CAPITULO 1

Capítulo 1

Harry 

Baje del autobús del trabajo ; Acabo de llegar de hacer un servicio, que duró más o menos un mes; Tome mi maleta y a mi mascota, es una cachorra de apenas tres meses  Pastor Belga y es la primera vez que me acompaña a un viaje, a pesar de que es pequeña, me fue de mucha ayuda; Me despedí de mis compañeros , tomé un taxi, y estoy de camino a mi casa.

(...)

Ya son las ocho de la noche, ya que llegue del servicio a las seis de la tarde y son dos horas de camino, de la base militar a mi casa; Entro a mi casa y todo está completamente oscuro, prendo la luz del pasillo que es lo primero que está al entrar, para conectar del lado derecho la sala, del lado izquierdo la cocina, junto de la antes  mencionada el comedor, junto de la sala, el baño para invitados y todo recto son las escaleras,para dar al segundo piso, donde estan habitaciones y demás.

Mi cachorra Nala entra a la casa después de mi, yo me dirijo a la cocina para preparar la comida de ambos, cuando escuchó ladrar a Nala, en la sala, me dirigí ahí, pero lo primero que veo es a una chica  dormida en un sillón, ella estaba vestida de negro, con un gorro sobre su cabeza, pero se podia ver que su cabello era rubio.

Me acerqué un poco más, su piel era blanca como porcelana , y se veía tan frágil; ¿Pero qué demonios estoy pensando?; Toque su mejilla y estaba fría, ¿Como es posible que ella se vea tan tranquila dormida en una casa de un desconocido? Yo no reconozco a la chica, así que no creo que ella me conozca a mi.

– Señorita– trataba de despertarla– Señorita– volví a insistir, pero no reaccionaba, revise su pulso y no encontre nada raro, estaba viva, mejor la llevo a una habitación, tal vez tuvo un día pesado.

La cargue a estilo princesa y salí de la sala para dirigirme  a las escaleras, que llevan a la segunda planta, Nala me siguió, los tres subimos, aunque todas las puertas de este piso está semi abiertas, Nala abrió la puerta con ayuda de su cabeza la cual está junto a la mía a mano derecha, la puse en la cama y le tape con una sábana.

Mi casa es muy grande para mi y para Nala, la razón por la cual la compre fue porque mis amigos suelen venir seguido, también porque esta será la casa para mi futura familia .

Cerré la puerta de la habitación y baje a la cocina para terminar la cena, por si acaso hice un poco más, si ella se llegara a levantar, pero no lo creo, se veía profundamente dormida; Tome un plato, me sirve para después tomar el traste de Nala y darle un poco de verduras con croquetas, debe crecer sana y fuerte para poder ser un gran perro de ayuda.

Nala la adopte en un tipo de refugio, me sorprendio muchisimo ver a una pastor belga en ese lugar, pero, decidí adoptarla, ella es mi fiel compañera desde que la conocí, ya no se separa de mí, me siento muy cómodo con su presencia y tampoco me siento solo.

Empezamos a comer, pero Nala hacia a un lado las verduras.

–No Nala, come todo o mañana te tocará doble y sin croquetas–Advertí; Se perfectamente que no le gustan las verduras pero las tiene que comer de una u otra manera.

Al final las termino comiendo, ambos terminamos y lave los platos, cerré con llave la puerta principal fui a checar las ventanas de la sala, cocina y por último el comedor, el comedor tiene un puerta que te lleva al patio, la cerré con llave y cerré la ventana de esta.

Subí a mi habitación, entré fui a mi armario deje un conjunto de ropa para dormir a gusto, entre a mi baño y me di una ducha corta, salí con una toalla alrededor de mi cintura, me puse la ropa, me acosté en mi cama, también Nala se acostó junto a mis pies y me quedé completamente dormido.

Al dia siguiente  

Me levanté a las cinco de la mañana, me levanté de mi cama, la acomode de nuevo rápido, me cambie de ropa por mi pans deportivo, me puse unos tenis negros, le puse su collar a Nala, su correa y bajamos, tome una manzana para mi y un hueso para Nala, terminamos de comerlo, y salimos volvi a cerrar la puerta con llave; Empezamos con un pequeño calentamiento, mas bien yo.

Este vecindario es muy bonito y tranquilo muy rara vez se escucha alguna queja o inconformidad, mi amiga me recomendó este lugar ya que ella también vive en este vecindario, ella está en un servicio, supongo. 

Empecé a trotar y después subí la velocidad; Ya llevo un buen rato, olvidé mi reloj, por lo cual no se que hora sea. De nuevo me dirigí a casa y me encontré a mi amiga con su maleta.

–Hola Harry, ¿cómo estás?- preguntó. 

–Hola Claire, bien y tú?- conteste y me acerque a ella.

–Algo cansada, acabo de llegar– me dijo.

–Si lo creo, ven te ayudo–Tome su maleta.

–Si, Gracias Harry – empezó a caminar hacia su casa–Por cierto, la Señora Amalia, me marcó y me dijo que alguien  entro a tu casa , por una ventana y que era muy noche, pues se le hizo raro, tambien me pidio tu numero, para avisarte, pero pues me hablaron en ese momento y le dije que yo te avisaba, y pues no tuve tiempo.

En ese momento recordé que tenía a esa chica... encerrada en mi casa… así que tenía que apresurarme para poder llegar a verla y por lo menos saber su nombre, también el porqué estaba en mi casa.