Entre risas nerviosas

Capítulo 4

— ¿Te gustó la película? — Le pregunto a Nicolás una vez fuera de la sala.

— Si si. Valió la pena y a ti, ¿Te gustó?.

— Qué si me gustó Nicolás. Me encantó y más porque la película hizo énfasis más que todo en el tema de saber que si somos basura para alguien, incluyendo a nosotros mismos, para otros somos un juguete nuevo desde el buen sentido, alguien más ve hasta lo imposible en nosotros.

— Wow... No lo había visto desde ese punto. Me gusta ese ángulo — Me dice sorprendido.

— Creo que ya es hora de volver a mi casa — Le digo en forma de despedida.

— Si quieres te puedo acompañar — No logro responder nada — Aquí vamos otra vez con la muda.

Me reí fuertemente ante su molestia por quedarme cada vez que él me dice algo.

— No da risa Lu. Cada vez que te digo algo te quedas muda como si yo te estuviera intimidando.

— Perdón. En realidad no sé que me está pasando, pero si, me puedes acompañar si no es mucha molestia — Le digo entre risas.

— No es molestia, linda. Me encantaría — Eso me hizo estremecer ligeramente — No veas basura en ti. Acabamos de ver una película que nos dio un mensaje de eso.

— No estoy basura en mi. No lo hago — Le dije, pero aún así me quedé pensando en eso último.

— ¿Vives cerca de aquí? — Asiento — Entonces, ¿Viniste caminando? — Asiento nuevamente — Yo vine en carro así que te llevaré en mi carro, ¿Te parece? — Vuelvo a asentir a lo que él me mira con ligera molestia y no sé la causa — Espera un segundo — Me quedo expectante ante lo que vaya a decir — ...Sé que por momentos eres sordomuda, pero tampoco te pases. Maldición.

Vuelvo a reír y este sigue con seriedad.

— Creo que lo hago inconscientemente. Disculpa.

Sigo riendo y a él que más le tocó que resignarse y reírse también del caso. Nos fuimos al carro de Lucas (Me sorprendió que tuviera carro. Yo de cosa tengo para comer), y nos dirigimos directamente a mi departamento para ir a descansar del día de hoy. No es que haya echo mucho esfuerzo físico, pero no tuve mi ciesta de las tardes, aquellas que nunca faltan.

Mientras estoy en el carro el silencio es incómodo y saco mi celular para ver si tengo algo... Mejor dicho.

5 Llamadas pérdidas de Nata
3 Llamadas pérdidas de Mom❤
4 Mensajes de Simón
10 Mensajes de Santi

Mientras estuve distraída hay si se acordaron de mi.

No lo puedo creer.

— ¿Muchas notificaciones acaso? — Me dice Lucas y otra vez quedó muda — No digas nada.

Me río.

— Es mi familia. Me desconecte todo el día y así se acordaron de mi — Respondo lo que pensé indignada.

— Suele pasar — Me dice tranquilo — No te preocupes. Contesta.

— Les contesto cuando esté en casa — Mentiras. Les contesto durante el trayecto.

Mensajes de Simón.

Hola.

Luci.

Cómo estás?.

Estás en tu apartamento?

Mensaje para Simón.

Hola, Simón.

No estuve en casa hoy.

Ahora los mensajes de Santiago.

Mensajes de Santi.

Hola, pequeña.

Cómo estás?.

Cómo te va?.

Me imagino qua ya estás de vacaciones.

Espero que te haya ido bien en los exámenes.

Hellooo.

Luciana.

Narváez.

Estás por ahí?.

Parece que no estás.

Mensaje para Santi.

Hola, Santi. Efectivamente no estaba en el celular.

Estaba en cine.

En ese momento suena en la estéreo la música Locked out of heaven de Bruno Mars y automáticamente la cantó sin prestar mucha atención a mi voz horrenda.

— Cantas lindo — No no no. Siento que me puse roja.

Dejo de cantar instantáneamente. Me dio vergüenza ahora.

— Sin pena. Canta — Niego repetidas veces.

— Te hubieras quedado callado mejor. Ahora tengo muchísima vergüenza — El se ríe fuertemente.

«Te gusta su risa».

Diosito Santo.

¿En qué estoy pensando?.

Poco tiempo después llegamos a mi apartamento e iba a salir, pero él me detiene...

— ¿Qué pasa? — Le digo verdaderamente confundida — ¿Te debo o qué?.

— No me debes exactamente, pero tampoco te vallas tan rápido que yo no muerdo — Reí por el sarcasmo.

— ¿Y que se supone que deba hacer?. No te estoy entendiendo.

— Por lo menos invitame a pasar o algo así.

— Ahhh... Ya entendí — No se porque querrá acompañarme, pero le daré el gusto — ¿Te gustaría acompañarme a mi apartamento? — Le digo con burla.

— Si no es mucha molestia, Lu — Me responde con la misma burla — Pasemos a tu dulce morada para ver que tanto habla de ti.

— Ok. Ya no es acompañar sino inspeccionar mi espacio personal. Definitivamente — Le digo indignada negando repetidas veces.

Por otro lado, el no respondió nada, se quedó callado esperando a que lo llevará a mi apartamento. De igual forma no pasará nada malo si subo el edificio hasta el piso cuatro y entro a mi apartamento correspondiente. No pasa nada malo ¿O si?. En fin. No demoramos nada al subir a mi piso, pero lo que vi a continuación me dejó perpleja antes de pisar el último escalón...

Mi ex besándose con otra.

Había pasado todos estos días felices y no me iba a dejar derrumbar fácilmente por las acciones de ese estúpido y por inercia tomé a Nicolás del cuello seguido de traerlo hacia mi con un beso sin pasión, sin amor, sin sentimiento, pero con demasiada efusividad por no dejarme decaer automáticamente por verlo hacer su vida fácilmente sin mi. Lucas reaccionó al mínimo segundo alejándome de él como si estuviera cometiendo una locura aunque si era una locura en cierta parte.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.