Lucía: he sido una buena madre a pesar de su apariencia. Porque eso definitivamente no se puede cambiar y no debemos de seguir nuestra conversación en un lugar como este.
Mariana: será mejor que me levante de mi asiento para no seguir molestándolos con mi presencia y yo me puedo ir sola a nuestra casa para que no se preocupen por mí.
Ella se levanta de su asiento para poder irse y nadie de su familia se lo impidió. Nada más que eso era de esperarse, ella empieza a llorar cuando sale, pero Dante la había observado desde lejos y lo único que le transmitía su mirada era tristeza, el sigue a Mariana y cuando llega a su lado toma su mano para impedir que se fuera.
Dante: no se puede ir así, señorita Harrison. Primero necesita tranquilizarse para que pueda llevarla a su casa y eso sucederá si me permite hacerlo.
Mariana: está bien, pero no entiendo ¿Quién es usted y de donde me conoce? Porque nunca lo había visto en mi vida y le agradecería que lo hiciera.
Dante: mi nombre es Dante Silverman Lawless. Además, todos los presentes la conocemos como una de las hijas de la familia Harrison.
Mariana: seguramente por mi apariencia física se dio cuenta de ¿Quién soy yo? y ahora que se su nombre no es necesario que me lleve a mi casa.
Dante: no debería de importarle mi nombre y si quiero irme lo hare. Solamente que nadie me lo puede impedir o prefiere que regresemos a la fiesta y si lo hacemos quiero que me conceda un baile.
Mariana: usted es el único hijo de la familia Silverman. No entiendo qué interés tiene en querer estar a mi lado y fue un gusto conocerlo, pero será mejor que me vaya.
Dante: es natural querer conocer a la mujer que será mi esposa. Porque eres mía a partir de este momento y mañana hablare con tu padre para pedirle tu mano en matrimonio.
Mariana: no quiero que diga que soy suya y nadie tiene derecho sobre mí. Estoy segura que mi padre jamás se la concederá, así que debo de estar tranquila.
Dante: recuerda que delante de ti esta un hombre que al fin ha tomado su decisión. Solamente que no tengo ninguna necesidad de pedirle permiso a nadie y si quiero me puedo casar contigo ahora mismo.
Mariana: debe de hacerlo de una manera correcta si quiere que lo acepte. Además, usted no puede estar enamorado de mí, si apenas nos acabamos de conocer.
Dante: no conozco ese sentimiento que muchos llaman amor y por alguna extraña razón me fije en ti, pero estaba en busca de una esposa y eres la única perfecta para mí.
Mariana: el amor es algo fundamental en el matrimonio. Siempre he soñado con encontrar un amor correspondido y a su lado jamás lo tendré, eso significa debemos de seguir caminos diferentes.
Dante: nuestros caminos estarán unidos. Porque te convertirás en mi esposa, así que para que no te alejes de mi te llevare conmigo y te cuidare en nuestra casa.
Mariana: acaso me piensa robar el primer día de conocerme. Eso solamente pasa en las películas y sería imposible que lo hiciera, ahora lo único que quiero es irme de este lugar.