Santiago
Estoy desesperado, hace meses que me he quedado sin trabajo, me despidieron, porque, por recorte de personal, ahora termine mi cuatrimestre en la universidad, e iniciare nuevamente pero que sucedería si no tuviera con que pagarla, simple, no podre seguir y terminar mi carrera de Psicología clínica, la verdad es que me cuesta mucha ya que mi madre ha enfermado y claramente sin el tratamiento no podrá resistir mucho, ya se me acabo el dinero que en tan solo unos meses atrás había recibido, me siento fatal, mi madre me necesita ahora más que nunca y quiero ayudarla pues me ha dado todo. Llego a mi casa después de una larga búsqueda sin frutos.
Un recuerdo viene a mi mente, mi tío Tony es hermano de crianza de mi madre, ellos se llevan bien y se cuidan, ha estado pendiente de mi madre siempre y cuando me quede sin trabajo se ofreció a darme un lugar en donde trabajaba, me negué, no me gustan esos tipos de trabajos, además de que a su vez tengo que trabajar hasta diez horas, el trabajo es bueno, paga bien pero trabajar en un bar, no es lo mío, a mi más bien me gusta ser atendido en el no el que atiende.
Mi situación no es buena y lo he pensado mucho, la verdad es que no me gusta mi decisión, creo que esto traerá muchas cosas a mi vida pero lo cierto es que debo hacerlo o moriremos de hambre, o más bien veré a mi madre morir antes de que pueda revertirlo, o es una o es la otra, y decido por la de mi tío… tomo mi celular y llamo, un timbre, dos timbres, tres, cuatro y atienden…
Sigo pensando y recuerdo que mi tío sabe todo de mí, hasta que taya uso de ropa, quien se encarga de eso, pues mi madre, ellos son muy unidos, se preguntaran porque solo hablo de ellos, les contare, mi madre es de Samaná, uno de los lugares turísticos de mi país, República Dominicana, playa, sol y arena, lo importante aquí es que mi madre, se crio allá pero vivió aquí en Santiago con mi tío al morir sus padres, después de eso mi madre conoció a mi padre pero el al enterarse de que yo venía en camino desapareció de la vida de mi madre, la dejo sola y en espera de un bebe, no lo odio pero tampoco lo amo, es asi, después de eso mi madre le pidió a mi tío que la dejara regresar a su tierra y tenerme allá y asi después de dos años y medio allá regreso conmigo y desde entonces solo vamos de paseo o a vacacionar.
De mi padre no se mucho a decir verdad, solo sé que ella lo conoció por vía de mi tío, que eran muy amigos, mi madre lo describe como un hombre cálido y dinámico, que le gustaba disfrutar de la vida, además de que siempre decía que el ocultaba algo, pero que ella nunca logro saber que era. Deje de preguntar por el como a los siete años, cuando me di cuenta que a mi madre le hacía daño mis comentarios. Veo el reloj y son las dos y media, me voy a preparar y salir a mi encuentro con mi tío, vivimos en la villa olímpica, está a 45 minutos de camino, salgo en mi moto conduciendo por las avenidas, esquivando y serpenteando los automóviles, me gusta sentir la velocidad y la brisa, sentir la adrenalina en mi cuerpo, se siente bien, llego a mi destino.