Alex según Jade y todas las chicas

Capítulo narrado por Jade

—¿En serio va a venir? —pregunto a mis amigas emocionada cuando comprendo que mi seña fue captada por él.

Alex está parado a media cafetería decidiendo si acercarse o no. Se toca el cabello con una mano y mira al piso por unos segundos como considerando si debería venir o volver a donde estaba. En eso, levanta la mirada hacia nosotras y entrecierra los ojos de una manera tan sexy que me cuesta describirla. Por fin decide acercarse y levanta la mano para saludarnos.

—Chicas —dice en cuanto está a unos metros de la mesa, con una voz que me encantaría escuchar a todas horas.

—Alex, siéntate por favor —me apresuro a decir.

A mi izquierda puedo notar a Alana totalmente incómoda pasando su mano por la parte trasera de su cuello.

No es que esté yo enamorada de este chico ni mucho menos, pero debemos admitir que es todo un adonis.

Toma una silla de la mesa de junto y se une al cuarto lugar de nuestra mesa cuadrada.
Duda un poco entre sentarse o no, hasta que Fer lo anima dando dos palmaditas en la mesa.
Se le nota ligeramente incómodo y tímido, cosa que se me hace completamente extraña tratándose de un chico como él. ¡Qué tierno!

—Alex, ¿esperabas a alguien? —le pregunta Fer.

—Eh... No —suelta por fin con una sonrisa y toma una servilleta que está frente a él. Juega con ella unos segundos y luego la deja donde estaba—. Algo así. Más bien estaba buscando a alguien.

Alana comienza a toser como si se le hubiera ido chueco el café.

—¿Todo bien? —le pregunta Alex riendo por dentro.

Comienzo a reírme también, intentando en el camino buscarle la gracia.
Mi diversión, o falta de ella, se va apagando pero la suya no. ¿Por qué se ríe?

—Ajám... —responde ella todavía con la garganta algo afectada.

Fer me lanza una mirada para que continúe con la conversación. No podemos dejar que se aburra.

—Entonces, Alex, cuéntanos de tu vida —intervengo.

Su boca comienza a moverse y no puedo evitar reparar en la simetría de su cara. En verdad es perfecto. Tiene unos ojos verdes preciosos y un cabello castaño claro súper suave. Digo, supongo que será suave.

También es importante mencionar que tiene unas manos de muerte. Sí, manos.
Sus manos son perfectas. Acompañadas por su tez ligeramente bronceada, hacen una perfecta combinación con todo su encanto.

Fer y Ally comienzan a reír mientras él cuenta una pequeña historia acerca de un maestro que tuvo y no puedo evitar notar cómo se marcan sus hoyuelos cuando sonríe. Tiene los codos apoyados en la mesa y las manos cruzadas por encima de ellos. Cuando niega con la cabeza todavía entre risas algo que Fer le pregunta, no puedo evitar pensar que podría ser el chico más atractivo al que he visto jamás. Y parece llevarse muy bien con Alana, ¿cómo es que ella no está embobada con él? No lo logro entender.

—Bueno, chicas. Creo que voy a regresar a buscar a quien buscaba —nos dedica una sonrisa a todas y se levanta lentamente de la mesa, como esperando algo.

No logro evitar sentir una ridícula punzada cuando nos informa que se va.
¿Con quién va a encontrarse? ¿A quién está buscando?

Dichosa ella.