Capítulo XI

El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, más se goza de la verdad.

Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. El amor nunca deja de ser.

13 Corintios 4-8

Has sentido alguna que el tiempo se detiene, que nada alrededor tuyo importa porque lo único importante yace frente a tus ojos, tomando fuertemente entre tus brazos para no dar chance a que se escape. Observando cada detalle para no olvidar absolutamente nada, las formas, los sonidos y los olores; acercas tu pecho cada vez más para poder sentir como dos corazones laten en sincronía, como los pulsos se aceleran al mismo tiempo, como cada segundo que pasa mueres un poco más de amor.

Así es como se sentían estos jóvenes a media noche a la mitad de un parque, abrazados y bailando al ritmo que solo dos almas enamoradas podían escuchar, perdidos en la mirada del otro. Amambay sentía que en cualquier momento el corazón se le saldría del pecho, pues ese corazón ya no le pertenecía, ese corazón quería correr junto a Alex su verdadero dueño, en medio de ese océano de emociones se puso a cantar:
-"Darling I will be loving you till we're seventy and baby my heart could still feel as hard at twenty three and I'm thinking about how people fall in love in mysterious ways maybe just the touch of a hand. Well me I fall in love with you every single day and I just want to tell you I am. - Nos sabía que cantabas. - Pues sólo un poco, creo que es suficiente para quitarle el trabajo a Ed Sheeran. - Pobre Ed, creo que tal vez ya no consiga trabajo, ya me duelen las piernas de tanto estar parado, ven sentemosno en el columpio.
Una vez sentados en el columpio Amambay visualizo una azucena del bosque, rápidamente acudió a su mente la leyenda que su padre le contaba cada cierto tiempo para que ella pudiera dormir.

- Tupã Dios que creó los primeros dos hombres, moldeándolos con tierra amasada; Morotī era de color blanco y Pytã era de color rojizo, al ver que estos hombres necesitaban esposa, mando Tupã a Yjará que moldease dos mujeres. Felices las dos parejas, empezaron a vivir en un hermoso lugar en la tierra, alimentándose de la abundancia de los frutos y teniendo muchos hijos que fueron aumentando aquella primera población. Juntos descubrieron el fuego de manera casual, al chocar dos piedras entre sí. Juntos aprendieron a cocinar y cazar animales para comer, ingeniando las armas que facilitarían la tarea. Así descubrieron la lanza, el arco y la flecha.

Todo era felicidad y armonía entre aquellas dos familias, hasta que de una manera impensada surgió la rivalidad en las destrezas y la envidia; todo se torció. Los dos hermanos discutieron acaloradamente por primera vez, pasando al rencor, al odio y a la separación, entonces Tupã se enojó y decidió castigarlos.

Durante tres días con sus noches desencadenó sobre ellos una tormenta horrible que les llenó de espanto. Al cuarto día amaneció soleado y vieron descender de un árbol a un enano de barba blanca que se dirigía a ellos, era Yjará que venía en nombre de Dios para recriminarles duramente su conducta y hacerles un llamamiento a la reconciliación.
Yjará les habló con tal elocuencia, que los hermanos se avergonzaron de sí mismos y, compugnidos, se abrazaron fuertemente. Y aquí llegó el prodigio: todos pudieron observar como los hermanos unidos se iban convirtiendo en un tallo, símbolo de la paz, que pasaba a ser una planta cuajada de azucenas moradas, que poco a poco iban perdiendo su color hasta pasara ser completamente blancas. Así nació la azucena del bosque, que es un recordatorio de Dios de que los hombres deben amarse mutuamente.
-Jamás había escuchado sobre esa leyenda.- Es una leyenda guaraní, mi padre solía contármela antes de dormir, sabes me da algo de vergüenza cuando me miras así, tan directamente es como si vieras directamente mi alma.- Me gusta mirar así a las personas hermosas, desde hace tiempo decidí gozar de ese pequeño placer, además, cualquiera en su sano juicio se volvería loco por ti, sabes, yo también tengo una historia para ti:
- Cuenta la leyenda , que al inicio de los tiempos, los seres humanos tenían dos cabezas, cuatro brazos y cuatro piernas. Esos seres - que no eran dioses - lograron ser tan poderosos, que Zeus, por miedo a ser derrocado, decidió separarlos, condenándolos a pasar su vida entera buscando "su otra mitad"; el ser humano busca amar con el propósito de sentirse completo, para él cada uno "no es más que una mitad de ser humano, que ha sido separada de su todo".

-Puedes reconocer a tu otra mitad visualizando el punto luminoso encima del hombro izquierdo, pero debemos recordar que poseemos más de una mitad por eso somos capaces de amar tantas veces, a veces me pierdo tratando de imaginar cómo pudieron estos escritores pensar en todo esto, el amor es tan complejo y simple a la vez, es estúpido huir de él, ya que la persona amada se encuentra dentro de nosotros mismos.
Personas como tú, producen magia con tan solo respirar, Alex respira vida y jamás tengas miedo de lo que vendrá, no te quejes del pasado ni ansíes el futuro, vive el presente él cual te pertenece y recuerda que la vida es un ciclo, siempre en movimiento, siempre transformándose, nunca está en reposo, lo que hemos vivido aquí está noche siempre vivirá en nuestras almas.