Capítulo 2

— ¡AHORA SUFRE PERRO INFIEL! — Grité mientras veía la película romántica pero con algo de dramatismo — ¡ESO EMMA, HAZLO SUFRIR COMO ÉL LO HIZO CONTIGO!.

— No puedo creer lo que están viendo mis hermosos ojos — Volteo inmediatamente hacia mi amiga — ¿Qué?.

— Ojos si son, pero hermosos no creo — Suelto una risa estrepitosa.

— Desgraciada, te odio — Me fulmina con la mirada.

— El sentimiento es mutuo amiga así que estamos a paz — Ella sigue con su molestia.

— A veces no te soporto — Le mando un beso — Ya me arrepiento de proponer este plan para ti. Dormirás en el sofá.

— No lo puedo creer. ¿Así atiendes a tus queridas visitas? — Pregunto con un poco de exageración.

— Visita si es, querida no creo — Me devolvió la jugada. No lo ví venir — Y así atiendo a las fastidiosas como tú. Te hubiera dejado en tu casa.

— Bueno está bien, me quedo callada, pero por favor no me dejes aquí durmiendo, es muy incómodo dormir en el sofá — Ella definitivamente disfruta de esto — Por favor, por favor — Pongo mis manos en posición de rezar.

— Está bien — Tuve un grito ahogado de emoción. Mi poder de convencimiento si funciona — ¿Y si pedimos domicilio?.

— ¿Una pizza estaría bien? — Renata asiente — Yo la pido y la cancelo — Hace un intento de protesta — Yo la pago y punto.

— Está bien — Responde con frustración.

— Te amo amiga mía — Ella me abraza y seguimos viendo la película.

Luego de un rato de ver el final triste de una película lloramos y debatimos sobre la misma y cuando llegó la pizza nos pusimos a ver la segunda parte. Fue el mismo proceso que la anterior película.

Luego de ver la película arreglamos todo para no ver nada desordenado el día de mañana. Me fui a dormir al cuarto de Renata junto a ella, la cama es super cómoda, la quiero solo para mi.

— ¿Todavía duermes mal? — Pregunta la dueña de la cama — Si duermes mal te tiro de una patada al piso.

— No te preocupes, ya no duermo mal.

— ¿Y como fue que aprendiste dormir bien sin ocupar toda la cama? — Me pregunta.

— En uno de eso viajes familiares tuve que dormir con mi abuela, ya tenía fama de dormir mal y me advirtió que si dormía mal me daría un pellizco y así fue. Al día siguiente amanecí con moretones tanto en los brazos como en las piernas.

— Creo que tomaré las misma técnica de tu abuela. Me parece buena.

— No te preocupes. Aprendí a dormir como vampiro, ya no me muevo para nada a menos que me valla a dar la vuelta — Ella termina de cepillar sus dientes.

— Más te vale, Luciana. No pienso amanecer con dolor de espalda por ti. Además, la cama es bastante grande y cómoda, pero de igual forma te advierto.

— Nata, ¿Tienes un cepillo nuevo?. El mío se me olvidó traerlo.

— Hacia mucho tiempo que no me decías Nata, desde esa vez que quedaste entre la discusión que tuvimos Santiago y yo. ¿No sabes nada de él?

— A veces me escribe. No es todo el tiempo. La última vez que hablé con el fue hace más de quince días, está estudiando ING Civil — Le cuento lo último que supe de mi mejor amigo — Por cierto, ¿El cepillo?.

— Oh, se me había olvidado. Hay uno dentro de el tercer nivel que está detrás del espejo — Asiento y me voy a cepillar mis dientes.

———

— Lía... apúrate, yo también necesito bañarme.

— Es sólo un momento. Tranqui — Le digo en tono relajado — Dame cinco minutos y ya salgo.

— Así me tienes desde que sonó mi alarma hace quince minutos — Me grita del otro lado de la puerta — ¡Apúrate!.

Que fastidiosa se pone. ¿Quién la manda a levantarse tan tarde?.

— Ya salí, ¿Estás contenta? — La fastidiosa pone los ojos en blanco.

— Por fin. Nada más faltaba pasar todo tu closet al baño.

— No estás en un teatro así que deja el espectáculo que tienes, ¿Puedes? — Le digo con sorna.

— No diré más nada. Tengo que salir en paz de aquí.

Me voy a cambiar al cuarto de Renata con la ropa que traje de mi apartamento el día anterior y me apliqué un poco de maquillaje, nada estrambótico.

Luego de estar lista acomode mi bolso y tomé mi teléfono con la batería al cien por ciento, pero encontré algo que no esperaba...

Mensaje de Santi.

¿Cómo le va a mi mejor amiga?.

Algo raro porque después de que nos dejamos de ver antes de terminar la escuela habíamos perdido mucha comunicación y aunque todavía lo considero mi mejor amigo y lo trato como tal, es raro que él me escriba por si sólo.

Tomo mi celular a responder el mensaje...

Mensaje para Santi.

Hola Santi.

Creo que se avecina una tormenta.

Ha sucedido un milagro.

No veo indicios de que se conecte por lo que guardo mi teléfono y termino de arreglarme seguido de ir a la cocina a preparar unos sándwiches para desayunar.

———

— Bueno chicos, la clase a terminado. Espero sus trabajos la próxima semana y recuerden que esto es el setenta por ciento del semestre.

Salgo del aula para ir a mi próxima clase de bioquímica lo que me gusta ya que es la rama que estudia los procesos químicos dentro del cuerpo para entender su estado de salud y causa de alguna enfermedad. Esta ciencia es una mezcla entre la biología y la química. La química estudia las propiedades de la materia y los cambios que experimenta la misma mientras que la biología estudia los seres vivos, su comportamiento, su origen por lo qué ambas se unen. Estas estudian, examinan detallada y sistemáticamente la unificación de los seres vivos.

— Oyee — Me agarran fuerte del brazo — Te recuerdo que tienes una mejor amiga que está estudiando la misma carrera que tú y aparte tenemos el mismo horario.

— Ay disculpa. Es que quiero llegar rápido a la próxima clase.