PROLOGO

Durante mucho tiempo me pregunté, como sería perder todo lo que amas de la noche a la mañana, pensé y lo creí IMPOSIBLE.

¿Cómo me vería yo en esas situaciones?

Pero el momento llego, sentí perderlo todo hasta aquello que no tenía. Mi vida llego a cierto límite que me hizo entender cuán importante era. Desde ese momento creo y pienso que mi ser ha cambiado, aprecio más la vida y a las personas. Nadie conoce lo que tiene hasta que lo pierde. Gran frase que entendí, luego de esa situación.

Crecí, pasar por aquello me llevo a hacerlo y a entender que la vida se puede ir en un segundo, y que quizá no tengamos tiempo de cumplir cada sueño que por nuestras mentes pasa, es por eso que he decidido vivir mis días como si fuese cada uno el ultimo, claramente de vez en cuando caigo, y el proceso de superar ese vacío en mi corazón no es tan colaborador conmigo. Pero lucho y sigo adelante.

Supongo que mi justificación se extendió un poco, pero es como puedo iniciar esta historia, allí comenzó esta nueva Eleanore Robert, que tiene mucho que contar.

Para darle un poco de color a esto, debo comentar que luego de creer que mis días siempre serian oscuros y llenos de lamentos y nostalgia, un rayito de luz alumbro mis días, era un sol que había estado allí presente por mucho tiempo, al cual durante un largo momento me dedique a bloquear, a protegerme de él, aunque luego mi vida decidió cambiar, dar un vuelco total a la rutina, y por supuesto aprovechar las buenas personas que estaban en ella, no podría perder oportunidades, la vida es para aprovecharla.

Sentí que habia sido una de las mejores decisiones de mi vida, Raimon, él era mi nuevo motivo de sonreír, y es que sentirse amado llena de felicidad a cualquiera que tenga un vacío en el pecho, quizá él fue esa pieza de respaldo para no dejar mi corazón incompleto.

Así fuí acomodando mi vida, aprendiendo a vivir con el dolor de la perdida, pero viviendo con la emoción de esa nueva persona que había llegado a mi vida y que hacia el mayor de los esfuerzos para hacerme feliz, el hizo que mi vida tomara color y me demostró que no todo está perdido si tenemos metas por las que luchar.

Pero como todo en la vida, hay personas que vienen para ayudarnos y luego irse, o ayudarnos y quedarse. Sin embargo el segundo no era el caso, él debía salir de mi vida, pero yo me aferre a él por el hecho de creer que me había salvado, pero dentro de mi sabía que en él no encontraba todo lo que necesitaba, puedo afirmar que luche contra viento y marea por conservar aquello que por mucho tiempo me hacía bien, me hacía mejor persona. Sin embargo, el tiempo me demostró que no todo lo que brilla es oro, y que por mucho bien que nos haga una persona, no significa que debemos agradecerle con más que un gracias, quizá ese fue uno de mis tantos errores, no ver que mi vida no necesita retribuir los actos que me cambiaron con actos que también cambiasen a otras personas, supe eso tarde, sin embargo no me arrepiento.

Siempre pensé que habría alguien de quien no necesitase mucho, ni que necesariamente viniese a cambiarme o mejorarme, pensé que solo se necesitaba que alguien llegara e hiciera que mi corazón no necesitase más que amor y solo eso.

Existe un grupo de afortunados que logran conseguir el amor, lastimosamente yo no soy una de esas, porque es que el amor no es para mí, digamos que quizá en algún momento lo fue pero yo me encargue de destruir toda posibilidad de mantenerlo conmigo, digo ante el mundo que ya me resigne, que no hay manera en la que estar sola,sea un problema para mí, sin embargo, día a día voy con la esperanza de que haya alguien por el mundo, en busca de eso que quizá yo poseo, y puede enamorarme con su esencia y presencia.