CAPÍTULO 17

Narrador omnisciente.

Lugar Construcciones Levis, S.L

—Que se supone que debo de hacer si no me mira. —Se queja.

—Elsa no te pido mucho, solo que pongas más de tu parte si llega Levis quiero que seas más agradable con él, ya sabes más melosa. Aquí sí funciona nuestro plan, tú te quedas con Mike y yo consigo que esté lejos.

—Y eso intento pero la abogada lo acapara todo el tiempo. No lo deja solo, ni un minuto —Mira a Pedro con molestia.

—Eso cambiará próximamente, Levis volverá a su puesto en presidencia muy pronto. Tu misión será no separarte de él, ser sus ojos y oídos, ¿entiendes? —Sonríe con malicia. —Tienes que ganártelo, procurar que él te vea con deseo. Ven provocativa a tu puesto de trabajo cuando él vuelva, y por supuesto no te olvides de molestar celosamente a la señorita Millas para que no quiera aparecer por aquí. Elsa, no quiero errores, pagaré muy bien tu ayuda, no lo dudes.

—Lo haré encantada, muchas gracias.

Elsa sale del despacho de Pedro, que se dispone a ponerse la chaqueta para salir.

El teléfono que se encuentra encima del escritorio, antes de que salga por la puerta suena.

En la pantalla aparece el nombre de Morrison.

— ¿Qué ha pasado con Mike está tarde? 

Tengo entendido que ha ido al despacho.

—Nada, ha venido a por unos contratos y presentar a su bonita prometida ¿Será un problema? —Pregunta.

—No, ella es una mujer orgullosa, planea casarse por separación de bienes, así que podemos seguir sin problemas, aunque dice que va a ser su abogada personal.

—La conozco se entromete en todo, hay que sacarla del medio, pero sin hacer mucho escándalo.

—¿De qué forma? —Responde sonriente. —Tengo muchas en mente.

—Con separarla de él es suficiente, ella no tiene culpa.

—Sé que la conoces, pero eso no será impedimento para que siga el curso de las cosas, si me molesta me ocuparé de ella.

—No olvides que esto solo es cuestión de dinero, no somos asesinos.

—Los dos queremos lo mismo, venganza Morris, y juro que la tendremos. No me importa como. Si molesta acabaremos con ella.

NOELIA

Después de un largo viaje en carretera, decidimos cambiar de puesto, él conduce y yo me acomodo en el asiento del acompañante.

Mike va concentrado en la carretera, su semblante es serio, no de molestia sino de concentración. Así se ve realmente guapo.

Víctor alguna vez me habló sobre él en el pasado, Mike Levis era la joya de la corona, según las revistas de corazón él soltero de oro, simpático, risueño y un tiburón en los negocios. Mi padrino reía cuando alguna revista del corazón lo emparejaba, decía que no es que no quisiera relaciones, es que amaba de más su trabajo.

El teléfono suena en mi bolso, por más que rebusco no lo encuentro. Saco de él varias cosas antes de encontrarlo.

—¿Qué llevas ahí? ¿Medio supermercado? —Ríe sonoramente.

Lo miro divertida, por fin logro encontrarlo, lo muevo mostrándolo y descuelgo.

—¡Hola Víctor! Que gusto me da escucharte. —Mike me mira de soslayo.

—Hola preciosa, ¿cómo vas? ¿Puedes hablar? —Cuestiona.

—Vamos bien, en este momento nos dirigimos hacía casa, Mike va conduciendo.

—Perfecto, necesito que pongas el manos libres un momento para que me escuchéis atentamente los dos.

—Claro espera un momento —respondo dejando el bolso a mis pies, después hago lo que me pide.

Mike me mira curioso arrugando las cejas en modo pregunta, 

—Buenas noches Mike, cuánto tiempo...

—Hola Víctor. —responde algo serio sin llegar a estarlo del todo.

—Chicos, necesito que nos reunamos cuanto antes, he descubierto algo que me gustaría explicar cuanto antes.

—Explícalo ahora Víctor. —Responde Levis fríamente.

—No puedo, ¿cuándo podemos vernos? Viajaré justo después de fin de año. ¿Estaréis en la ciudad o en tu casa Noelia?

—Estaremos en casa. ¿Qué pasa? Adelanta algo, no nos puedes dejer así. —Me remuevo en el asiento.

—Solo os puedo decir que; Mike quiero que dejes que Noelia lea todos los contratos que tengas con la empresa, Epacont SL y no firmes nada que no hayas estudiado a fondo.

Levis deja su semblante duro y se relaja un momento, al escuchar el tono conciliador de mi padrino.

—No he llegado a firmar nada con esa empresa, de hecho ayer fuimos a buscar los contratos a la empresa. ¿Víctor qué pasa? —Levis está confuso.

—Me gustaría darte la información completa ahora amigo, pero todavía, me queda algún otro cabo por atar, y tú no estás en tu mejor momento.

—Víctor soy grande ya para que… —lo corto.

—Víctor, entiendo tu preocupación, pero tú entiendes que necesitamos saber qué es lo que pasa, no podemos andar a ciegas. Debemos estar preparados para lo que nos pueda venir, también tienes que entender nuestra postura.

El silencio reina en el coche durante unos segundos que se hacen eternos.

—Os resumiré un poco, ¿os suena EpaCont SL? —Miro a Mike y este asiente con la cabeza. —Epacont es una empresa que se dedica a comprar empresas que caen en quiebra inexplicablemente, investigando un poco hemos averiguado que esas empresas estaban en superávit un año antes de que se disolvieran, en muchos casos los dueños han sido detenidos por estafa, han donado o vendido sus acciones sin más, las acciones vendidas, por supuesto a un precio irrisorio. Todas ellas con los mismos compradores, Epacont con quién se que trabajas o en su defecto Construcciones Petrer.