijo con voz firme — No voy a quedarme callada ni voy a permitir que nadie me trate de esta manera una vez más. Yo soy su madre y lucharé por ustedes sin importar quién se interponga en nuestro camino. Durante muchos años deje que su padre me hiciera sentir menos, pero esa pesadilla acaba de terminar. Las mujeres no somos un objeto que debe de estar de adorno guardado en una casa, las mujeres tenemos voz y desde hoy yo alzaré la mía.
Clara y Lucas se miraron con alegría, sintiendo que la fortaleza de su madre les daba esperanza a ellos también.
— Estamos contigo, mamá —dijo Lucas sintiendo que la unidad familiar era más fuerte que nunca — Juntos podemos superar esto y te apoyaremos en cada decisión que tomes con respecto a tu vida. Mañana mismo buscamos a un buen abogado y ya verás que en el menor tiempo posible serás una mujer libre.
Clara que percibió que el amor y el apoyo de su familia era inquebrantable, se acercó a su madre y la abrazó para luego dejar un beso sobre su cabeza.
— Te queremos, mamá — dijo con la voz entrecortada — Sabemos que esto no será fácil, pero estamos aquí para ti. Nada de lo que dijo ese señor es verdad porque solamente el es quien no sirve como ser humano.
La madre de Clara sonrió sintiendo que la conexión con sus hijos se había fortalecido. Antes ellos eran unidos, pero ahora estaban más que juntos y fuertes.
— Gracias, mis amores —respondió respirando profundamente para controlar su voz — Juntos aprenderemos a vivir de nuevo y a levantarnos después de esta caída.
Esa noche se hizo presente y Clara, Lucas y su madre luego de cenar un poco decidieron dormir juntos como cuando ellos eran pequeños. Se acomodaron en la cama con una película de fondo en el televisor, sintiendo la calidez y la seguridad de estar juntos. Desde hace mucho tiempo no tenían un momento tan íntimo como ese y mientras se arropaban Clara sintió que, a pesar de todo lo que había sucedido, había una luz al final del túnel.
Mientras la noche avanzaba Clara cerró los ojos aspirando el delicioso aroma de su madre, sintiendo que sus vidas estaban a punto de cambiar para bien. La traición de su padre había sido un golpe devastador para ellos, pero también había abierto la puerta a nuevas oportunidades dónde él no estaría para controlarlos o decirles que hacer.
Sabía que su madre estaba lista para ser fuerte y que juntas podrían enfrentar cualquier desafío. La promesa de un futuro brillante se sentía más cercana que nunca y Clara se durmió con la certeza de que a partir de ese momento todo sería diferente. Que mejor forma de empezar una nueva vida mientras estás rodeado de personas que te quieren y te apoyan en todo momento, personas que están ahí para ti en los momentos más difíciles como sucedió con sus amigas y su amado profesor.
Editado: 07.09.2025