¿Puedes verme cuando lloro?
¿Puedes verme cuando grito?
¿Puedes verme cuando me caigo?
¿Puedes verme cuando necesito un abrazo?
¿Pudiste verme cuando perdí mis fuerzas?
¿Pudiste verme cuando perdí la confianza en mi?
¿Pudiste verme cuando me arrebataron mis sueños?
¿Podrás verme algún día como soy en verdad?
¿Podrás algún día aceptarme tal cual soy?
No, no pudiste, no puedes y no podrás.