Maximo estaba parado en la esquina norte del parque, su corazón latía con fuerza mientras esperaba a Pablo. Sabía que se trataba de una trampa, pero también sabía que era su única oportunidad para salvar a Sophia y acabar con la guerra entre las dos bandas de la mafia.
Finalmente, vio a Pablo caminando hacia él. A medida que se acercaba, Maximo podía sentir el odio y la ira emanando de su antiguo amigo. Pero también podía ver algo en sus ojos, algo que sugería que estaba dispuesto a escuchar lo que tenía que decir.
Pablo se detuvo frente a él, con los brazos cruzados y una sonrisa burlona en su rostro.
—"¿Así que finalmente decidiste traicionar a tu propio bando y unirte a nosotros?" —, dijo Pablo con una risa sarcástica.
Maximo no se dejó engañar por su fachada. Sabía que Pablo había visto su mensaje y que estaba dispuesto a escuchar sus demandas.
—"No estoy aquí para unirme a nadie, Pablo." — dijo Maximo con firmeza. — "Estoy aquí para salvar a Sophia y poner fin a esta maldita guerra." —
Pablo lo miró con desprecio. —"¿Crees que puedes salvar a tu amada y acabar con la guerra al mismo tiempo?” — Con desprecio se expresa en un tono de coraje en su voz. — “Eres un iluso." —
Maximo sonrió. —"Sé que puedo hacerlo. Pero necesito tu ayuda." —
Pablo frunció el ceño. —"¿Mi ayuda?” — Con tono sarcástico y riéndose de Máximo. — ¿Por qué debería ayudarte después de todo lo que has hecho?" —
—"Porque si no lo haces, Sophia morirá." — respondió Maximo con seriedad.
Pablo pareció considerarlo por un momento antes de asentir con la cabeza. —"Muy bien, cuéntame tu plan." —
Maximo le explicó su plan de emboscar a los hombres de la otra banda de la mafia, utilizando a Maximo como cebo y a Pablo y sus hombres para atacarlos por sorpresa. Pablo parecía intrigado y aprobó el plan.
—"Voy a necesitar que confíes en mí." —, dijo Maximo. —"Necesito que sigas mis órdenes al pie de la letra si queremos tener éxito." —.
Pablo asintió. —"Entendido. Pero no pienses que esto significa que hemos vuelto a ser amigos.
Maximo sonrió. —"No lo hago, Pablo. Pero al menos podemos trabajar juntos para un bien mayor." —
Te dejo saber que ya mis hombres están en la puerta del lugar en que esta Sophia por entrar y los otros escondidos entre la gente." —
Al escucharlo, el corazón le palpito con fuerzas llenándose de felicidad y tranquilidad, solo le falta salir vivo de donde esta, ya que en cualquier momento se forma el caos, estando entre la vida y la muerte.
Así comenzó la trampa doble, donde Maximo se enfrentaría a la familia los Ochoa mientras lo hombres de Pablo estarían esperando en las sombras para atacar. Era una jugada arriesgada, pero Maximo sabía que no había otra opción.
La emboscada comenzó en un instante, justo cuando Pablo se acercaba a Maximo con un plan en mente. En ese momento, los compañeros de Pablo surgieron de los arbustos y empezaron a disparar contra los hombres del bando contrario que estaban escondidos. Fue una batalla corta pero intensa, con caídos en ambos bandos.
Mientras tanto, otro grupo de Pablo en paralelo a los sucesos del parque asaltaban el edificio donde tenían a Sophia. La operación fue rápida y sorprendente, ya que lograron neutralizar a los guardias que estaban en la entrada sin hacer ruido. En cuanto ingresaron, encontraron a Sophia amarrada y la liberaron rápidamente.
Pablo estaba luchando en medio de la pelea cuando su teléfono sonó. A pesar del ruido y el caos a su alrededor, logró sacarlo de su bolsillo y responder.
—"¿Sí?" — dijo sin aliento.
—"jefe, encontramos a Sophia." — dijo la voz en el altavoz al otro lado de la línea.
Pablo dejó de luchar por un momento, sus ojos se abrieron con sorpresa y alivio. — "¿Está bien? ¿Dónde está?" —
—"Está ilesa, pero asustada. La tenemos en un lugar seguro." —
—"Perfecto." — dijo Pablo, respirando profundamente. —"Manténganla allí hasta que todo esto termine. No quiero arriesgar su seguridad".—
—"Entendido, jefe." — respondió la voz.
Pablo colgó y volvió a la pelea con un nuevo ímpetu. Sabía que aún quedaba mucho por hacer, pero ahora tenía la tranquilidad de saber que Sophia estaba fuera de peligro.
Maximo se había unido a Pablo en la batalla y estaban luchando juntos. A pesar del peligro, ambos hombres se mantuvieron firmes en su posición y lograron derrotar a sus oponentes. En un momento, Maximo se vio rodeado por varios enemigos, pero Pablo lo defendió con su vida. Finalmente, la batalla terminó y los sobrevivientes del bando contrario salieron huyendo.
Maximo y Pablo se miraron por un momento. Maximo podía sentir la ira de Pablo, la tensión entre ellos parecía inminente.
—"Si alguna vez vuelves a acercarte a Sophia, juro por mi vida que te mataré." — amenazó Pablo con una mirada fría.
Maximo bajó la cabeza, sabiendo que no podía discutir con él. —"Lo entiendo." — dijo en voz baja; — "no volveré a molestarte." —
La tensión entre ellos se mantuvo durante unos segundos más antes de que Pablo se alejara, dejando a Maximo solo en el parque.
Maximo se quedó allí, sintiendo una tristeza profunda en su corazón. Sabía que nunca podría estar con Sophia, y que ella nunca podría ser feliz si él estaba cerca. Respirando profundamente, se alejó del parque, tratando de encontrar un camino para seguir adelante con su vida.
Maximo se alejó del parque con el corazón pesado, sabiendo que nunca podría tener a Sophia a su lado sin ponerla en peligro. A pesar de su dolor, entendió que lo mejor para ella era que se alejara y no se acercara a ella nunca más. Era una decisión difícil, pero necesaria si quería mantenerla a salvo.
Caminó por las calles vacías, pensando en su amor y en el sacrificio que tendría que hacer. Sabía que nunca podría olvidarla, pero también sabía que tenía que hacer lo correcto, aunque eso significara alejarse de ella para siempre.