Esposos por obligación

Capítulo # 1

Capítulo # 1

En Italia.

En el día del bautizo de Saraí Marchetti Conte.

Oliver sostiene a su sobrina en brazos, la quiere mucho, se la presume a sus amigos, mientras Rachele se encuentra con Sara en la cocina. 

—Qué hermosa está. —dijo Rachele sonriendo a su amiga. —Se parece mucho a los dos.

—Gracias. —dijo Sara sonriendo. —Oliver dice, que se parece más a mí.

—Ese Oliver. —comenta ella seria. —No es nada guapo.

Sara no pudo evitar ahogarse con el refresco.

—¡Qué! Sí, Danna, solo le falta abrirle las piernas, delante de todo el mundo. —le dice sin poderlo creer, su amiga no caía en los encantos del primo de su esposo.

—No sé, cómo Dominic es amigo de ese. —dijo ella mirándola.

—Son cosas que pasan. —contestó Sara con una leve sonrisa, Oliver no quiere que nadie se entere de que su esposo y él son primos, los medios estaban obsesionados con él, lo que menos quiere es romper la tranquilidad que están viviendo Dominic en estos momentos. —Se conocen, desde hace un par de años.

—Es increíble. —dijo Rachele sin poderlo creer. —Por cierto. ¿Y Lola?

—Debe de estar, ocupada con su novio. —respondió Sara sonriendo, su prima se la pasa encantada con su novio más reciente, Lucas.

—Lola, es alocada, ha tenido más novios que cambiarse de ropa. —dijo ella con asombro. 

—Rachele, nadie es cómo tú. —le recuerda ella con una sonrisa cálida. —Eres muy especial, no te atormentas por buscar novios, y solo vives por tus niños.

—Sí, para eso estudié. —dijo ella sonriendo. —Siempre quise ser niñera y lo logré. Mis padres se quejan. La paga es muy buena.

—Saraí este más grande, me la cuidarás. —le preguntó mirándola.

—Claro y lo mejor que será gratis. —le contestó ella.

—¡Mujeres! —grito Dominic sonriendo. —Es la hora de la foto.

—Vamos —dijo Rachele levantándose.

—Sí.

Cuando ellas se acercaron, los padres de Saraí y los padrinos se tomaron una foto juntos con ellos, para después los padrinos solos con la niña.

Oliver la miraba, no podía negar, es muy hermosa de cara, su cuerpo daba mucho de que desear, muy delgada y con poco, senos. Típico cuerpo de una adolescente que jamás se desarrolló, con disimulo miró otro lado para que ella no se percatara cómo estaba detallándola.

Rachele lo miraba con seriedad, alto y moreno. Siempre ha estado segura de que jamás se fijaría en un moreno, no le gustan, siempre se ha imaginado a su esposo alto y delgado, nada de abdomen, de infarto, ella lo veía muy superficial, no podía negar que tiene una cara hermosa, con disimulo. Lo dejó de mirar para enfocarse en la cámara.

Ellos dos se alejaron y se fueron a sentar con sus amigos.

Rachele estaba mirando con seriedad a Pietro, quien se encuentra muy extraño, sabía que no estaba en buenos pasos, no pudo evitar sentir curiosidad y lo siguió. A continuación, lo que presencio no fue nada agradable.    

—Pietro. —dijo ella furiosa. —¿Qué haces drogándote?

—Rachele. —murmuro él perplejo y soltando la bolsa de cocaína. —Por favor, no le digas nada a mi hermana Lola.

—Eres un estúpido. —le dijo ella agarrando la bolsa. —Esto no te dará nada. Imbécil, lárgate.

Pietro se fue asustado, Rachele mira la bolsa con asco y odio, cuantas personas mueren día a día consumiendo esta porquería, lo tenía que guardar muy bien, no confiaba en ese adolescente y si lo dejaba mal puesto, lo volvería a tomar. 

—Eres una cajita de sorpresa. —habló Oliver en su oído. —Jamás pensé, que fueras drogadicta.

Ella giró lentamente y miro sus ojos

—Yo no…

—Cállate. —dijo molesto. —Eres una buena actriz, no sé cómo Dominic y Sara pueden tenerte tanto cariño. —él notó que ella quería decir algo cerro la boca. —¡Idiota, deja ese vicio! —le dijo antes de alejarse.

—Maldito imbécil —dijo ella frenética.

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Unos meses después

Oliver le comentaba a Dominic que Rachele no era una buena compañía para nadie, su primo se molestó mucho con él, diciéndole que jamás hablara mal de Rachele, unos días después, Lola le comentó a Oliver que su hermano estaba en las drogas y que Rachele lo había regañado en el bautizo de Saraí, ella se sintió tranquila porque su amiga la ayudo con su hermano, el moreno se sentía como un estúpido, le pediría perdón a Rachele Basile, quien se volvió el escándalo de la farándula al ser la amante del empresario Francis Neri, Oliver eso fue lo último que imagino de ella, está seguro que Rachele no era una mujer de confianza, no es una drogadicta es una simple zorra, que le gusta meterse en los matrimonios.

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En el velorio.

Rachele no paraba de llorar, en sus brazos sostiene a la pequeña Saraí quien se aferra a ella, no pudo evitar preguntarse. ¿Por qué sus amigos, tuvieron que morir? Dejando a su ahijada sola en el mundo, miró a Oliver que no paraba de llorar también, tenía ganas de ponerle la mano en su hombro, no pudo hacerlo, no tenía esa confianza con él. Se contuvo en hacerlo, espero que la ceremonia terminara para llevarse a la pequeña para su casa.

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Una hora después

Oliver le quitó a Saraí a Rachele.        

—Me la voy a llevar. —le anunció él mirándola con seriedad.

—Jamás. —le dijo ella molesta y mirándolo mal. —Sara me la dejó para que la cuidara y eso lo que haré.

—Saraí es mi sobrina, es la única razón. —le reveló con seriedad y notó el asombro de ella. —No lo sabías. —dijo con una leve sonrisa. —Soy primo hermano de Dominic, como me crie con él, ella es mi sobrina.

—No lo sabía. —comenta ella asombrada. —No entiendo. ¿Por qué Sara no me contó?

—Es un secreto, para que se te iba a decir. —dijo él abrazando a la pequeña. —Me voy.

—Un momento. —habla Lucas mirándolos. —No se pueden ir. —los miró con seriedad. —Sé que es muy tarde y no es el momento. —acercándose a ellos dos. —Vamos para el despacho.




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