Entwined Bonds

CAPITULO 4

La semana comenzó tranquila, aunque esa calma me ponía nerviosa. Como si el silencio fuera la antesala de algo inesperado. Y no me equivocaba.

El miércoles por la tarde, Maribel y yo salimos de clase con paso relajado, hablando de libros y de lo mal que nos había salido el examen de literatura. Mientras caminábamos por el pasillo, Ryan apareció de la nada, con su sonrisa tímida y un libro en la mano.

—Hey, Maribel… esto es tuyo, ¿no? Lo dejaste en la biblioteca ayer —dijo, extendiéndole su ejemplar de Orgullo y prejuicio.

—¡Ay, gracias! —respondió ella, con las mejillas color fresa—. Pensé que lo había perdido…

—Imposible que pierdas a Darcy —bromeó Ryan, y ambos rieron.

Yo los miraba con una sonrisa. Ryan era el estándar de lo dulce, lo correcto, lo bueno. Le abría la puerta a Maribel, la escuchaba cuando hablaba, y ahora… la hacía reír. Ella se ruborizaba con cada palabra. No hacía falta ser experta en lenguaje corporal para saber que esos dos se gustaban.

Cuando se despidió, Ryan le rozó la mano al entregarle el libro, como si buscara excusa para tocarla. Maribel se quedó mirando el suelo un instante, sin saber qué decir. Yo me acerqué a su oído con una sonrisita burlona.

—Te está cayendo el azúcar, Maribel.

Ella me empujó con suavidad y se rió, aunque su rostro seguía rojo. —Cállate, Angelica…

Más tarde, me dirigía sola al casillero cuando lo vi. Dylan.

Estaba allí, apoyado contra la pared, justo al lado del mío. Como si hubiera calculado la hora exacta en que pasaría por ahí. Llevaba una chaqueta negra y su mochila cruzada al pecho. Al principio pensé en seguir de largo, pero nuestros ojos se cruzaron.

—Hey —dijo con esa voz suya, grave y un poco ronca.

—¿Qué haces aquí, Dylan? —pregunté sin rodeos.

Él se encogió de hombros. —Esperaba verte.

No supe qué responder. Me limité a abrir mi casillero, mientras sentía cómo sus ojos me seguían. El corazón me latía un poco más rápido de lo que me gustaría admitir.

—¿Te asusté con el mensaje? —preguntó.

—No —mentí—. Solo no entiendo por qué quieres hablar conmigo.

Dylan sonrió, esa sonrisa ladeada que parecía más un reto que un gesto amable.

—Porque quiero conocerte. No todo el mundo me interesa, ¿sabes?

Me giré para mirarlo. —¿Y por qué ahora?

—Porque antes era idiota… y porque ahora veo cosas que antes no veía —dijo, bajando la voz—. Como que te ves increíble cuando te enojas. Y que hablas con sinceridad aunque nadie lo haga.

Sentí mis mejillas arder. ¿Estaba coqueteando?

Me crucé de brazos. —¿Y qué quieres que haga con eso? ¿Me sonrío y te doy las gracias?

Él rió por lo bajo. —No. Solo quiero que sepas que me importas… aunque tardes en creerlo.

Y con eso, se marchó. Sin esperar respuesta. Sin pedir nada.

Volví con Maribel unos minutos después, todavía confundida. Me miró con curiosidad al notar mi cara.

—¿Todo bien?

Asentí, aunque mi cabeza era un torbellino. —Sí… solo que Dylan fue raro.

—¿Raro cómo?

—Del tipo que lanza indirectas raramente directas y después se va caminando como si estuviera en cámara lenta.

Maribel soltó una carcajada. —Eso suena… bastante Dylan.

La miré de reojo. —Y lo tuyo con Ryan… ¿vas a admitir que te gusta?

Ella suspiró, abrazando su libro. —No sé. Es dulce, y me hace sentir segura. Pero también me pone nerviosa… y eso me gusta.

La miré en silencio un segundo. Maribel, la lectora empedernida, estaba cayendo. Y yo, por mi parte, no sabía si Dylan me confundía más por lo que decía… o por lo que despertaba en mí.

Esa noche, al mirar mi celular, vi otro mensaje de Dylan.

"Te debo una canción. Algún día te la cantaré. Que descanses, Angelica."

Mi pulgar tembló sobre la pantalla. Lo releí tres veces.

Y por primera vez, respondí.

"Mejor que no desafines."

Minutos después, solo un emoji con gafas de sol apareció como respuesta. Y, sin querer, sonreí.



#8507 en Novela romántica

En el texto hay: 15 capítulos

Editado: 27.05.2025

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.