Eres Tú | Watanabe Haruto

CAPÍTULO 11

El día que salí de compras...

— Disculpe, ¿Cómo es que usted sabe de Soomin? — Pregunté.

— Me presento. Soy una especie de chamán, y fui contratado por los padres de Soomin — Afloja el agarre de mi brazo — No puedo ver ni oír a los espíritus, pero puedo sentir su presencia.

— No estoy entendiendo ¿Qué tienen que ver los padres de Soomin y usted, con todo esto?

— Yo estaba en la casa de Soomin todo el tiempo, hasta que sus padres dijeron que ya ella no estaba ahí, y que ya se podía vender la casa — Suspira — Pero ellos no saben que ella sigue estando ahí.

No estaba entendiendo nada, todo era muy confuso. Pude notar preocupación en su mirada, así que decidí dejarlo hablar.

— No sé si usted sabrá que los fantasmas tienen un límite de años para estar aquí en la tierra — Se queda en silencio por unos segundos — Pero cuando me di cuenta de que usted hablaba en la casa, sabía que estaba Soomin con usted y que debía decirle lo que sé.

— Señor, me está preocupando ¿Qué es lo que pasa?

— Tienes que ayudarme joven. Tienes que encontrar algo que a Soomin le tenga mucho cariño, algo que la siga manteniendo aquí en la tierra.

— ¿Y para qué quiere eso? — Pregunté confundido.

— Como verá, Soomin ya ha cumplido esa cierta cantidad de tiempo y si no conseguimos eso, su alma se desvanecerá y estará en el olvido.

— ¿Co... cómo que en el olvido?

— Sí. Tienes que ayudarme a buscar eso para que no ocurra lo que acabo de mencionar — Dice un poco preocupado — Para que su alma esté en paz.

— Entonces, ¿Eso quiere decir que...

— Sí, después de que su alma esté en paz, ella se irá al lugar donde debe estar.

— Mis ojos se cristalizan por su declaración — ¿No la volveré a ver más?

— Joven, debes saber que ella no debe estar aquí y que es lo mejor que puedes hacer para ayudarla — Me da palmadas en mi hombro — ¿Puedo contar contigo para esto?

Era doloroso todo lo que ese hombre me estaba contando, no sabía que los fantasmas tenían un límite de tiempo aquí en la tierra. Así que, si eso es lo único que puedo hacer para ayudarte, lo haré.

— Sí, puede contar conmigo — Me paso mis manos por mis ojos para secar aquellas lágrimas que querían salir.

— Gracias, te dejo todo en tus manos Haruto...

...

— Eso fue lo que me dijo aquel hombre ese día.

— Ahora entiendo todo — Dices con la mirada perdida — ¿Entonces me queda poco tiempo?

— Sí — Te miro con preocupación — No sé cómo ayudarte. Pensé que al conseguir lo que más le tenías cariño, te ibas de este mundo a uno mejor.

Estaba perdido en mis pensamientos, se suponía que al encontrar lo que más le tenías cariño te irías, pero no fue así. Entonces, eso significa que no era la caja...

Días después...

— Haruto ¿Sabes si hay algo más que quieras en este mundo? — Pregunto un poco preocupado.

Con toda esa situación que me estaba consumiendo, ya no comía, no dormía bien, y mi salud era preocupante.

— Sí, hay algo — Me miras por unos segundos antes de desviar la mirada — Pero no creo que sea buena idea decirte — Dices nerviosa y a la vez preocupada.

— ¡¿Qué es?! — Me acerco rápidamente a ti — Tienes que decirme, tengo que ayudarte.

— No estás bien Haruto... Te lo diré cuando te recuperes — Te pasas una de tus manos por tu cabello — Cuando te recuperes te lo diré.

— ¡Yo no importo! Quien importa aquí eres tú Soomin — Empiezo a llorar nuevamente — Entién... delo..

— ¡Haruto! — Me agarras de los hombros — Si te digo, tal vez me iré y no quiero irme dejándote en estas condiciones. Si quieres ayudarme, primero debes recuperarte, yo estaré bien... Te lo prometo — Sonríes como si nada pasara.

— Lo haré... — Te abrazo.

— Gracias — Correspondes al abrazo dejando suaves palmaditas en mi espalda — Ahora deja de llorar, yo estaré bien...



#2652 en Fanfic

En el texto hay: fantasma, treasure, watanabe haruto

Editado: 10.10.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.