Érase una vez

CAPÍTULO 4: "Cicatriz"

Dato: Si el capítulo tiene en su título comillas (") es un capítulo Flashback.

 

14 años, septiembre.

Se ha vuelto normal esperarla tanto tiempo en sus propias invitaciones, me hace pensar que soy un completo estúpido por creer que por esta vez, solo por esta vez, ella sería capaz de llegar a tiempo.

Pero... ¿Cuál es el objetivo de Rose de que viniese al parque a las 7:00 am?... ¿Si aún no clausura?

Puedo verla a los lejos, lleva puesto unos jeans azules, su jersey blanco y un polo medio guinda bajo este, siempre le ha gustado vestir de manera sencilla, aunque no le queda nada mal.

Con pasitos lentos y curiosos se acerca donde me encuentro, me parece gracioso y adorable a la vez. Sin embargo, eso no quita lo molesto que me encuentro ahora mismo.

-Holi.-Dice Rose, mientras me saluda con la mano de manera formal.

-¿Has visto la hora?.-Pregunto algo molesto, mientras recibo indignado su saludo.

-Sí, perdón por eso. Ya sabes como soy.-Me sonríe intentando minimizar mi molestia en este caluroso día.

-Imagino que te volviste a dormir.-La conozco como si fuese mi hermana.

-Estás en lo cierto.-Sus rulos tan desordenados, me demuestra que mi teoría es cierta.-Esta vez quería llegar temprano, pero me tire a mi cama por tres segundos y ya me encontraba durmiendo.

-Es que eres, un poquito... tontita.-Sonrió de manera burlona.

-¿No te has visto al espejo, Tom?.-Me empiezo a reír por alguna razón.

-Ya no importa.-Señalo el parque confundido.-¿Por qué estamos fuera del parque?

-Vamos a entrar.-Su tono de voz me indica que está muy decidida en ingresar a cualquier costo.

-Rose, este parque abrirá en una semana.-Intento regañarla, pero no lo consigo.-Sé paciente.

-La traes.-Me toca el hombro.

-¿Qué?.-Ella salta un muro y logra entrar al parque.

-Me debes atrapar, tontito.-Se adentra al parque, casi de manera instantánea.

-Carajo.-Murmuro, y saltó el mismo muro que evita el ingreso al público.

El parque se ve impecable, hay árboles, mucha pasto, flores, incluso puedo ver asientos de madera y concreto posicionados de manera perfecta. Al ser un lugar tan grande, es muy fácil perderse dentro y más si es la primera vez que ingresas.

Localizó a Rose a lo lejos, es muy rápida y esa es mi desventaja. Tengo la mala suerte de competir junto a la atleta más rápida de su preparatoria. Intento acelerar el paso, aunque fracaso en mi intento.

-¡Qué lento eres Tom!.-Realiza un giro brusco e inesperado.

Intento imitar el movimiento a tiempo, pero resbaló contra el húmedo pasto. Me apoyo al suelo con la palma de mi mano derecha y siento un pinchazo sobre este, dolió de forma intensa aunque fue momentánea, lo ignoró por el momento, no me resultó mucha molestia.

Cada vez aceleró más y más. Hasta acercarme lo suficiente a ella, doy un brinco sobre un asiento de madera y por suerte caigo de pie, esto me da un pequeño impulso.

Nuevamente, ella gira a la derecha, pero esta vez logro tomar otro atajo, menos doloroso, obviamente. Estoy a centímetros de ella, puedo sentir mi victoria. Hasta que toco su hombro con las puntas de mis dedos.

Me detengo de forma gradual, pues estoy muy agotado y necesito respirar. Traigo mi garganta cerrada y es una de las sensaciones más desagradables que he llegado a sentir en mi vida.

-Pensé que eras más lento, Tom.-Ella también intenta tomar un respiro, se nota muy cansada, se le ve roja como un tomate.

-Mierda.-Miro la palma de mi mano derecha, el dolor no que tenía hace un rato, no llegó a desaparecer.

Mi sorpresa es inmediata al ver un río de sangre caer de la palma de mi mano.

-¡TOM!.-Ella sostiene mi mano y observa el agujero.-¡QUE PASO!.-Se saca su jersey blanco e intenta cerrar la herida.

-Me resbalé, al parecer caí sobre algo puntiagudo.-Siento un ardor inexplicable.-¿Tiene profundidad?

-Calma, todo saldrá bien.-Me amarra su jersey, y aplica presión.-Fui una estúpida, no tuve que haberte obligado a hacer esto.

-La culpa fue mía, por no saber correr.-Me siento un poco mareado.

-Vámonos, Tom.-La prenda, paso de ser blanca a roja en segundos.

Ella me guía hacia la salida que estaba a varios pasos de aquí. Por el mareo y por el malestar en general, empiezo a perder la noción del tiempo.

Tras parpadear un par de veces aparezco en la puerta de Rose, y como siempre, no hay nadie.

-Creo que mi padre dejo unas vendas por aquí, espérame un momento.-Está buscando algo en el estante de su cocina.

-Es normal sentir que te duer...-Mi cabeza cae sobre la mesa y me doy un fuerte golpe en la frente.

-TOM levanta, ya los encontré.-Se sienta a lado mío.

-Está bien...-Levanto mi cabeza con mucha pesadez y la miro una vez más.-Rose, me siento muy mal.

Rose mete mi mano en un recipiente con agua helada, por un segundo calmó mi dolor. Después me seca con un trapo desechable.

-Deja que te desinfecte la herida.-Sostiene el agua oxigenada y me lo echa sobre la herida, sale espuma de ahí.-¿Te duele?

-Un poco, creo.-Con un algodón me soba la palma de la mano.-¿Me estás diciendo que puedes colocar tu dedo dentro del agujero?

-No lo sé.-Veo como su dedo traspasa mi mano.-En efecto, tu teoría es cierta.

-Tapa la herida, por favor.-Ella sigue limpiando.-Ver un agujero en mi mano, me causa náuseas.-Quiero vomitar.

-Dale un momento a que seque, se podría infectar.-Intenta tirarme aire y me causa gracia.-Creo que está mejor.

-¿Crees que cierre esta herida?.-Todo está pasando muy rápido.

-Espero que sí.-Sostiene las vendas y me ajusta la mano, el dolor es intenso.

-Mierda...-Murmuro.-Eso dolió mucho.-El dolor se intensifica.

-Calma Tom, toma esto.-Tiene una pastilla en la mano, abro la boca, ella los tira dentro de mi boca.-Es para el dolor, eso espero.-Me da el agua en la boca, y la paso con las pocas fuerzas que me queda.-Espero te recuperes Tom.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.