Parte 16

Narra Milena:

Estaba pasando la mejor tarde de mi vida. Nos sentamos en el enorme patio, bajo un árbol. Hablamos miles de cosas, contamos secretos, me sentía como sil fuera mi amigo de toda la vida. Era muy gracioso. Cuando terminamos de comer, el saco un regalo de su bolso. Era un libro de fantasía. El sabia que me gustaba leer así que me lo regalo. Lo abrace y le agradecí por ese regalo. Era fantástico. Me encantaba con solo leer la portada. "Mi viejo amigo invisible" Alexis se sentó junto casi pegados, parecía nervioso. Me sonroje. 

-Cuando lo vayas leyendo me gustaría que me lo cuentes.. -Dijo

-Si, claro  -Dije sonrojada-

-¿Podrías.. mirarme? 

-Lo mire-

-El mismo cielo.. el mismo cielo esta en tus ojos 

El fue acercándose lentamente a mis labios, era el momento indicado para besarnos. Estaba todo, nada podía interrumpir este momento, arruinarlo, o algo por el estilo. Alexis hacia que mi corazón retumbara por todo mi cuerpo. Dios, no puedo mas. Pero nuestro momento feliz iba a romperse, ya que, una explosión dentro del colegio nos llamo rápidamente la atención. 

-¿Que rayos fue eso?

-Me levante- 

Pude ver como voló por el aire un cuerpo, y cuando cayo al suelo y se volvió a levantar, era el. Elizeo estaba herido, no sabíamos que pasaba realmente, pero podía ver desde lejos que no era el mismo. Las chicas vinieron corriendo aterradas a nuestro lado. 

-¿Que pasa? -Dijo Alexis

-Christian y Elizeo están peleando en el patio de atrás 

-Están destruyendo todo

Fuimos todos corriendo hacia el lugar donde los demonios se estaban matando entre ellos mismos. Felicia y Marcos trataban de separarlos pero era algo imposible. Atuam no estaba entre nosotros. Que raro. 

-¡Ya basta! -Dijo Felicia- 

No se que fue lo que paso. No se como fue que avance rápidamente hacia ellos y me puse entre medio. No podía ver mas que Christian lastimara a Elizeo de esa manera tan cruel. ¡¿Pero que rayos estoy haciendo?! Estire mis brazos hacia los costados en señal de que se detuvieran, pero parecia que ninguno iba hacerlo. 

-¡Milena! 

Fue en ese momento, que vi a Elizeo detenerse de golpe. Me tomo de la cintura y me tiro a un costado para que me corriera de ese lugar. Para que no interviniera. Christian puso su mano frente a la cara de Elizeo, y este comenzo a retorserce del dolor. 

-Gritando de dolor-

-No, no por favor, dentente

-Este estupido va a pagar todo lo que el señor del inframundo nos hara si se entera de que esta enamorado de un angel 

¿Que cosa..?