NOELIA
Llego a mi despacho más tarde de lo que pretendía, no imaginaba que estando allí me demoraría tanto.
Hoy estar en la oficina de Levis ha sido interesante, he podido ver una faceta dominante del que me gusta, me atrae.
Al llegar a mi oficina ya me espera Alex sonriente como de costumbre.
—Hola, mi diva rubia. ¿Cómo has estado?
—Hola Alex, yo bastante bien, ¿qué tal tu Nochebuena al fin?
—Oh, mi reina, tengo tanto que contarte. —dice suspirando.
—Por la cara que traes debe ser algo bueno.
—Mi padre ya sabe que soy gay. —explica sonriente.
—Y esa sonrisa significa que se lo ha tomado bien…
Alex pasa conmigo a la oficina, toma una de las sillas que están al lado de la puerta y me explica.
—Pues verás, llegue a casa con la cena preparada, yo no había quedado con Isaac para no tener pelea, sabes que él cree que yo debía contarlo antes. No le gusta andar a escondidas.
—¿Y bien? —Pregunto
—Al llegar papá me miró y preguntó «¿No viene tu novio? Creí que vendría a cenar» —Yo solo contesté «en un rato viene» Me sonrió y ofreció una copa de vino.
—Oh Alex, me alegro tanto. Ves como no tenías que temer nada.
El teléfono de la oficina suena, al descolgar, se conecta el manos libres.
—Hola mi rubia. —Alex abre los ojos.
—Dime Mike. —Río al ver su expresión.
—Amor, ya tengo nueva secretaria, he decidido que por ahora pondré a Lily en el puesto de Marga, ella de seguro que no nos interrumpe cuando me beses…
—Genial, ahora hablamos, tengo que trabajar —contesto avergonzada, Alex no lo deja pasar.
Aun con el manos libres puesto le pregunta.
—¿Amor? ¿Besos? Eso no ha sonado falso.
—Es que no lo es. Ahora la rubia es mía —contesta Mike en un tono tóxico.
—¡Esto si es un notición! —Ríe —Y yo que creía, que traía noticia. —Me abraza.
—¡Alex, relájate, suéltame! No es para tanto. —Exijo molesta.
—Pues debes darle poco amor, porque el humor gasta lo mismo.
Mike se carcajea.
—Alex basta, ves y trae lo de Coleman. —Pido.
Alex se cruza de brazos, le encanta el cotilleo, aunque con su trabajo es todo un profesional, se marcha a su mesa fuera de mi oficina.
—Eres cruel con ese chico. Te adora.
—No se lo digas o se lo creerá, pero yo también lo quiero.
—Lo aprecias, no lo quieres.
—No seas tóxico Levis, lo quiero como amigo, pero lo quiero.
Mike gruñe desde el otro lado.
MIKE
La rubia cometa abiertamente que quiere a Alex, pero a mí no me lo ha dicho todavía. No es que sienta celos, es que no sé lo que ella siente todavía.
Eso me molesta, es una piedrecita en el zapato a la que tengo que acostumbrarme, ella hace y siente lo que quiere.
No es manejable. Nada manejable.
Yo no sé qué es lo que siento, este sentimiento de posesión no lo había sentido nunca, todo es nuevo para mí.
—Ahora sí, explícame eso de que Lily es tu secretaria. —Ríe.
—Pues pensé en Lily, tengo fe absoluta en su lealtad hacia mí y la empresa. —Le explico.
—Hace un rato me llamó para pedir tu teléfono, me comentó que ibais a ir a tomar café.
Lily ha venido a mi oficina muy contenta después de la llamada que le hizo recursos humanos. Solo para abrazarme y darme las gracias.
Flashback
—Mi niño, ¿es cierto que me traslado a tu lado?
Pregunta abriendo la puerta después de llamar fuertemente.
—Si Lily viene a trabajar conmigo.
—Pero yo no sé mucho… —susurra.
—Sabes más que nadie en esta empresa. —Abro mis brazos.
—Gracias mi niño… —Solloza abrazándome. —Le doy gracias a Dios por mandar a ese ser de luz que te abrió los ojos.
—Lily, lamento no estar a la altura este último año, pero todo va a cambiar, lo prometo.
—¿Te puedo pedir una cosa?
—Claro que puedes.
—Dame el número de teléfono de ese ser de luz que iré mañana a tomar un café con ella. —Ríe.
—Está bien, apunta…
Fin Del flashback
—Me preguntó ayer, ¿recuerdas?
—Creí que no iba en serio.
—Creíste mal. —Ríe —Mike te tengo que dejar, como no me pongas a trabajar no acabaré nunca.
—Vale, esta noche te veo. —Me despido y cuelgo el teléfono.
NOELIA
Llamo a Alex que me acerca los documentos que le pido, casi al instante.
Este se queda en la puerta mirándome.
—¿Necesitas algo Alex? —Pregunto.
—¿Puedo hacer una pregunta? —Sé lo que quiere saber.
—Pregunta.
—¿Es en serio lo de Levis y tú?…
—Si Alex, Levis y yo estamos juntos.
—Lo sabía una Reina con un Adonis ¡Me encanta! —Sonríe grandemente y baila. Yo seré padrino de sus lindos hijos.
Me divierto mucho, este chico es único, la energía que transmite siempre es positiva.
—¡Alex! ¡Largo de mi oficina!
Me dispongo a trabajar, pero por cosas del destino el teléfono suena de nuevo.
—Sí, dígame.
—Hola Noelia, soy Víctor, me quedé preocupado anoche, no me llamaste y Levis tenía un gran enfado.
—Oh, tranquilo, no pasó nada. Se le pasó rápido.
Editado: 26.01.2024