Epifanía (master Of the Bussiness #1)

Capitulo Cinco ✎

Cumplieron la meta, asi que disfriuten el capitulo.......

 

Capitulo Cinco

 

Jakov
 

Traía un dolor de cabeza demasiado grande en los momentos que venia del centro comercial cuando fui a recoger a mi madre y a Mia. Lastimosamente mi madre regresaba a Estados unidos hoy mismo, así que para poder despedirse de Mia me pidió que si podía llevársela un rato al centro comercial a la cual yo accedí sin dudar porque desde que levante sabría que no sería mi día.

La empresa era un desorden desde que llegue a tempranas horas, el dolor de cabeza comenzó cuando Conrad apareció dándome la noticia que los proveedores con los que trabajamos desde hace más de muchos años para los bloques de cementos y tapicerías se declaraban en bancarrota la noche del día anterior, dejando con ellos un gran papeleo que arreglar y miles de libras la cual reponer por las demandas que tenían debidos a los contratos con las empresas. Entre ellas Sky Desing Inc.

Mi madre venia hablando sobre no se que tema, la cual hacia que mi cabeza aumentara doblemente, ya traía muchos problemas encima y el mayor de ellos era por la cual íbamos camino de regreso a mi casa. Había dejado en manos de Krisa la búsqueda de una niñera para Mia ya que ella más que nadie conocía mis exigencias referentes a mi hija, y tenía un poco asegurada que no tendría a nadie por lo menos dentro de una semana más. Pero fue un error subestimar a una mujer con el carácter y la decisión que mi amiga tenía. Me sentía aliviado saber que abría alguien cuidando a mi hija y yo podría irme a trabajar tranquilo sin tener que preocuparme que Mia estuviera sola.

—¿Hijo me estas escuchando? — la observe de re ojo mientras veníamos en la calle principal ya cerca de Hempstead.

—Lo siento mama ¿Decías?

—¿Es un mal día hoy? Acabo de preguntarte

—Si lo es, la verdad que lo es.

—¿Hablaste con los proveedores ya?

—aun no lo hago personalmente yo, pero Browen se ocupa de eso.

El dolor de cabeza aumentaba aún más cuando una ratilla de cuatro años, casi cinco (porque se enojaba que le dijera que aun tenia cuatro años) venia cantando las canciones de las caricaturas a notas que no sabia que el cuerpo humano podía llegar.

Mi madre vio la molestia que traía así que  decidió cortar la música y pasarle su móvil  a Mia para que jugara, al principio protesto, pero en cuestión de segundos cambio de parecer. 

—Gracias, necesitaba un poco de silencio para poder pensar.

—No me lo agradezcas. Se que cuando te quedas callado mucho tiempo  quiere decir que tu estado es de un humor de mierda.

—¿Es un halago o una ofensa?

—Te pareces a tu padre cuando venia de trabajar y traía la misma cara que tu traes en estos momentos.

—Eso quiere decir que es una ofensa. — le conteste y fue imposible no sonreír ya que ella hacia eso a menudo.

Mi madre estaba por contestar cuando una llamada de Krisa me cayo desde la pantalla del automóvil.

—Krisa.

—¡Hola tía Krisa! — contesto una ratilla desde la parte de atrás del auto.

—Hola mi amor….Jakov ¿ya vienes en camino?

—Aun sigo en la principal, este tráfico va a terminar de cortarme la cabeza

—¿Te duele la cabeza, te sientes mal?

—Me duele la cabeza sí. Me siento mal. No.

—Yo creo que son ya las facturas de los años, cuando tenia tu edad los achaques comenzaban a molestarme ya muy seguido. — conto mi madre mientras veía por la ventana.

—¿Achaques? — respondí escéptico— ¿Cuántos años crees que tengo? Aún estoy en los treintas, esa mierda no me sucede aun.

—Tienes treinta y cinco papi, no treinta, no mientas, tú me has dicho que los que mienten reciben castigos muy feos por mentir.

—Gracias cariño, tu padre aun es un niño que necesitan que lo corrijan para que se comporte mejor. — replico Krista desde la llamada. Aprete un poco las manos al volante ya que mi humor empeoraba cuando empezamos a avanzar con dirección hacia casa. Y no quería desquitármelas con las personas que solían aguantarme en todas mis facetas.

—Krisa, llamabas para algo importante, porque si no es así daré por finalizada la llamada. — respondí tajante cambiando mi humor completamente rápido la cual hizo que mama y Mia me quedaran viendo con los ojos muy abiertos.

—Mira Pavel te diré una sola cosa, fui muy clara cuando te dije que solo necesitaba la presencia de Seren para conocer a la nueva niñera sabiendo el estado de cómo estaba la empresa; aún estoy estresada y no solo por eso ando desquitándome contigo. Si no estas de humor para esta mierda, puedes dejar a Mia y Seren en la puerta y lárgate de nuevo para Sky Desing. Te pedí que estuvieras tranquilo y fueras amable, pero si no puedes hacer algo tan simple entonces lárgate.

El sonido que la llamada había finalizado hizo eco por todo el auto mientras nos acercábamos mas a las residencias. No me dio tiempo para poder procesar algo más ya que una nueva llamada entro en el ambiente, esta vez tratándose de Bob.




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