Enya: En busca del destino | Serie: Destino Sobrenatural.

Capítulo 18.

***

“Recuerdo que me fallé, consentí la venda en mis ojos, por la falsa necesidad de formar parte de… me acostumbre, y aunque, tiempo después, quise ofrecer una ceguera igual a quien amé, esta me explotó e hirió bien, muy bien”

 

KENRICK FAO

— ¡Alpha! Tenemos un problema.

 

Entra corriendo mi beta.

 

—Un grupo grande de proles están cerca de las fronteras, los vigías están deteniendo la situación, pero no podrán contenerlos mucho tiempo, llegaran aquí en menos de una hora.

 

—Activa la alarma y envía a Liam que se encargue de llevar mujeres y niños a los refugios, prepara a los guerreros a salir y envía a alguien que localice al elfo se lo necesita de regreso a la manada.

 

—Si… ¿crees que Lucían está detrás de esto?

 

—Definitivamente, él regresa a su castillo y de pronto miles de proles merodean la frontera en plan ataque. —explico, levantándome para dirigirme a la salida.

 

—Kenrick hay algo más que no me cuadra…estas proles parecen más organizadas, andan en grupos…

 

—También me he dado cuenta de eso, estas proles en definitiva están siguiendo órdenes, están siendo controlados. —digo, esto último apretando mis puños a ambos lados.

 

— ¿Crees que Lucían los controla?

 

—Probablemente, no sabemos cuáles son las habilidades de ese chupasangre, pero, de que está detrás de esto, lo está. Envía las órdenes, buscare a  Kenia.

 

Salgo del despacho y me dirijo en busca de mi hermana. Camino por las habitaciones de la mansión hasta localizar la de ella.

 

—Ese Lucían es un fastidio. —gruñe, mi lobo.

 

—Sí, así que prepárate para arrancar cabezas.

 

—No me tienes que decir lo que tengo que hacer.

 

—Eso espero. Últimamente estas irritable.

 

—Yo no soy irritable, tú lo eres. Además ya sabes lo que quiero.

 

—Sí, si, ya lo sé. Estamos en ataque ahora, preocúpate por eso.

 

—Preocúpate por eso…—me imita mi lobo en tono burlón.

 

Cierro link con él porque seguirá con el tema de nuestra mate.

 

Abro la puerta frente a mí para encontrar a mi hermanita cargando su osito de peluche al lado de la cama. Al verme corre en mi dirección. La alzo en brazos.

 

— ¿Cómo estas princesa?

 

— ¿Por qué todos están corriendo?

 

—Ahora todos están yendo al refugio, tú también iras con ellos y esperaras en calma.

 

—Mamá y papá también están ahí.

 

—Todavía no regresan de su viaje. No te preocupes, no pasara nada. Obedece a los guardias y no salgas del refugio hasta que sea seguro.

 

Llevo a Kenia al refugio con los demás. Al regresar veo a Ludovic esperando con guerreros para dirigirnos a la frontera.

 

—Todo preparado, Alpha.

 

—No quiero prisioneros, ataquen en grupos, no descuiden sus cabezas, ellos no dudarán. —ordeno, en voz de Alpha.

 

Todos asienten y nos sumergimos al bosque.

 

Al llegar encontramos en batalla a nuestros vigías, nos convertimos y nos unimos a la pelea. «Como lo pensaba, estos no son proles normales, en definitiva están siendo controlados».

 

Un grupo de ellos se acerca y en un rápido movimiento los derribo, uno salta sobre mi lomo y me muevo con brusquedad arrojándolo contra un árbol, siento un fuerte dolor en la pata, me giro hacia el dolor, y tengo clavado una daga, «imposible, las proles no utilizan armas», con el hocico intento jalar el mango de la daga, pero es inútil, otro grupo de ellos se aproxima, así que levanto la pata en el aire, y me posiciono para atacar. Ludovic aparece a mi lado.

 

 — ¿Estas bien, Kenrick? —me habla, por el link de lobo. —Sí…Acabemos esto, ¡A por ellos! Le hago señal con la cabeza y nos lanzamos contra el grupo. En un rápido movimiento arrancamos sus cabezas. Me acerco a oler los cuerpos y capto un olor diferente mezclado con las proles. Vuelvo a mi forma humana y quito la daga para luego volver a convertirme.




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