Es una apuesta

No puedes pasar

Manejamos por poco más de veinte minutos hasta llegar a una casa enorme dentro de un fraccionamiento en las afueras de la ciudad. Ya está oscureciendo y la música retumba por toda la cuadra. No sé cómo los vecinos soportan aquel sonido... Y más cuando parece que se prolongará hasta el amanecer. Doy un largo suspiro cuando Alex me abre la puerta para salir del coche. Ésta será una noche muy muy larga.

La entrada está atascada y puedo notar que la mitad de los presentes ya están perdidos, fruto de los miles de vasos rojos vacíos que yacen en el pasto.
Inmediatamente puedo notar que ésta no es una fiesta ni remotamente parecida a cualquiera a la que yo, o mis amigos, o cualquier persona de mi círculo social asistiría.

Siento la piel de gallina cuando unos chicos de más de veinte años se acercan en dirección a nosotros con dos botellas de tequila en la mano. No me dan buena espina... Simplemente sé que no debería estar aquí. ¿Por qué accedí a venir? ¿Por qué accedí a cualquier cosa que involucrara a Alex?

Instintivamente me coloco ligeramente detrás de él para evitar que las botellas se acerquen a mí. Sé lo que esos chicos harán. Nos darán a beber de esa botella llena de babas de media fiesta.

—Shot de bienvenida, princesa —dice uno de los jóvenes inclinando el tequila y se me hace un nudo en la garganta.

—Paso —digo ocultando inútilmente mi boca tras mi mano.

Vamos, sé que es tonto no acceder, ya que todo el mundo, hasta en las fiestas a las que voy, lo hace. Pero simplemente no es lo mío.

—Amiga, no puedes "pasar"... Si no lo haces simplemente no entras.

Me ve fijamente, con una cara tan seria que decido voltear a ver a Alex, esperando que mis ojos expresen mi deseo por salir de aquí. En eso, Alex decide decir algo:

—Vamos Daleck, no seas así.

—Va en contra de las reglas tener a alguien sobrio en la fiesta y lo sabes, amigo- declara el chico relajando su expresión.

—No te preocupes, te prometo que me encargo de eso —responde Alex dejándome con la boca abierta.

¿En verdad acaba de decir eso?

—¿Estás loco? ¡Prometimos que no pondrías en riesgo mi salud! —grito una vez que "Daleck" se aleja—. ¿Sabes que tomar alcohol pone en riesgo la salud de las personas? ¿Estás consciente de que esto podría acabar mal? Hasta crees que voy a perderme como aquellos que están tirados en el pasto a las ocho de la noche. Además, ¿por qué no puede haber nadie sobrio? ¿Qué planean hacer? ¿A dónde rayos me trajist...?

—Shhhh —susurra Alex acercándose a mí y colocando un dedo sobre mi boca—. Sólo lo dije para que se fuera.

En ese instante vuelvo a notar lo alto que es, especialmente cuando levanto mi cabeza para buscar en sus ojos si está hablando en serio o no. Éstos son color avellana con ligeros destellos de verde, cosa en lo que no me había fijado antes.

—Más te vale —respondo bajando mi cabeza y mirando al suelo.

—Aunque no veo la necesidad de aquel rechazo al alcohol. Un trago no te haría daño, ¿sabes?

—No es como que jamás haya probado el alcohol... Si es esa tu inquietud. Simplemente prefiero tomármelo con calma.

—Lo cual quiere decir que nunca has tomado de más —dice levantando la ceja con una leve sonrisa en su rostro. Casi parecía que le diera ternura aquella conclusión a la que había llegado.

—Bueno...

Antes me gustaba presumir de ello. Principalmente con los adultos. Una chica de preparatoria que jamás se había excedido con el alcohol... Pero con Alex, honestamente no sé si sea mejor mentir.

No tengo ni tiempo de inventar algo, porque él añade rápidamente:

—No es malo hacerlo alguna vez en tu vida, ¿estás de acuerdo? Incluso pienso que no hacerlo está mal. Tienes que vivirlo, es algo interesante.

—¿Te estás escuchando? Si yo no quiero tomar no lo haré y ya.

En eso me clava sus ojos y me vuelve a mirar con aquel aire de ternura. Como si le pareciera tierno mi comportamiento. Como si fuera una niña... No lo puedo creer.

—Bueno... ¿Vamos ya a divertirnos o no? —agrego totalmente cansada de que me vea como a un fenómeno antisocial y antipático.

—Créeme, aquí hay diversión de sobra.



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En el texto hay: apuesta, amor, chicomalo

Editado: 29.07.2019

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