Entre Sombras y Espejos :desamor, mentira e inseguridades.

Capítulo 1: Los cristales rotos

Dicen que el amor cuando se quiebra no hace ruido, pero yo lo escuché. Fue como el crujido de un vidrio astillándose dentro del pecho, lento, inevitable. No hubo gritos, ni palabras que cerraran la herida. Solo silencios... y silencios que pesaban más que cualquier verdad.

Me repetía que todo estaba bien, que las miradas esquivas y las respuestas frías eran solo casualidades, que no había un abismo creciendo entre nosotros. Pero dentro de mí lo sabía: me estabas mintiendo. No sé si era a mí… o a ti mismo.

La confianza es frágil; la perdemos en segundos. Yo te entregué la mía como quien entrega un tesoro, y tú la dejaste caer sin cuidado, como si nunca hubiera significado nada.

Desde entonces aprendí que la mentira no siempre llega en forma de palabras falsas: a veces se esconde en un “te quiero” dicho sin alma, en un abrazo que no sostiene, en una promesa vacía que se derrite en la boca.

Yo miraba al espejo y no me reconocía.
¿Quién era esa persona que dudaba de cada gesto, de cada palabra, de cada mirada?
Era yo, con las inseguridades trepándome como sombras, recordándome que quizás nunca fui suficiente, que tal vez el amor no era para mí.

El corazón, al final, se acostumbra al frío.
Pero el frío no se acostumbra al corazón.



#1745 en Otros

En el texto hay: .......

Editado: 29.08.2025

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