Eres Mía Nena!!!!

CAPITULO 28

LIAM

Era la noche de la cena antes de la boda. Estaba muy emocionado por mis compadres, Thomas merecía ser muy feliz. Él era un tipazo de hombre, siempre fue mi ancla a la realidad cuando tenía mis broncas con la vida.

Estábamos esperando a nuestros amigos Felipe, Carlos y Dylan que volaron para acompañar a nuestro amigo en su día importante.

Mi novia había organizado todo, el lugar estaba muy bien decorado. Espero que se inspire de esa manera cuando toque nuestra boda, porque pensaba entregarle el anillo para que de una vez sea mía para siempre y como manda la ley.

−¡Aquí estas! –Sacándome de mis pensamientos hacía acto de presencia la mujer de mi vida y mi futura esposa. La futura señora Smith. – hola amor….

−Estabas lejos ¿en qué pensabas? Porque hace varios minutos que te estuve llamando.

−¡Ah sí! No te escuche amor, disculpa. Estaba un poco distraído –Con un tierno beso la atraje hacia mí, estaba más bella que de costumbre. Sus ojos tenían un brillo especial que nunca antes había visto en ella, además de su muy elegante vestido color verde olivo que le llegaba hasta los pies los cuales eran adornados por unas zapatillas taco medio color dorado y su larga cabellera rubia que le caía a su sexi trasero en muchas ondas. –Nena, te ves tan radiante que me dan ganas de subirte a mi hombro e irnos lejos de este lugar y hacerte el amor hasta amanecer. –Me acerque a su oído para susurrarle esas palabras con la intención que surtieran efecto y ella me pidiera que nos fuéramos.  

−Eso suena muy tentador, −Me regaló una sonrisa pícara −pero sabes que esta noche es de los novios y tenemos que acompañarlos. Además, necesitamos hablar de algo muy importante, pero eso será luego.

−¿Sucede algo contigo? –Al momento de escuchar esas palabras me preocupe porque habían pasado solo dos días desde que Thomas y yo la llevamos al hospital y yo no estaba muy convencido de que ella estuviera tan bien como me quería hacer creer.

−Descuida amor, no es nada grave. Ahora no es el tiempo ni lugar para nuestra conversación. –Al momento que iba a indagar más vimos los chicos llegar.

Todos fuimos a recibirlos. Estábamos muy alegres de volver a reunirnos después de un largo año sin vernos. Después que somos adultos y tenemos responsabilidades es más complicado reunirnos.

Reunidos disfrutando de una música ambiental estábamos riendo de los malos chistes de Thomas que como siempre le gustaba hacernos pasar el mal rato y hacernos escuchar por horas cuentos muy malos.

−Quien iba a decir que después de tanto tiempo nos volveríamos a ver todos juntos como cuando conocimos a la bella Danna en el Ferries camino a Puerto Rico hace más de cinco años –dijo Felipe mirando fijamente a Danna que estaba sentada a mi lado con un vaso de jugo de frutas, me dijo que no se sentía bien del estómago y prefería no tomar alcohol. 

−¡Chicos! Ya no somos los de antes –respondió Dylan, −Ya algunos estamos casados y otro camino a eso, aunque tienes tiempo con nuestra querida Alina que pienso que no cuenta –agrego.

−¿Y tú Danna, ya te casaste? –preguntó Felipe con curiosidad en sus palabras.  

−Aun no –respondió mirándome como buscando una explicación a su corta y firme respuesta.

−Pensé nunca más volver a verte después de lo que le hiciste a nuestro amigo Liam. Andaba que daba asco como alma en pena por ti. –Para nuestra sorpresa Felipe volvió a revivir una época de mi vida que quisiera borrar.

A Danna se le cambio el semblante y se veía incomoda, no era justo que mis amigos la atacaran después de todo lo que ella tuvo que vivir y yo no sabía nada.

−Caballeros. Les voy a pedir que no se toque ese tema, es tiempo pasado y en esa época nuestra familia pasó por mucho sufrimiento del cual ustedes no estuvieron enterados. Además, Liam y Danna son bastante grandecitos para resolver cualquier problema que tengan –dijo Alina un poco molesta en sus palabras y no era para menos que en la cena de despedida de su boda los chicos sean tan cruel con mi Nena.

Hubo un largo silencio que fue muy incómodo, pero todo acabo cuando fuimos convocados a la mesa a cenar.    

Había varias mesas redondas con diez sillas cada una ocupadas con las amistades y familia de los novios.

La cena estuvo todo muy deliciosa. Entre risas, el ambiente y la buena compañía las tenciones se disiparon para darle paso a la armonía.

Tenía la esperanza que los padres de Danna vinieran a la cena, pero llegaran mañana a la ceremonia. Me sentía nervioso y ansioso a la vez, necesitaba que las cosas se dieran como mi Nena deseaba.

Sin darme cuenta me perdí en su mirada. Amaba que mi Nena me mirara como si yo fuera su universo, estaba tan feliz desde que acepto darme otra oportunidad. Queríamos que las cosas fueran lentas, pero les juro que no podía aguantar un día más sin decirle a nuestros amigos que estábamos junto de nuevo.

Pasaban más de la media noche, Danna me hacía señas que quería irse a descansar. Me comentó que participaba en la cena por el compromiso de los novios porque no se sentía muy bien; de vez en cuando se daba una escapada para descansar los pies y no era para menos, el doctor le pidió que tuviera descanso y solo se estresaba con los preparativos de la boda porque la novia se volvió un desastre.



#5105 en Novela romántica

En el texto hay: pasion, amor, amor primero

Editado: 13.11.2024

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