10.- ¿Quién te dijo semejante mentira?

Capítulo Diez

¿Quién te dijo semejante mentira?

Romina preparó el outfit de Alessia, después de una hora ya estaba lista, se miró en el espejo y una sonrisa se dibujó en sus labios.

Se sentía bonita, algo que no siempre pasaba cuando se miraba en el espejo, por primera vez en mucho tiempo se sentía segura de su ropa y de como se veía.

Fueron a la sala, Thomas estaba sentado con su celular entre sus manos, leyendo algo, ni si quiera se dio cuenta de que ellas estaban ahí paradas, hasta que su hermana habló.

―Ya está lista  —su hermano dejó de ver su celular y al levantar la mirada le sonrió ―Hom,  ¿Qué te parece?

―Luces increíble ―la miró directamente a los ojos.

―Gracias ―sonrió y se quedaron unos segundos mirándose.

—Sé que la belleza de Alessia nos deja sin palabras, pero ya váyanse que se les va a hacer tarde.

Salieron de la casa y se subieron al auto de Thomas, mientras él manejaba ella trataba de que le dijera a donde iban, pero lo único que salía de los labios del chico era un "ES SORPRESA".

Al pasar treinta minutos llegaron, aunque Alessia no sabía que hacían en ese lugar.

Bajaron del auto, caminaron un poco más hasta que vieron a Agustín.

―Ufff... Te ves  PRE-CIO-SA ―le dijo cuando estaba enfrente de ella.

―Gracias ―se quedó unos segundos en silencio ―¿Qué hacemos aquí? Mejor dicho, ¿en dónde estamos?

―Estás en un set de grabación ―respondió con una sonrisa, mientras extendía sus brazos señalando el lugar.

―¿En serio? ―preguntó sin poder creerlo, él asintió ―no me mientes.

―Yo jamás lo haría ―miró a Thomas y este desvió la mirada.

―¿Por qué? ―quiso saber.

―Estoy grabando una serie y como sé que te gusta la actuación quise que conocieras un poco de como es todo esto ―ella sonrió ―además, Thomas va a hacer una participación especial y pensé que era buena idea que vinieras ―Alessia se lanzó sobre él y le dio un abrazo.

―Gracias. 

Thomas los miró un poco incómodo, no sabía porque se sentía así al verlos tan cerca.

¿Por qué aquel abrazo había provocado  que él se tensara?

Porque una parte de él quería estar en el lugar de su amigo y que ella lo abrazara de aquella forma.

―¿Entramos? ―interrumpió y los dos se separaron.

Al entrar Alessia detalló el lugar, era como una casa de cartón que apenas estaban armando, mientras en el medio estaba el comedor y la sala de estar, detrás y a los lados no había nada, solo las cámaras para grabar.

 Las  personas caminaban de prisa de aquí para allá. 

Nadie podía quitar esa sonrisa de su rostro, nunca había estado en un set de grabación y la idea de estar ahí, le encantó, caminaron un poco hasta llegar con los demás actores.

Mientras Thomas hablaba con el director para ponerse de acuerdo en las escenas en las que iba participar, Agustín y Alessia estaban en la sala que prepararon los de escenografía para la siguiente escena.

―¿Me ayudas? ―preguntó con una sonrisa.

―¿A qué?

―A ensayar para la próxima escena, aquí está lo que tienes que decir ―le dio el libreto ―tú eres Fabiola.

―¿No crees que se molesten? ―preguntó preocupada.

―No te preocupes, eso no va a pasar, ¿empezamos? ―asintió ―¡Acción! ―dijo para dar inicio a su ensayo ―Fabiola, escúchame ―suplicó.

―¿Para qué?  para que me vuelvas a mentir ―sus ojos se cristalizaron ―yo confié en ti y tú... ¿Qué hiciste? 

En ese momento el libreto decía que tenía que bajar la mirada pero  no pudo al ver la facilidad con la que ella se desenvolvía, sacudió su cabeza y continuó con el ensayo.

―Déjame explicarte.

―No hace falta ―dejó caer una lágrima ―toda la confianza que te tenía la tiraste a la basura  —él se quedó callado ―¿Estás feliz con lo que hiciste? 

―¡DEJAME HABLAR! ―le gritó ―no seas injusta ―expresó un poco más calmado ―lo que pasó también fue culpa tuya ―ella negó con la cabeza ―al menos admite que no todo es mi culpa.

―¡Clásico de ti! ―lo señaló ―echarle la culpa a alguien más por tus actos.

Algunos de los presentes los miraban estupefactos.

Era buena y la química que tenía con Agustín en escena era realmente impresionante.

―Agustín ―interrumpió el director.

―Ahora vengo —se limpió la lágrima que derramó en la escena.

El director le explicó que cambiarían algunas locaciones del día de hoy, ya que tenían que avanzar con las escenas.

―Hola ―se dio la vuelta para ver quien le hablaba ―Alessia, ¿cierto?

―¿Cómo sabes mi nombre?

―Agustín se ha encargado de que todos sus seguidores lo sepan ―sonrió ―y porque tú fuiste a la premier de la película con Thomas. ¿Actúas?

―Me gustaría, pero por ahora no ―la chica que tenía enfrente la miró como si la analizara ―¿Por qué?

―Curiosidad ―sonrió ―lo haces muy bien y si le pones empeño y dedicación, llegarás muy lejos.

―Gracias.

―Elisa ―interrumpió Agustín ―¿De qué hablan?

―De lo bien que actuó el papel de Fabiola ―respondió mientras él ponía su brazo al rededor del cuello de su compañera de trabajo ―juraría que lo habías hecho antes.

—¿Verdad que es buena?

—Lo es. Agustín —pasó su dedo índice por su camina —nos vemos mañana ―le dio un corto beso en los labios —Alessia, un gusto coincidir ―se despidió y se fue.

―Ella es tu...

―¿Qué hacen? ―Thomas interrumpió lo que iba a decir.

―Nada.

―Vi que conociste a Elisa  ¿Qué te dijo?