Entre Nosotros (sc Libro 0.1)

7. Nelly

Julissa

Prácticamente hui, muy cobarde ante la situación. De verdad que fue demasiado lo que pasó por mi cabeza en ese momento. Fue muy bueno de su parte ayudarme con mi herida, no me había percatado del dolor hasta que me comenzó a curar. Luego preocuparse por mi labio partido y decirme indirectamente que le gustaría conocer a mi familia. Eso fue mucho para mí. Tuve la necesidad de huir, aunque me hubiese gustado acompañarlo a un lugar alejado de la fiesta, pero eso me habría dado un colapso mental.

Necesito mantener a raya mis sentimientos. No puedo sentirme tan atraída por un chico que conocí hace un par de semanas. No quiero que esto se me salga de las manos. Debo llevar esto con calma o me volveré loca.

-llegaste temprano. -Charles dijo en cuanto entré. Louisa permanecía dormida en sus brazos mientras él la mecía.

El salón estaba completamente oscuro a excepción del televisor y una lámpara al lado del sillón que permanecía encendida. Revisé el reloj de la pared y apenas son las 11 en punto.

-¿Qué hace Louisa todavía fuera de la cama? -pregunté en voz baja.

-Tuvo una pesadilla y tú no estabas ahí, así que vino conmigo. Recién acaba de volverse a dormir. -dijo en tono serio mientras caminaba a mi habitación con mi hermana en brazos. Lo seguí y lo vi acomodando a la niña en su cama.

-No me mires como si yo tuviera la culpa. -le reclamé.

-no te culpo, es solo que estoy cansado. -se giró hacia mí y soltó un suspiro. -¿qué te pasó? -se acercó a mí e intentó tomar mi mano, sin embargo la aparté rápidamente.

-Nada, me lastimé, no es grave.

-Déjame ver entonces. -me negué. -Al menos dime qué sucedió.

-No tengo por qué hacerlo.

-Juli, solo me estoy preocupando por ti ¿puedes dejar de ser tan testaruda una vez?

-bien. -me quejé y le extendí la muñeca dejando así que retirara la venda y revisara mis heridas. -un tipo quiso sobrepasarse y tuve que golpearlo.

-¿te hizo algo?

-no, pero intentó hacerlo. -volví a apartarla y volví a envolverme la mano con delicadeza.

-¿te duele?

-Ya casi no.

-lo siento...

-¿por qué te disculpas? -fruncí el ceño.

-por no haber podido llegar más temprano a ayudarte. Creí que podrías manejarlo mejor, eres muy buena con los niños, no pensé demasiado a quienes te dejé, estaba consciente de lo exasperantes que son esos tres. Me confié con que lo lograrías sola y decidí quedarme otro rato con Alissa. Estaba más concentrado en conocer y darles una buena impresión a los padres de mi novia y los puse por encima de mis responsabilidades.

>>seguro la pasaste muy mal, mira cómo te dejaron. -tomó mi barbilla y observó mi labio, seguramente todavía hinchado y mucho más morado. -te prometo que este tipo de cosas no van a volver a suceder.

-está bien, te creo. -asentí y me dejé abrazar por mi hermano. Pocas veces me demuestra afecto, así que decidí disfrutarlo un poco antes de que se retirara de la habitación deseándome buenas noches.

Esta situación me permitió olvidar por un momento el caos de sentimientos que traje desde la fiesta hasta acá.

***

-Niña, pero ¿Qué te pasó? -Nelly me miró de pies a cabeza e hizo una mueca.

-Me acabo de despertar ¿Qué esperabas? ¿Qué estuviera maquillada y con el cabello alaciado perfectamente?

-no me refiero a eso, tu labio ¿Qué tipo salvaje te hizo eso y cuándo? Quiero todos los detalles. -chilló entrando en mi casa como si fuese la suya. La miré con sueño y cerré la puerta.

-No besé a nadie, fue uno de los trillizos locos de los Brown que me lanzó el control remoto y me reventó el labio.

-y yo pensaba que te habías divertido en la fiesta de anoche. -hizo puchero ya acomodada en el sillón.

-¿Qué haces aquí a las 6 y media de la mañana? -gruñí y me froté el rostro.

-Vengo a recogerte para tener un sábado de chicas ¿no te dije que reservé spa para dos?

-no.

-bueno, ya te lo estoy diciendo. Tienes dos horas para arreglarnos e irnos.

-pudiste solo llamarme dentro de una hora y aún así me hubiese arreglado a tiempo ¿Qué necesidad tienes de hacerme madrugar?

-El que madruga, Dios lo ayuda.

-es sábado ¿por qué no agendaste más tarde?

-porque más tarde aquel chico ardiente de la otra vez no atiende.

-¿qué?

-¿qué no lo recuerdas? Al alto, moreno de labios grandes. Conseguí su número y me dijo que le tocaba turno en la mañana.

-terminaste con tu novio la semana pasada ¿y ya tienes un pretendiente?

-mira, lo de Jace y yo estaba destinado a fracasar. Ya sabía que terminaríamos pronto. Además la vida es una y hay que disfrutar de los placeres que te brinda. -se cruzó de piernas y se recostó elegantemente en el sillón. No entiendo cómo se ve tan bien a estas horas.

Su cabello castaño estaba perfectamente alisado y peinado. Su rostro bien maquillado y con un conjunto casual, pero muy cómodo. Yo debería seguir soñando en mi cama en vez de ver a mi amiga loca mirándome en espera de que me moviera. Dios, realmente no quiero hacer esto. Tengo muchas cosas que hacer más tarde.

Nelly ha sido mi amiga desde secundaria. Siempre es muy extrovertida, no tiene pelos en la lengua para hablar y es sumamente lista. Gracias a ella logré pasar mis materias con excelencia académica. Es una chica maravillosa aunque su gran bocota a veces es algo fastidiosa.

-¿buenos días? -Charles apareció por el pasillo y miró extrañado a mi amiga. No llevaba camisa, así que Nelly no desaprovechó a darle una cautelosa mirada a mi hermano.

-Buenos días Charlecito. Estás en muy buena forma, sigue así.

-¿Gracias?

-de nada. -le guiñó un ojo y me observó. -¿Qué esperas? Rápido. Te llevaré a desayunar primero.

-¿no que tenía dos horas para arreglarme?

-¿eso dije? Bueno, faltan dos horas para llegar ahí pero seguro tardaremos al menos una hora desayunando, así que si queremos aprovechar la mañana, ve a arreglarte ya mismo. -se puso de pie y me empujó hacia el pasillo que da hasta mi habitación. -y no te preocupes por mí, me quedaré con Charles acá.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.