Cap. 12. Tomando nuestros nuevos cargos.

Hoy amaneció y sali temprano a correr a despejar mi mente, ya que era mi primer día como Alfa, en el trayecto me alcanzó Ron mi Beta ya que era su primer día también.

-Despejando tu mente!!! 

Me dijo a mis espaldas dándome un tremendo susto, jugamos un poco a las luchas como siempre lo haciamos, al terminar de jugar nos dirijamos a la mansión, cada quien a su habitación.

Tomamos una ducha y nos mudamos y preparanos para enfrentar nuestro primer día como líderes de la manada Red Moon.

Estábamos listos, bajamos los escalones de las escaleras de dos en dos y dandonos empujoncitos hasta llegar a desayunar y la familia estaba reunida en el comedor.

Ron beso a mi hermana en la frente ya que eran Mates y su relación era estrictamente cuidada y vigilada por mis padres y sus suegros ya que mi hermana era solo una adolescente.

Ron era un gran hombre amaba profundamente a mi hermana  y ella a él, eso era obvio, pero mantenia un gran respeto a sus suegros y a sus padres. .

Terminado nuestro desayuno nos dirijimos al que seria el nuevo despacho.

Es una amplia oficina con dos escritorios hermosos hechos de madera reciclada y tallados a mano cada uno con unos lobos muy herrmosos y colocados uno frente al otro para simular la igualdad de poder.

Se usaban madera reciclada del bosque, solo reciclar, no talar, no cortar, se utilizaba solamente lo que estaba en el suelo troncos caidos, ramas, bellotas y diferentes flores y frutos que se usaban para los adornos. 

Se respetaba todo lo que tuviera que ver con la vida del bosque.

Ya que ellos sabían de las diferentes especies que habitaban en las ramas de los árboles.

Cada hombre lobo respetaba al bosque y toda la naturaleza que hubiese en el.

Las oficinas estaban adornadas de forma muy varonil, paredes recientemente pintadas en celeste y verde musgo, techos de madera un convinacion con los muebles. 

Un gran cuadro de Moneth colgaga de el muro de atrás del escritorio del Alfa. La pintura data de 1899, llamada El estanque de ninfeas.

La pintura hacia alusión a un precioso y denso bosque junto a un bello lago de aguas limpias, con un viejo puente de madera semiredondo.

Mientras que detrás del escritorio del Beta había un bello Vincent van Gogh que data de 1889 con el nombre de Una noche estrellada.

Pintura abstracta que reflejaba la luna y los estrellas de forma majestuosa. 

Con azules y amarillos en perfecta convinacion con la pintura de las paredes.

Cada pintura son originales compradas por los abuelos del Alfa Jackson. 

Ya que el y su Luna eran amantes del arte por lo cual estas no eran las únicas pinturas de la casa.

Además con el paso de los años fueron comprando piezas como jarrones, mesitas, lámparas, adornos y otros objetos más.

Que con el paso del tiempo y los años iban incrementado su valor.

En el centro del techo colgaba un bello candelabro de vidrio soplado que hacían juego con las dos las lamparas en los escritorios.

La antigua mesita para servir el té ocupaba una esquina de la habitación con dos sillas finamente decoradas a mano.

En la entrada había una pequeña sala, con sillones muy cómodos especiales para recibir visitas o reuniones formales.

Toda la oficina era insonora o sea una ves que cerraban la puerta no salian los sonidos.

Ya instalados en la gran oficina, empezamos a trabajar, la repartición de víveres fue nuestra primer labor, ya que habían llegado las camionetas cargadas de cosas.

Solamente víveres de primera necesidad, cosas básicas pero les aseguraba a cada miembro no pasar necesidades, ni aguantar hambre.

Los Omegas eran los encargados de repartir los víveres estos dividían en cestas iguales cada uno obtenía la misma porción por familia, la variante era el número de miembros que conformaban cada familia.

La cesta consistía de granos, verduras y frutas, lacteos, algunos enlatados, golosinas para los niños.

Algunos de los habitantes tenían sus propias granjas con conejos, venados y animales que les provenían de la carne suficiente para mantener la manada. 

Y jardines con verduras y frutas que al igual que la carne la vendían entre los habitantes así que las cestas contenían lo que el bosque no les provenía.

El Alfa y el Beta siempre supervisaba la operacion para que no hubieran irregularidades y todos obtuvieran lo justo y lo necesario para vivir dignamente.

En el pueblo habían tiendas de todo tipo, boutiques, heladerías, restaurantes, panaderías, hasta un mediano supermercado.

Y demás lugares donde los miembros podían comprar lo que quisieran sin restriccion alguna, para eso había un sistema de salarios más que justo, donde cada miembro era reconocido monetariamente por su labor.

Las tareas continuaron hasta en entrada la tarde entre permisos matrimoniales, reconocimiento de Mates y aceptación de nuevos miembros atender las organizaciones de ayuda social.

Eran muchas las tareas diarias.

A eso del mediodía el Alfa Jonh de la manada Black Moon pidió una reunión con el Alfa Aron. 

Este la concedió.

El Alfa los hizo pasar y ya sentados en la sala de nueva oficina.

-El Alfa Aron le recordó que tenían que finalizar el entrenamiento de los Omegas. 

-Y que estos enseñarán a los demás Omegas en la manada Blach Moon.

-Si, Alfa, gracias por recordarmelo. Venía a despedirme, y a preguntar.

-El Alfa Jonh empezó a preguntar si ya se habían arreglado los problemas con la familia.

-Ya que las chicas le habían indicado que no se irian con él a su manada.

-Y es de mi saber que todo estaba bien antes de marcharme a mi manada.

-Después de todo son las hermanas de la esposa de mi Beta.

-El Alfa Aron respondió que todo estaba felizmente arreglado y que las chicas iban a estar bien. 

-Lo ocurrido fue un gran error de mi parte las chicas con su astucia me dieron una muy grande lección de humildad y confianza.