Desde joven mi madre siempre me enseño que hay que ser independiente y no estar Atado a los demás que uno puede valerse por sí mismo.
Ella era una mujer guerrera que no se doblegaba a los demás, una buena persona y una Gran Madre.
Nosotros vivíamos en el campo con mi abuelo el me enseñaba técnicas de caza a pesar de ser un Omega y además Adiestración.
Era una de las personas más importantes en mi vida, bueno en realidad eran dos: mi madre Anna y mi abuelo Alejandro.
Mi padre a él nunca lo conocí y en realidad no me importaba, mi momentos más felices era solo nosotros tres y adicional nuestros dos perros.
No soy un Omega normal que es Sumiso, esa palabra no existe en mi diccionario.
NOTA:
Es mi primera historia así que denle amor, comprensión y ternura jejeje.