Narrador omnisciente
La noche es fría y el dolor de todos calan profundamente los huesos de cada una de las personas que están en ese hospital, experimentando dolores diferentes pero a la vez iguales. El chico esa noche sufrió un accidente en donde casi muere, de no ser por lo fuerte que es la unión que tiene con su querida Ámbar, la madre de Eloah tenía mucho tiempo de no ver a su hijo porque el se lo impedía, cada vez que ella llegaba a su casa, él se escondía o se perdía en la droga y en el vicio del póquer, siempre que ella lo volvía a ver lo encontraba con sobredosis en su cuarto o en el hospital por alguna paliza o por lo primero, como ahora que es diferente ya que está vez no fue su culpa, porque él había cambiado por la chica. Él a su padre no le importaba y solo estaba ahí por apariencia, el siempre le recordaba a su hijo lo basura que es, la repulsión que le da y la vergüenza con sus colegas billonarios que no sirven, solo para criticar vidas ajenas follar a jovencitas.
A diferencia de los padres del chico, los padres de la chica, son más generosos, amorosos y no se avergüenzan de su hija o de él por ser su novio, la madre de la chica ama mucho a Eloah porque ella misma ha lidiado con el dolor y su agonía, ella lo ama como a otro hijo más sin importar que consuma o esté con el vicio del póker, lo ama a pesar de todos su errores y su personalidad fuerte, ama el cambio que ha hecho por su hija y la relación de ellos que es impulsiva pero real, amorosa pero con pequeños errores que se arreglan con el tiempo, ama ya con locura a la pequeña criatura que crece en el vientre de su hija, que está sufriendo por su novio en ese cuarto de hospital, su hija en este momento es el reflejo de un cuerpo sin alma, un cascarón, ella está agonizando viva, se está perdiendo por él y él por ella estando en coma, y nadie puede ayudarlos con su dolor.
Esa noche el personal médico vio por primera vez que el amor es más fuerte que la muerte, esa noche el chico revivió pero para quedarse en coma sin saber cuanto tiempo, las enfermeros que lo atendieron a ellos, quedaron impresionados con la conexión tan fuerte que tienen, experimentan el mismo dolor, agonía y en sí sus emociones y su corazón son una mismo repartidos en dos cuerpos diferentes.
¿Cómo el amor puede ser tan fuerte y real? ¿Por qué tienen esa conexión tan especial? ¿Ellos son uno en dos cuerpos? ¿En su otra vida estuvieron juntos?
Las respuestas a esas preguntas nadie las tenían, ni lo harán nunca, lo que se puede responder es que la otra vida si existe, y ellos tuvieron también un romance muy lindo en su otra vida pasada, ella lo amo tanto como en está como en sus anteriores y se prometieron en todas sus vidas volver a encontrarse en sus próximas vidas y así se está cumpliendo su gigante promesa. Así ellos estén en dos punta diferentes del mundo, siempre se van a encontrar, aquí el amor rompió escrúpulos y corazones, como también dejo un parte de ese amor en esa chica.
Eloah es débil de mente, por eso es la razón de sus vicios, ahora depende emocionalmente de Ámbar y ella también creó una dependencia hacía él, la relación que ellos tienen es obsesiva y descontrola, pero lo más interesante es que se aman. A él lo crío una señora de la servidumbre, los primeros años de su vida ella lo pudo controlar, pero vio algo distinto en él, que era muy obsesivo y eso implicaba a que tenía un pequeño o gigante problema, que con el tiempo se iba a salir a la luz.
Ámbar Hamilton
1 mes.
Eloah lleva ya un mes en esa cama y no está mejorando, aunque los doctores digan que le hable, él parece querer rendirse y yo también. Se está perdiendo de mi embarazo, y así no es la vida que me imaginé, él sufre y yo también, es doloroso.
2 meses.
Tengo cuatro meses de embarazo y no quiero saber el sexo del bebé aún, porque Eloah no ha despertado de su sueño profundo, y hay veces en dónde deseo cambiar de puesto con él y ser yo quien esté en esa cama en coma.
— A el no le gustaría verte así mi querida Ámbar — dijo Sofi, estábamos comprando cosas para el bebé y no pude más, me eche a llorar.
— Lo extraño mucho, extraño dormir con él — solloce —, han pasado dos meses y aún nada Sofi.
Todos los días era aún más doloroso verlo en el hospital, estaba flaco con ojeras y había perdido su color de piel. No sé cuánto yo vaya aguantar viéndolo en ese estado tan deprimente.
3 meses.
— Eloah tienes que pararte de esa cama, ya no aguanto verte así amor — lloré, ya me sentía peor que él solo por llorar todos lo días, cada vez que lo visito. —, nuestro bebé está muy grande y ya casi tiene cinco meses, me gustaría que se llamará April si es niña y si es niño yo te dejo elegir su nombre.
Me duele verlo así en ese estado, su madre y mi mamá siempre me acompañan, así sea que su madre no le haya dado todo el amor del mundo, yo veo que ella sufre y mucho más que todos, ella debe de estar arrepentida de no abrazarlo o besarlo cuando pudo, yo sé que el dolor es mucho, pero se que Eloah donde sea que esté él está luchando para quedarse conmigo, yo lo siento a mi lado, su olor me persigue a donde sea que vaya y todo los días lo extraño mas que el anterior.
Se acerca su cumpleaños y el no despierta, pero yo pediré un deseo por él.
4 meses.
Ya pasó su cumpleaños y su mamá se vio muy mal de salud, mi madre está en un estado de shock que los médicos dicen que puede hasta quedar mal. Tengo una barriga de cinco meses y medio, lo peor del embarazo ya pasó, pero Eloah no mejora y tengo miedo de que venga a visitarlo un día y me digan que ya no hay más nada que hacer por él y lo desconecten de las máquinas. Tengo miedo mucho miedo, Sofía se está quedando conmigo ya que casi no duermo y la doctora me dijo que eso le hace mal al bebé, odio ir a las citas sola o con Sofi, porque no es lo mismo que ir con Eloah, aunque nunca lo ha visto.
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Editado: 16.02.2023