Eres nuestra madre

CAPÍTULO 13

CAPÍTULO 13

 

Media hora antes de los putazos que le dio Jelena al sinnombre.

Lucas

Me encontraba caminando de un lado a otro pensando, inquieto.

—¿Podrías calmarte? —me dice Pablo—.

—No puedo, Jelena estaba rara, ha estado rara desde que Liana le dijo para ir a la discoteca. ¿No recuerdas cómo reaccionó cuando le propusiste ir a una?

—Sí pero tal vez sea que simplemente no le gustan las discotecas y accedió a ir con Liana porque la extrañaba.

—No, para mí que hay algo más.

—Lucas.

—¿Sí?

—¿Qué sientes por Jelena? —Me detengo y lo miro—.

—¿A qué viene esa pregunta?

—Bueno, es que te preocupas mucho por ella.

—Lo hago porque es la madre de mis hijos.

—Es la progenitora—me corrige—. Porque, aunque no te guste, Chloé sigue siendo su madre.

—Chloé dejó de ser la madre de mis hijos hace mucho tiempo.

—¿Y dejó de ser el amor de tu vida?

—¿Por qué me preguntas eso?

—Porque hasta donde recuerdo tú amabas a Chloé con todo tu ser.

—Eso ya pasó.

—¿En serio?

—Se supone que eres mi mejor amigo, ¿por qué me haces esto?

—Porque soy tu mejor amigo es que te digo todo esto,  no comiences una cosa cuando no has terminado otra.

Por un momento me quedé inmóvil, ¿era cierto lo que Pablo decía?

Simplemente ignoré mis pensamientos.

—No tengo tiempo para esto, debo buscar a Jelena. ¿Me vas a acompañar o no?

—Solo te voy a acompañar para que no hagas una tontería.

 

—Bien.

Con eso nos dirigimos hacia mi auto, le pedí a Carmen que cuide a mis hijos quienes ya están en sus camas. Ya en el auto Pablo me pregunta:

—¿Y en qué discoteca las piensas buscar? Porque te recuerdo que estamos en Los Ángeles, hay discotecas por todos lados.

—Sí, pero hay una discoteca que es de un amigo de Liana, me llevó a una vez y estoy seguro que es ahí donde fueron.

—Ojalá tengas razón.

Enciendo el auto y comienzo a manejar.

—Sobre lo que dije allá dentro —me dice Pablo—, lo dije porque no quiero que te hagas daño y mucho menos le hagas daño a alguien que no lo merece.

—Lo sé.

***

Hemos llegado a la discoteca y después de que Pablo usara sus encantos para que nos dejarán pasar rápido entramos. Hacía mucho ruido, comenzamos a caminar cuando nos encontramos a Liana con dos cócteles es sus manos.

—¿Chicos?

—¿Liana? ¡Qué sorpresa encontrarte aquí! —le dice Pablo—.

—¿Me crees estúpida? ¿Qué quieren?

—¿Dónde está Jelena? —le digo—.

—Le dije que me esperara allá arriba mientras iba por unos cócteles —Me señala una parte que está en la planta superior—.

Y sin más estoy dispuesto a subir hacia donde me ha dicho Liana pero antes de llegar al sitio indicado veo como un idiota jala del brazo a una chica, me dispongo a ayudarla cuando veo que ella le da un puñetazo, me alegro por un momento porque se podía ver nomas que se lo merecía pero a su vez me comencé a preocupar al darme cuenta que la chica que le metió el puñetazo era Jelena, también me di cuenta de que atrás de ella había una chica la cual parecía que se iba a caer, por suerte Pablo llegó rápido hacia ella y la sostuvo, visto esto, me acerqué porque a Jelena nadie la iba a tocar.

 

Actualidad

Jelena

Bien, nos quedamos en donde papá Morgan llegaba y hacía su entrada épica, cuando miré hacia atrás me di cuenta de que a Elizabeth la sostenía Pablo mientras Liana se acercaba a mí.

—Jelena ¿estás bien? —me preguntaba ella pero no podía contestarle—.

Sentía impotencia.

¿Qué hubiera pasado si yo no estaba ahí?

¿Alguien más la habría ayudado?

Y si nadie la ayudaba, ¿qué hubiese pasado con Elizabeth?

¡Ayúdame!

¡Ayúdame!

Sentía tanta impotencia que me puse delante de Lucas y le di otro puñetazo al idiota ese.

—Maldito imbécil —le dije y pensaba seguir golpeándolo hasta cansarme pero alguien me sostuvo—.

—¡Suéltame!

—Jelena, tienes que calmarte —me dice Lucas el cual era quien me estaba sosteniendo—.




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