Esa Mujer

Alejandro

II

Oh, sí. Miguel recordó que un Alejandro había sido el compañero inseparable de su Lily en el instituto secundario.

Sintió un dolor muy agudo, que le atravesó el pecho y pareció abrirle la cabeza. Amó a Lily con devoción, con la esperanza que le correspondiese. Que fuese su esposa, la madre de sus hijos. La respetó con la ilusión de ser su marido, el primer hombre en su vida. A pesar de su juventud, se prometió a sí mismo ser ciego a todas las tentaciones que se le ofrecían, por ser el heredero de una empresa prominente. Después de casarse se esforzó por superarse en cada etapa de su carrera, para que ella se sintiese orgullosa de él. Por lograr para su familia un bienestar material y una digna ubicación social.

En cada instancia de su desempeño lo empujaba el amor. El anhelo de que tuviese la certeza que la familia que fueron formando, era su único objetivo.

Se sintió el hombre más feliz del mundo cuando aceptó casarse con él. La deseaba pero la amaba y la respetaba. Fue tan idealista en sus sentimientos como concreto en sus decisiones empresariales.

Escuchando lo que ocurría en el salón vecino, toda su vida pareció venirse abajo.

La Lily de la que hablaba el desconocido era su Lily.

Jamás podría perdonarle el engaño. Nunca lo amó. No fue su primer hombre como ella le dio a entender.

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En el texto hay: misterio, drama, suspenso

Editado: 15.06.2023

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