Luego de tal emotivo reencuentro entre Nyoko y Ryusui, surgieron varias dudas sobre lo acontecido. Por lo que fueron poco a poco respondidas a sus amigos más cercanos mientras navegaban en el Perseo ya reparado con Senku y algunos otros más en la oficina de radio intentando captar la llamada de Ruri, Relatando lo que le había sucedido al resto de sus amigos el cómo y cuándo la raptaron siendo una niña y el trágico suceso de su niñera horas antes del rayo petrificador,conociendo días después a Byakuya, quien la cuido y la ayudo a aliviar su dolor cuando estaba petrificandose muy lentamente en ese entonces.
— Así que tú nombre verdadero es Oyuki Nanami—corroboró Chrome mientras comía en el compartir que François organizó como muestra de bienvenida del retorno de la pequeña dama Oyuki, (quien también se alegró de verla viva en todos esos años que e desapareció). A la vez que, Nyoko asentía rodeada de los grandes brazos de Magma, como si de una muñequita se trataba; mientras, Magma miraba con recelo a Ryusui.
—Pero hay una cosa que no entiendo—comentó Kohaku—, en la aldea dijiste que eras la ex novia de Ryusui. ¿Cómo es que eres ambas personas?
—Hay una explicación para ello—se adelantó Ryusui en responder tras terminar de beber su copa—, en mi adolescencia, solía llevar en algunos viajes a nuestra Nyoko, ahí todavía era una niña de 5 años, ahí fue que ambas se conocieron, se llevaban tan bien que muchos creían que eran hermanas por el enorme parecido que tenían—gira a ver a Nyoko—. Y estoy casi seguro que ella te enseño hacer esa promesa que ambos haciamos.
Nyoko asintió, relatando que con Nyoko Engel, fue una de las personas más amables que conoció en aquellas épocas de su infancia.
—Y sumando el hecho de que tu nuevo nombre considera con el de ella junto a tu amnesia, provocó que ambos creyeran que era la otra Nyoko—finalizó Gen teniendo un asentamiento de ambos hermanos.
—Pero... ¿Porque esos hombres querrían raptarte Nyoko-san?—preguntó Gen.
Nyoko suspiró y alzando la vista a Magma, él entendió y aflojó su agarre, mostrando con gran tristeza en sus ojos, el tatuaje en su espalda. Poco después, procedió a explicar que aunque no recordaba mucho los detalles, había leído de los labios de uno de sus captores que alguien ofrecía dinero por su persona.
El cuerpo le temblaba recordando como vió morir a su niñera. Rápidamente, Magma la envolvió en sus brazos, comprendiendo así que aquel tema aún era delicado de tocar para su amiga.
—¡Se restableció la comunicación con Ruri!—comunicó Hisui desde la puerta.
(***)
Luego de volver nuevamente a la isla junto a una nueva pista del enemigo Whyman. Kohaku juntó al equipo de fuerza explicaban el nuevo método de entrenamiento; mientras tanto, Taiju junto a Soyuz, llevaban la última estatua donde estaban Senku y compañia.
Rápidamente, al notar que aquel misterioso petrificado podría estar relacionado con el arma petrificadora y con Whyman, no dudaron en despetrificarlo.
Poco a poco la capa de piedra se fue quebrando hasta quedar sin ni una pieza.
Su cabellera era negra y rizada, poco a poco empezaba a respirar y a ver con claridad a su alrededor.
¿Realmente había sobrevivido? Eran una de sus preguntas que se hacía. Poco segundos después, François le entregó ropa para que se vistiera, el cual aceptó y al ya estar vestido, les agradeció y juro su lealtad ante ellos con una inclinación de rodillas, pegando su cabeza.
—Saltemonos todo eso y hablamos del arma petrificadora—expresó Senku con desinterés en su discurso.
En eso, a lo lejos se escuchan los gritos de Kohaku y Kirisame persiguiendo a Ginro, con Nyoko corriendo por detrás intentando calmar a las dos chicas.
Esta intromisión, no pasó desapercibido por el chico y al ver la escena, reconoció a su señor siendo perseguido por ambas chicas. Por lo que, actuó inmediatamente rescatando lo de sus captores que a su vez quedaron sorprendidas por su velocidad. Sin embargo, Nyoko al ver aquella cabellera negra y ondulada junto a esa velocidad, sintió un déjà-vu, sintiendo el latir de su corazón cada vez más fuerte acercándose con lentitud a la escena que era atendida por Senku y compañía.
—¿Nyoko-san estás bien?—preguntó Gen al ver su cuerpo estremecido muestras se acercaba.
Todos voltearon a verla y cuando los ojos del chico y de Nyoko se entrelazaron, ella cayó de rodillas preocupando a los demás, dejandolos aún más confundidos cuando el chico se acercó a ella pronunciando en un quebranto:
—Ishiko—dijo abrazándola con fuerza mientras era correspondido—, estás viva, gracias, gracias, gracias—repetia una y otra vez acariciando sus cabellos a la vez que Nyoko sollozaba en silencio.
Nadie entendía nada; al parecer, ellos dos se conocían. Todo indicaba que aún era muy poca información que Nyoko les había brindado y ella probablemente estaría recordando de a poco. Sin embargo, el hecho de que tuviera otro nombre más, les indicaba que Nyoko había sido despetrificada y petrificada en el pasado.
Luego de unos minutos, Nyoko y el chico se separaron y se giraron a ver a los demás, escuchando la fuerte y clara voz del muchacho.
—Muchas gracias por cuidar de Ishiko, les estoy eternamente agradecido por ello—dijo antes de hacer una reverencia, a la vez que Nyoko les indicaba que él había cuidado de ella la primera vez que se despetrificó y la ayudó a escapar de la isla en la que estaban.