CAP 9: Un desenlace inesperado

—¡Magma-chan!—grito Gen desde la copa de una de las chozas.

Kinrou había perdido el encuentro y Kohaku había quedado descalicada por no presentarse al combate debido a que fue a rescatar a los niños que habían sido amarrados por el secuaz de Magma a las afuera de la aldea.

Ahora que estaban en las semifinales, Senku estaba sorprendido de la fuerza y astucia de Nyoko con la que derrotó a cada adversario, por lo que Chrome tenía la responsabilidad de derrotar a Magma en este encuentro para así poder liberar a Nyoko y poder salvar a Ruri de su enfermedad.

Pero necesitaban que ambos contrincantes se mantuvieran quietos, fue ahí que la aparición de Gen era la pieza necesaria para la victoria.

—¡Tú! ¡El brujo forastero!—gritó Magna atónito ante lo que veia—, ¡¿Cómo es que..?!

—¡Brujería! ¡Obviamente!—contestó con una sonrisa Gen antes de hacer unos movimientos con sus manos logrando así que varios pétalos cayeran por dónde ellos dos estaban—, ¡acabo de lanzarte un hechizo que hará que tú corazón explote si das un paso!

—¡Ese es un ataque de brujería desde fuera! ¡Va en contra de las normas del-!

—Si es que realmente hubiera una explosión—interrumpió Senku—, Pero si es un farol, se estarían burlando de ti ¿No?, Solo tendrías que dar un paso para ver si explotas o no—expresó burlonamente; Kohaku y Kinrou sabían que esa forma de hablar de Senku era muy rastrera.

—¡Chrome-chan!—gritó nuevamente Gen—¡Es hora de que derrotes a Magma! ¡Éste hechizo consume mucha magia!—voceó afligido—, ¡por lo que solo podré detenerlo... Por un... minuto! 

—¡No sé si pueda hacerlo! ¡Estoy muy aterrado como para moverme!—dijo Chrome en una pésima actuación que solo el grupo de Senku se dió cuenta de ello.

—¡MUHAHAHA!—se rió Magma al ver que aún podía ganar—¡Qué bien me viene que seas una gallina! ¡Sólo tengo que esperar que ese brujo se le agite la energía y así poder ganar!

Magma cayó ante la trampa de su enemigo, ya que en lo que ambos permanecían quietos, la lente que  quedaba del Casco de Suika, estaba recibiendo el sol, provocando que la ropa de Magma ardiera en fuego, por lo que con la última estocada de Chrome, ganó el encuentro, liberando así a Nyoko y que estuvieran a un paso de la victoria.

Con Magma fuera de la ecuación, la medicina para Ruri ya era un hecho que se cumpliría.

—Que empiece el siguiente encuentro—dijo Jasper tras validar la Victoria de Chrome— Nyoko vs el forastero Senku.

Nyoko dió un paso al frente con la mirada sería apoyándose en su arma, decidida a ganar el combate.

—Tal parece que no te lo dejará fácil Senku—dijo Kohaku al ver la postura de su amiga.

—Bastará con que ella se enfrente a Chrome para que nuestro equipo gane—respondió sin preocupación entrando al combate.

Ambos cruzaron miradas por un momento hasta que Nyoko desvío la mirada a Jasper, fue ahí que Senku se percató de algo inusual.

«Su rostro se puso pálido»pensó preocupado al ver como a ella le empezaba a temblar las piernas. Fue entonces, que Jasper dió la señal del inicio del combate. Ocurriendo lo que Senku temía.

—¡Nyoko!—gritó Ruri preocupada desde su aposento viendo como su amiga al dar los primeros pasos para atacar, había caído al suelo desmayada. 


 

(***)
 

Nyoko abrió los ojos y observó que estaba en su casa, intentó levantarse pero unas manos la detuvieron.

—Al fin despertaste—dijo con los ojos lloroso Kane y que al igual que sus hermanos, abrazaron a Nyoko. 

Ella los mira confundida, recordando que antes estaba en un enfrentamiento por lo que con sus manos preguntó a los niños lo que sucedió.

—Bueno—habló Hisui a la par que sus manos imitaban sus palabras—, después de que te desmayaste, Senku ganó el combate y Jasper y Turquoise, te sacaron de la arena para atenderte.

—Luego—continuó Kane a lo que su hermana continuo transmitiendo con las manos—, Seguía el último encuentro con Chrome, pero él se desmayó, por lo que Senku, ganó el torneo.

Nyoko se sorprendió de que Senku haya ganado, y avisó a los niños que prosiguieran.

—Senku se casó con la sacerdotisa Ruri, pero luego se divorció y escapó con los tinajos de alcohol y vinagre—concluyó Taji.

Sin duda, el actuar de aquel chico era muy raro para lo que estaba acostumbrada, por lo que le transmitió a los niños que descansaría un rato más, volviéndo a cerrar los ojos para seguir recuperando sus energías.