Welcome to the show

Iniciando transmisión en 3… 2… 1…

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—¡Buenas noches, amantes de la lectura! —saluda Tina Fey, la presentadora de la noche—.  ¡Ustedes lo pidieron y aquí lo tienen! ¡Un aplauso para Pao Molina y el talentoso elenco que le da vida a sus historias!

—Gracias, Tina, por esta cálida bienvenida. Y gracias también a todos ustedes por estar aquí presente. —La autora se presenta con una reverencia—. Son lo mejor de mi vida. 

—Que hermosa. Tus fans te adoran y verlos aquí es la prueba de ello. ¿No es cierto?

—¡Te amamos, Pao! —gritan en respuesta desde el palco.

—¡Y yo a ustedes!

—Nos contenta mucho tenerlos a todos en el show. ¡El público está ansioso por escuchar lo que tienen para decir!

—¡Te amo, bestia! ¡Quiero que me hagas un hijo! —grita otra chica de entre la multitud.

—¡Sí, claro! ¡Solo te tienes que enfrentar a un par de gemelas peligrosas! —responde otra a lo lejos.

El aludido se muerde el labio para ocultar la sonrisa. La presentadora no se molesta en ocultar la suya mientras le indica al grupo de estrellas los asientos que deberán ocupar. Juntos forman un semicírculo de dos niveles. La autora toma asiento junto a Tina en el centro.

—Bueno, bueno, ahora que nos hemos puesto cómodos, ¿qué dice el público? ¿Están listos para una noche cargada de emociones?

De fondo, las enormes pantallas del estudio se llenan con fragmentos de algunas de las escenas más icónicas en las que los actores han participado. Entre ellas destacan el primer cruce de miradas entre Emma y Oliver desde la barra del antro; la entrada en Inferno de Samanta junto al bombón de su hermana; la llegada de Angelina White al entierro de su gemela; y el momento en el que el último Bonano con vida observa con dolor al amor de su vida de pie frente el altar con otro hombre. Uno al que él solía llamar amigo.  

La fanaticada chilla de emoción y Tina se prepara para la entrevista.

—Muy bien, comencemos —dice Tina echando hacia atrás su cabello—. La primera pregunta, evidentemente va para nuestra autora. Pao, sé que esto te lo han preguntado mil veces y te pido por favor no me odies, pero ¿para cuándo retomarás tus historias pendientes?

Pao se ríe ante la súplica en la voz de la presentadora y mira en dirección a su público.  

—Sé que mi ausencia ha sido más que prolongada y me honra saber que, pese a todo, el apoyo y amor que me profesan se mantiene firme e intacto. Y también sé que esto puede sonar un poco a locura, pero antes creía que era ese mismo amor y confianza lo que me había llevado a encerrarme en mi propio caparazón. Ahora entiendo que no dejé de escribir por miedo a decepcionarlas o no estar a la altura de sus expectativas, dejé de hacerlo por miedo a no estar a la altura de las mías propias. De pronto me sentí abrumada por todo lo que estaba construyendo gracias a mis dones, y simplemente corrí en reversa. Esa es la mejor forma que tengo para describirlo. Me convertí en mi peor enemiga, y ahora estoy haciendo las paces conmigo misma.

Tina asiente con una pequeña sonrisa.

—Realmente me alegra saber que todo este tiempo lo has invertido en ti, en sanar y conocerte mejor. Sé que este gran elenco y tus fans también lo aprecian. No cabe duda que si tus trabajos anteriores eran una maravilla, lo que se viene a partir de ahora será excepcional. ¿Puedes hablarnos un poco más sobre eso? ¿Qué podemos esperar de Pao Molina en este 2024?

—Año nuevo, vida nueva. —Pao sonríe—. Y para este 2024 me hecho varias promesas a mí misma. Entre ellas, enfocarme en lo que realmente importa. Uno de los retos más difíciles con los que tuve que lidiar el año pasado fue con la inclinación a procrastinar en exceso. ¡Creo que nunca había visto tantas series en un mismo año! Y aunque siento que fue un año de pasos muy cortos, tengo que agradecerme por haberlos dado. Así que en este 2024 mis planes son cerrar varios de los capítulos que he dejado abiertos, entre ellos la saga que la gran mayoría espera con ansias: Pasiones Peligrosas. Además… —Pao es interrumpida por los vítores y aplausos del público, lo que la hace sonreír aún más—. Gracias, gracias, sé que les he hecho sufrir demasiado y que este elenco no se está haciendo más joven. —Señala al grupo de actores.

Los presentes se ríen y Ana de Armas grita hacia el público:

—No querrán ver en la pantalla a una bestia con canas, ¿cierto? ¡Porque a este señor que está aquí a mi lado ya le están saliendo un par! —Señala a su compañero y coprotagonista en la saga Pasiones Peligrosas, Stephen James, y este le pincha un costado en venganza.

—Los que se pelean se desean —canturrea la presentadora sin borrar la sonrisa—. ¿Será cierto eso de que la realidad supera la ficción?

La escritora asiente en respuesta.

—Esa es la magia de los libros. Hacen real lo que antes solo estaba en tu imaginación. Nunca sabremos que fue primero, si el huevo o la gallina, pero sabemos que no podría existir uno sin el otro. Por eso contar historias es tan importante. Porque nunca sabremos si somos el reflejo de una historia contada o la inspiración de una futura.

—Qué palabras tan hermosas y acertadas, Pao —apunta la presentadora—. Y ahora que hablamos de palabras, podrías respondernos cómo es que todo esto ha sido posible. —Señala al elenco—. ¿En qué te has inspirado para crearlos?