Cap 28 - Horroroso baño

Narra Lumina:

Abrí la regadera pero comenzó a salir un liquido rojo al cual reconocí como sangre, no pude evitar soltar un grito de sorpresa cuando se comenzó a escribir en la pared una "c", luego una "u", después una "i", luego una "d", después "e", luego una "s" por último una "e", ahí me di cuenta que escribio "Cuidese" luego un estruendo provoco que gritara de sorpresa otra vez.

Al darme la vuelta me encuentro con chocolate con los ojos cerrados y extendiendo una toalla, la tomo y el abre los ojos al mirar el agua callendo en la regadera se sorprende y me envuelve en sus brazos.

— ¿Como paso esto? San zardonil es un lugar seguro-dice chocolate

— ¿Que? ¿Donde estamos?-digo

— San zardonil-dice

— ¿El New York de los bosques?-digo

— Si exacto-dice

— ¿¡Que caramba hacemos acá!?-digo histérica

— Calmate, vinimos aca porque mis padres quieren conocerte-dice

— Ya conocí a tu padre-digo

— Si pero no a mi madre-dice

— Quiero a Melody y a Alejandra acá-digo

— Preciosa yo te puedo proteger, estas segura conmigo, yo soy tu mate ¿No podrías confiar en mi?-dice

— No es eso chocolate, no es que no confía en ti pero en estos casos necesito a Melody ella sabe de estas cosas mucho mas que nosotros juntos-digo

— Ella podra saber mucho mas de esto pero yo soy tu mate, te protegere con mi vida si es necesario ahora vámonos vístete que vamos a la ciudad-dice

— ¿A que?-digo

— A buscar a mis padres ir a su mansión y buscar un baño para ducharnos tranquilos, te aseguro que en la casa de mis padres no entra nadie peligroso ni hace esas bromas-dice

— ¿Y por que? ¿Quienes son tus padres?-digo

— Ven salgamos de aqui y te digo-dice

Asiento y ambos salimos de el horroroso baño, le doy una mirada rápida a la cabaña y me doy cuenta que sobre la cama hay ropa, hay una de hombre que tiene bermuda gris y una musculosa azul con plumas blancas mientras la ropa de mujer era un suéter gris con unos jeans negros rasgados.

— ¿Y esa ropa? No es para que yo me la ponga ¿Verdad?-digo

— Si-dice

— ¿Por que? ¿Sabes a cuanto esta la temperatura?-digo

— Creo que a 45°-dice

— Exacto no saldre con esa ropa-digo

— Esta bien, busca lo que quieras ponerte en el closet-dice sonriendo

Solo asiento y me dirijo a el closet, saco una camiseta blanca sin mangas, unos pantalones cortos vaqueros desgastados celeste y una zapatillas altas blancas, tomo la ropa y salgo de el armario y chocolate no se encuentra eso hace que se instalr un poco de miedo en mi.

— Estoy afuera princesa dejare que te vistas-dice chocolate

Solo asiento aunque se que no me puede ver, busco en un gavetero pequeño ropa interior y logro encontrarla, me quito la toalla y me coloco la ropa interior de forma rápida, me pongo la camiseta y luego el pantalón corto, me siento en la cama y me coloco las zapatillas, me encuentro una goma arriba de el gavetero y me hago una cola alta, veo a chocolate ingresar nuevamente en la cabaña pero ahora lleva puesta ropa.

— Muy bien ya vámonos antes de que me arrepienta de dejarte usar esa ropa-dice gruñendo

Yo solo ruedo los ojos y el me extiende la mano la tomo y ambos salimos de la cabaña, afuera de ella nos espera una limosina a lo que miro extrañada a chocolate.

— ¿Que me ibas a contar sobre tus padres?-digo

— Te lo digo en el camino-dice

Asiento nuevamente y ambos subimos a la limosina, el chofer recibió a chocolate con una sonrisa.

— Joven Matías-dice el chofer

— ¿Todo bien por allá? ¿Mis padres están bien?-dice chocolate

— Todo excelente solo que un poco mas ocupados de lo normal-dice el chofer

— ¿Y la enana?-digo

— La joven Marianela esta bien, solo que tuvo una pelea recientemente con los señores Cuomo pero se que le alegrara su presencia joven Matias-dice el chofer

El enciende el motor y luego algo se levanta tapando la vista a el chofer.

— Lo que quería decirte era que... Bueno no se como lo tomes y espero te sientas bien con mis padres y no les hables de señor, no les gusta mucho mis padres son unas personas muy amigables, tratalos como si fueran cualquier otra persona...-dice

— Ya suelta la sopa que me estas preocupado con lo que vas a decir, tal vez saltes que son demonios o yo que se-digo

— No, amor...-Le escucho rei levemente- No es eso ¿De donde sacas esas ideas? O ¿Algunas vez me has visto cola o cuernos?-dice

— Cuernos no porque yo soy fiel y lo de la cola no se a veces la veo-digo

El comienza a reír mientras se pone una mano en el estómago después de unos minutos de no entender ¿Por que se rie? El se detiene y me mira sonriendo.

— Bueno si tu lo dices tiene que ser verdad pero lo que quería decirte amor era que mi padre, el hombre que viste firmando papeles en la mesa la otra vez es un hombre muy importante en New York-dice

— Mínimo el presidente porque nadie es mas importante que el en New york-digo

Lo veo asentir lentamente mientras abro los ojos de la sorpresa.