Capítulo 2
Jules está es la última vez que te metes en problemas, ya van muchas veces que tengo que ir con el director para que no te expulse de la escuela ─ me reprende mi madre mientras me empuja a la salida.
─ Pero mamá es Ashton...─ mi madre me interrumpe y nos quedamos paradas en la entrada.
─ Siempre es Ashton, pobre chico deja de culparlo por algo que no ha hecho, es bueno, deberías aprender de él.
<< Si como no >>
─ No es buen chico madre ─ dije cortante ─ hace tres años me hace la vida imposible, él hace que me meta en problemas por sus tontas bromas ─alzó la voz haciendo que mi madre se enoje más de lo que ya está.
─ Un mes sin tu teléfono.
<< Ya empezó por el teléfono, mejor cállate o si no también perderás el postre >>
¡Pero no es justo, deberían castigar a Ashton no a mí!
─ Ay... Por favor mamá, no soy una niña, tengo 18.
Mi madre frena en seco y se queda viéndome enojada ─ es lo último que te voy a decir, al menos que quieras quedarte sin postre por un año entero ─ sigue caminando dejándome sola, doy saltos frustrada mientras vuelvo a entrar a la escuela.
Ayer no salió como esperaba luego del bello incidente de Ashton, Toda la culpa la lleve yo ¿Por qué?... pues el muy inteligente dijo que había visto a mi sonar la campana y que lo había encerrado en el salón para que él no dijera nada, ¿y como le creyeron?... pues dijo que tenía testigos y nada menos que los chicos Delta.
Sigo mi camino hasta la escuela.
''Entonces no di un paso más.
No moví otro músculo.
Algo pasó.
Corrección...
Ellos pasaron... ''
Me quedé paralizada. Justo en ese instante, la puerta del auto se abrió. De allí, salieron los chicos Delta, así se hacen llamar, patéticos todos, la estupidez humana emana de ellos.
Primero se bajó el estúpido ...
Dan, el jefe ese era él, un chico muy agradable, su estatura era promedio, cabello rizado negro que se complementa con sus ojos, vestía camiseta y jeans con zapatillas deportivas.
El segundo en bajarse...
Taylor, él era de otro mundo, típico playboy de revista, todas las chicas lo aman su cabello rubio y ojos azules complementa su atractivo y que además es el capitán del equipo de fútbol.
En tercer lugar...
Adam, él ''chico Nerd atractivo''; su altura, cabello corto de color negro y sus gafas todo un intelectual, ese si era un hombre, aunque muy gallina para mi gusto.
En cuarto lugar... y él más importante.
Aaron, vestido totalmente de negro, pero aun así también podía impresionar. Era un poco más delgado, aunque no menos atlético. Tenía el cabello del mismo negro azabache, abundante, desenfadado y rebelde; y sostenía un cigarrillo con la mano izquierda. Su cara tenía un aire somnoliento, con un aire de desagrado hacia el mundo.
Y por último y más insoportable y odiado por todos incluso por mi...
El famoso y arrogante Ashton Cranston famoso por su increíble idiotez y comentarios sarcásticos.
A él no hace falta describirlo...
Después de los años pensé que la pubertad iba a jugar a mi favor, en cambio jugó a la suya, ese chico estaba que quemaba de lo sexy que era, pero bien bruto que salió, su cabello castaño largo con ondas en las puntas, sus ojos verdes esmeraldas y su cuerpo o por dios eso era de otro mundo ¿por qué la maldad se ve tan hermosa?, durante los últimos tres años han hecho mi vida un campo de batalla, con estúpidas bromas, desde que le jugué una a Ashton, las bromas no ¡han parado!, aunque es último año y decidimos tener una especie de tregua.
Detrás, Camyl me agarró por el brazo, me sacó de mis pensamientos y comenzó a jalarme en dirección al estacionamiento por la que había caminado inicialmente.
─ ¿Impresionada? ─ dijo.
La observé con brusquedad. Descubrí que ella contenía una sonrisita pícara.
─ No, ¿por qué lo preguntas?
─ No te hagas Jules, estabas en un hechizo algo así, ─ volteo los ojos acerca de su comentario.
─ Aunque no te lo negaré esos chicos tienen caras tachadas por los mismos ángeles, pero más Taylor. ─ Termino de hablar ella.
─ ¡Hey! es el enemigo, no estés de su lado, te hechizara y te mandara al infierno, con todas las almas que ha devorado. ─ hablo entre risas.
Camyl voltea los ojos.
─ Taylor no es el enemigo ─ contraataco.
─ Patética. Esa es la palabra que te define Camyl ─ su amor por Taylor no ha disminuido nada desde que lo transfirieron hace dos años.
─ Solo porque tú no admites tu amor por....
─Camyl cállate ─ dije sosteniéndola del brazo y caminando hacia la entrada de la escuela otra vez, la sonrisa cínica de Camyl se asoma, su cabello largo negro se enreda con la brisa, era hermosa, aunque ella dijera que no.
Los pasillos de la escuela eran un laberinto muy pequeño y estrecho por lo cual nos chocábamos con más de uno, volteamos a dirección de los casilleros cuando chocamos con alguien y su café llega a mis zapatos nuevos.
─ Oye estúpido fíjate ─ me miro la mancha en los zapatos y la sonrisa de Ashton refleja burla.
─ Oh lo siento ─ responde con ironía ─ solo que mi campo de visión no ve niñas estúpidas ─ habla riendo con los deltas idiotas y emprendiendo la huida.
─ ¡Estúpida tu abuela! - gritó detrás de él llamando la atención de algunos ─que dio a luz a tu papá para tenerte a ti imbécil.
Camyl me sostiene la mirada ─ Ok amiga debes de calmarte.
─ Enserio estas de su lado, nos llamó estúpidas.
─ Tu lo has llamado peor. Así que vamos ─ dijo sosteniéndome el brazo.
─ No puedo creer que estés de su lado.