Después de que todo este problema surgiera, no me imaginaba lo que nos prepararía el futuro. Yo sólo era una llorona que no sabía qué hacer ni cómo cuidar a mi hermanito. Pero… pero creo que lo que no me esperaba era que no volviera a ver a mis padres otra vez. Si tan sólo los del reino no nos hubieran traicionado, de seguro que podríamos seguir protegiendo todo este lugar.
No entiendo cómo es que todos ellos se dejaron llevar por su poder y creer que nosotros llegaríamos a ser una amenaza para ellos. Nuestra familia nunca pensó en el poder, es por ello que nunca trato de hacer algo que fuera en contra de lo que todos esperarían ser un completo caos.
Aunque es verdad que el poder que me fue encomendado era mucho más del que cualquiera pueda manejar, no puedo hacer nada por lograr restaurar lo que fue. Si tan sólo… si tan sólo, ¡Si tan sólo hubiera sido mucho más fuerte en ese entonces! Entonces, tal vez nada de esto hubiera sucedido.
He regresado un par de veces a ver lo que en un día fue mi hogar en busca de poder encontrar una forma de volver junto a Uwer, pero al final nada de esto ha sido posible. Sólo puedo ver mi hogar a unos cinco kilómetros de distancia. Sé que mucho podrían decir que debería de hacerlo un poco más lejos para evitar tener que meterme en problemas, pero estoy segura de que soy capaz de manejar las cosas hasta esta distancia.
Todo podría haber quedado así, si no fuera porque los encontré. Así es, terminé por encontrarme con quienes traicionaron a toda nuestra familia. Ese día, que nunca voy a olvidar, estaba con Uwer caminando y, a petición de él de querer ir a ver nuestra antigua casa, nos encontramos aquí. Por supuesto que había venido aquí unas cuantas veces antes para poder asegurar de que nada malo nos pudiera suceder. Sé muy bien que Uwer tampoco es alguien tan débil y puede llegar a pelear contra unos cuantos de esos tipos que se encuentran custodiando la casa, pero prefiero no hacer que él tenga que pelear y estar involucrado en poder terminar lastimado con todo este desastre.
Al ser que últimamente habían disminuido la presión de control que se tenía alrededor de nuestra antigua casa, logramos llegar mucho más cerca de lo que había llegado antes. Aunque esto parecía un poco extraño, no le presté mucha importancia y continuamos avanzando otro poco más cerca de la casa.
Cuando ya estamos cerca de llegar a la entrada de aquella entrada secreta a nuestra casa, donde estuve esperando a que Uwer saliera el día en que fue invadida por completo, me detuvo por un instante. Uwer, que parecía que había sentido algo familiar, de pronto sonrió y me empezó a tirar de mi blusa.
Yo, sin entender porque él se sentía tan alegre, le pregunté qué era lo que pasaba, para luego escuchar que él me dijera – son… – y en ese momento lo entendí. No era algo bueno el que la guardia en el lugar había decaído demasiado, sino que lo habían hecho para lograr terminar haciendo que me acercara lo suficiente y así poder emboscarnos.
Pero, nadie de este lugar podría llegar a emboscarnos. Estoy segura de que podría detectar si alguien lo intentase, pero en esta ocasión no fue así, debió de haber sido alguien demasiado poderoso o hábil para poder hacerme eso.
Mientras seguía pensando en lo que pudo haber sido, de pronto me di cuenta de quienes eran, abrace a Uwer y haciendo que se durmiera con un truco que me enseñaron mis papás, dije – Salgan de donde quiera que estén – y así es, quienes salieron de entre los arbustos y las copas de los arboles no eran nada más ni nada menos que… mis hermanos mayores.
Mi hermana mayor estaba sonriendo tan calmada y arrogante, por otro lado, también vi a mi hermano mayor, él es como alguien que está lleno de su propio ego y que no puede dejar de pensar en la inferioridad de las personas sobre su propia superioridad.
Al verlos a los dos tan bien y sin ni un daño, por un instante me alegré. Aunque me hubiera gustado mantenerme así, ese día no me arrepentí de haber hecho que Uwer quedara durmiendo por completo, ya que nuestros hermanos mayores me atacaron y, a pesar de tratar de tomar a Uwer, yo no lo solté en lo más mínimo ni dejé que ellos pudieran lograr ser capaces de poder tocarlo. Sin siquiera entender el motivo por el cual ellos empezaron a atacarnos al principio, todo quedó claro cuando me rodearon y pidieron que les diera la llave para poder entrar en la habitación secreta que estaba en nuestra casa. Al ser que ellos siguieron atacándome conforme más me negaba a cumplir con aquella petición, quedé completamente adolorida y casi malherida.
Ellos, que lograron quitarme esa llave, que era el collar que llevaba conmigo, se rieron para luego dejar una bomba para que muriésemos ahí y se fueron. Yo ya no podía seguir moviéndome más y perdí el conocimiento en ese preciso momento, lo último que recuerdo es que esa bomba estaba por estallar en cualquier momento y que llegué a escuchar como sonaba antes de detonar.
Cuando desperté, ya me encontraba nuevamente en casa. Recordando que estaba en plena pela con mis hermanos, me levanté precipitadamente mientras decía – ¡No se lo lleven! – y luego reaccionar que estaba en la cama acostada y con algunas vendas en mis heridas.