Capitulo 1: Aquella vez en la que mi gata se convirtió en una chica

Las puertas del vagón finalmente se abrieron dando paso a las olas y olas de gente entrando y saliendo del tren.

Naoto y yo salimos chocando con bastantes personas en el proceso, llegando finalmente a la salida de la estación luego de unos pocos minutos.

Caminamos por las concurridas calles llenas de estudiantes con nuestro mismo uniforme mientras trataba de no morir de sueño internamente, manteniendome consciente apenas gracias al café que tome en el desayuno está mañana.

Las vacaciones de verano acababan de terminar y las consecuencias de despertarme tarde durante 3 semanas consecutivas ya me estaban pasando factura.

Por otro lado, de alguna forma Naoto se veía fresco como lechuga. Es como si tuviera una skill pasiva llamada "Al que madruga Dios le ayuda" o algo así.

La gente así me da cierta envidia. Debe ser bonito no morir tanto de sueño cada mañana entre semana.

-Oye Naoto

-Mm

-Dime, si tuvieras que buscar a una persona de la cual solo sabes algunos datos muy generales ¿Como lo harías?

Pregunté casualmente.

-Hoy estás haciendo muchas preguntas extrañas

-Pasaron ciertas cosas

-Si lo dices así suena sospechoso. ¿Estás metido en algún lio?

-Algo así

-Ahora suena más sospechoso. ¿Estás bien?

Naoto sonaba genuinamente preocupado.

-Si, no te preocupes. Es solo que necesito encontrar a una persona. Es una chica de entre 14 y 15 años, de cabello negro y que tiene un lunar bajo el labio

-No parecen datos muy útiles. Tal vez lo más importante es el lunar. Ese puede ser un inicio pero, ¿para que lo necesitas?

-Si te lo contara no me lo creerías

-Oye de verdad me estás preocupando

-No, no es nada grave. Es algo más bien extraño y raro

-¿No tienes una dirección? ¿Un lugar donde buscar específicamente?

-No, solo esa descripción de su apariencia

Naoto lo medito por un momento antes de finalmente soltar su conclusión.

-Con esos datos puede ser difícil encontrarla, pero puedo preguntar por ahí si quieres

-Me harías un gran favor

El motivo de porque busco a esta chica se remonta de nuevo al día de ayer.

★★★★★

-Hermano... ¿De verdad estás seguro de que está chica es Nanami?

-Bueno, iteralmente se transformó en mi cara

-Aun así suena bastante difícil de creer

-¿Entonces como explicas sus características felinas?

Luego del repentino cambio extremo en la apariencia de Nanami, llame a mi hermana para que viniera a ver lo que estaba pasando.

Ella primero pensó que yo era un cerdo descarado que le pidió que bajara para ver cómo hacia cosas indecentes con una chica, ya que Nanami estaba desnuda, pero luego de explicarle la situación muchas veces, de vestir con una camiseta a Nanami y de mostrarle que sus orejas y cola de gato eran reales, termino por medio creerse mi historia, aunque obviamente seguía algo escéptica.

-¿Por qué no te ves sorprendido en lo absoluto con esta situación?

-Ya saque toda mi sorpresa cuando la vi cambiar

-Pero aún así te siento demasiado tranquilo. ¿Acaso no comprendes que esto no es normal?

-Lo comprendo y por eso te llamé. Para asegurarme de que no estaba volviendome loco producto del aburrimiento

Mientras Aiko y yo hablábamos, Nanami estaba enfrascada en una intensa cacería de una mosca que volaba por ahí, totalmente ajena al muy extraño suceso que acababa de acontecer y del cual ella era protagonista.

Claramente, que un gato de pronto se transforme en una persona no era para nada algo común, pero que otra cosa podiamos creer si acaba de suceder frente a nosotros, bueno, frente a mi.

-¿No hay alguna manera de asegurarnos al 100% que se trata de Nanami y no de una loca que se hace pasar por ella?

-En primera ¿por qué alguien haría eso? Y en segunda, lo único que podemos hacer para comprobarlo es hablar con ella

Aiko no parece del todo convencida con mi sugerencia, pero como es lo único que podemos hacer ahora ella decidió tomar la iniciativa y hablar con la chica gato que tentativamente podría ser Nanami.

-Em ¿Nana?

Dijo con cautela.

De inmediato, la chica volteo para mirarla.

-¿Que pasa Amia?

-¿A-Amia?

-Al parecer así pronuncia ella las sílabas que involucran la m, n o la ñ

Aclare la confusión de mi hermana y ella prosiguió con su intento de comunicación con Nanami (tentativa).

-Em, Nana, ¿De verdad eres tú?

Nanami (tentativa) ladeó la cabeza en señal de confusión ante la pregunta de Aiko.

-Niania es Niania

Contesto con seguridad como si fuera algo obvio.

-No me refiero a eso, me refiero a si realmente eres tú. Quiero decir, estás...muy diferente

La confusión se hizo aún más visible en el rostro de Nanami (tentativa).

-¿Que acaso todavia no lo has notado?

-¿Niotar que?

Aiko se acercó a mi para susurrarme al oído.

-¿Acaso no se ha dado cuenta todavia?

-Eso parece

Conteste yo en tono normal.

Me acerque a Nanami (tentativa) y me senté en el mismo sitio donde antes estaba Aiko.

-Nanami ¿Puedes darme la patita?

Sin dudarlo lo hizo de inmediato. Extendió la mano y la poso sobre la mía.

-Ahora puedes mirar mi mano

Nuevamente obedeció sin dudarlo.

Al hacerlo se dio cuenta de que algo andaba mal. Donde estaba su mano (pata) ahora se encontraba una mano humana, más pequeña y delicada que la mía pero que sin duda, era muy diferente a lo que ella parecía estar esperando ver.

-¡Amio! ¡Perdí mi pata!

-No es eso precisamente pero no vas desencaminada. Aiko ¿Puedes traer el espejo pequeño que hay en el baño?

-Voy

Aiko se levantó de dónde estaba y se dirigió rápidamente al baño. Cuando volvió con el espejo en brazos, me lo paso muy lenta y cuidadosamente. Tenía miedo de romperlo aunque no se muy bien porque si estás cosas no son realmente tan frágiles.