Capítulo 20

Habían pasado dos días desde que Fernando se reincorporo en la ciudad, las cosas estaban volviendo a la normalidad, Kiny estaba completamente calmada, y Hernando se disculpó mil veces por no haber podido salvarlo, aunque Fernando no dejo que se humillara postrándose ante él, como quería hacerlo, cosa que lo veía mal, pasando un rato amargo, las cosas se volvían a tornar de color rosa, la empresa entro un jubilo mientras su jefe se recuperaba de aquella pequeña lesión tras su perdida. Aurora empezó la universidad, las clases de diseños creativos empezaban en octubre, y Michelle iba a ir a una escuela, quisiera o no, poco después de que Aurora conociera a Daniel el fotógrafo de la compañía, mantuvo un amorío en secreto hasta que se revelo que estaba embarazada del susodicho.
Poco después de que a Fernando le hicieran todas las pruebas en el hospital, al respecto de su salud, el mismo Hernando con la colaboración de Lily hicieron una fiesta sorpresa para celebrar que Fernando estaba completamente bien, también llamo a su madre, quien casi le daba un infarto de la alegría, al escuchar la voz de su hijo, que no la estaba llamando de la ultratumba sino de un teléfono de casa. Poco después de aquella fiesta, Kiny decidió formalizar su relación con Fernando y empezar otra etapa de su vida, eran oficialmente novios. Aunque poco después también si se daba la ocasión planearían casarse.  Fernando inmediatamente contacto con Billy Fox, que al ver que no estaba muerto se calmó más, el alasqueño estaba más preocupado por las acciones que por Fernando, pero luego de escuchar unas claras órdenes empezó el proyecto en el urbanismo cerca de la casa de Kiny. 
—Hoy te quiero enseñar algo.
—¿Qué es?—Dijo Kiny. 
—Creo que lo tendrás que ver con tus propios ojos.
—Espero que no sea una de tus extravagancias. 
—No para nada. Más vale sabes que es, pero no lo quieres recordar. 
—No lo sé. 
Fernando inmediatamente condujo en su carro, estaba vez más despacio porque Aurora le había enseñado una lección de automovilismo, mejor llegar tarde a nunca llegar. Pensando eso, vendió todos los carros deportivos y compro un clásico, que también era elegante y mantenía su toque deportivo, aunque a Kiny no le gusto que cambiara todos sus camaros por esa antigüedad. Más Fernando estaba muy conforme. Así condujo hasta que llegaron a donde Fernando quería mostrarle a Kiny.
—Aquí es. 
Kiny miro
—No es… 
—El parque que te prometí…— Dijo Fernando rápidamente—. Las obras ya empezaron, completamente libre, para el uso del deporte, claro no es como hacer aquel tipo de Parkourt extremo por los tejados de la casa, pero también es bueno para que vayan empezando, los novatos como yo. —Giño el ojo con carisma. 
—¡Tonto! 
—Siempre lo seré.—Ahí estaban sus pesadas bromas de nuevo presumió con orgullo—Kiny también quiero decirte, que… siempre me gustaría pasar el resto de mi vida contigo. Claro si tú me lo permites. Cuando estuve perdido, solo pensé en volverte a ver, y cuando estaba con aurora, pensé que tal vez si no fuera por el destino, nunca te habría conocido, pero, sé que él no nos va a separar nunca, porque nos unió. Y si nos llega a separar te volveré a buscar, así sea imposible. 
Kiny suspiro conmovida.
—No te pongas cursi. 
—Auch creo que me corto.
—Tonto. Sabes que si quiero.—Kiny le planto un beso leve—. Si quiero pasar el resto de mi vida contigo. —Volvió a besarlo con parsimonia.
Obviamente no sabían que las cosas se pudieran volver complicadas en el futuro, pero siempre van a estar de la mano, aun cuando los peores cosas se les vengan encima, al final se llama sentir amor, y estos dos chavales los sentían como chicos de preparatoria, amantes con fervor incontrolable, fundido con besos y templados con un roce entre sus miradas. 
FIN