—¿Mamá?—preguntó Taji al ver a Nyoko hecha bolita en su cama mientras temblaba, preocupado, intentó llamar su atención con la intención de posar su mano en su hombro, pero la mano de su padre intervino.
—Es mejor dejar que se tranquilice, ahora mismo si la tocas podría no reconocerte—explicó Ónix con calma antes de que ambos salieran de la casa.
—¿Que es lo que tiene?—preguntó ya fuera de casa.
—Creo que tuvo otro recuerdo—respondió antes de sentarse en el suelo, siendo imitado por su hijo—, aunque no es la primera vez que tiene uno pero parece ser que este le asustó.
—Ohh.
—Se repondrá—añadió para calmarlo—, sólo necesita unos minutos a solas para aclarar su mente. ¿Qué te parece ir donde tus hermanos y Magma para traerle algo de pescado a Nyoko?
—Me gusta la idea—habló entusiasmado.
—Vamos—dijo con una sonrisa en su rostro antes de ponerse en marcha con Taji.
Era un recuerdo valioso que Taji atesoraba de su padre mientras veía el reflejo en el agua que llegaba a aquella cueva.
Desde temprano, estaba sentado con los pies sumergidos en el agua viéndose reflejado en aquellas aguas azules, trayendo a su memoria aquel recuerdo de las cuales recordaba con claridad.
«Realmente me gustaría que estuvieras aquí, papá» pensó Taji antes de oír los pasos de su hermana Mirai, que al parecer, había notado su ausencia y fue a buscarlo.
—Despertaste muy temprano hoy—expresó sentándose en la orilla—, ¿cómo te sientes hoy?
—...Recordé a mi papá—soltó en voz baja sin dejar mirar su reflejo, ésta era la primera vez que Mirai oía hablar en ese tono al pronunciar a su padre, por lo general, Taji y sus hermanos hablaban en muy raras ocasiones de él, aunque no sabe cómo fue que ocurrió, debió ser muy duro para ellos el que su padre se halla ido para siempre.
—¿Quieres hablar?—preguntó sabiendo que muy posible se hechara para atrás, pero aún así quería ser al menos un soporte para él.
—No es nada grave, a veces solia acompañarlo a pescar cuando mis hermanos y Nyoko dormían—se excusó volteando a verla con una sonrisa, tal como Mirai lo había predicho, estaba evadiendo el tema—, además, he descubierto algo interesante, acércate.
Señaló en un punto del agua el cual Mirai trataba de encontrar hasta que Taji le salpicó un poco de agua en la cara. Empezando una guerra por quién mojaba más al otro.
Todo esto era visto por Amarillys, que llegaba en su canoa con algunos frutos para el equipo.
Ver a ambos jugar sin preocupaciones, le hizo acordar a su amiga de infancia, que solía hacerle jugarle algunas bromas que ella solía odiar, pero a la vez, extrañaba, ya que recordó como fue llevada y petrificada por el líder Ibara.
—Lamento la demora—expresó volviendo al presente al ver como los demás despertaban e iban a su encuentro—esto es todo lo que pude recolectar para ustedes.
—Esto es más que suficiente—expresó Senku al agarrar uno de los cocos—cuando lo juntemos con las cosas que tenemos en el laboratorio, esta fruta normal y corriente... Usando la ciencia puede renacer en todo tipo de cosas.
Tras aquellas palabras senku elaboró los pasos para la creación de los productos que harían para transformar a Kohaku más al canon femenino.
—Verse bonita si que es un trabajo duro—expresó Kohaku asombrada al ver la lista de pasos que harían.
—Y el primer paso será el peinado—expresó Senku confiado—por lo que soltaremos la cuerda de tu pe-
La frase no pudo ser terminada por la rebeldía y bofetada que recibió Senku al soltarle el cabello.
El trabajo de embellecer a Kohaku sería más complicado de lo planeado.
(***)
—Wow—expresaron Taji y Mirai al ver lo hermosa que se veía Kohaku.
—Estas super hermosa—comentó Suika entusiasmada.
—Definitivamente eres muy habilidosa Amaryllis—elogió satisfecho Senku.
Sin embargo, Amaryllis que ahora tenía en sus manos era un arma muy poderosa capaz de embellecer a cualquier persona. Sonriendo volteo a ver a los chicos y con el pintalabios en mano pronunció:
—Mientras más infiltrados seamos, habrá más oportunidades de triunfar; así que vamos a intentarlo.
Los chicos tenían un mal presentimiento pero de igual forma, Amaryllis transformó a todos los chicos en chicas. Asombrando a los niños que veían incrédulos la transformación de sus amigos.
—¡Ni en un diez mil billones lo haré!—expresó Senku asqueado de su disfraz. Además de que su voz lo delataría en seguida.
—Si fuera cuestión de voz, pasaría sin ningún problema—confesó Gen con una voz femenina, tenía peroel porte y la elegancia en el actuar y hablar pero la altura que le jugaba en contra.
—Nada de mi es pasable—sinceró Soyuz rígido como piedra mientras todos asentían, definitivamente no podía ser uno de los infiltrados.
—Me parezco más a Hisui de lo que pensé—opinó Taji al insistir en participar en la transformación, ya que le parecía divertido la actividad que hacían (aunque por obvias razones, no sería elegido para la infiltración).
—Creo que con unas extensiones quedarías exactamente igual a ella—sugirió Mirai mientras Suika y Tajo la miraban sin entender a qué se refería con "extensiones".