Estúpida Adolescencia

Ángel caído

— Despierta, tenemos que ir a casa, no pueden quedarse durmiendo ahí — Nos decía Matías mientras me ayudaba a levantar; me llevaron hasta la casa de Ángel y parecía que Sofia se iba a quedar también; era de madrugada llegamos rápidamente y dormí en la cama de él junto a la desconocida, no recuerdo más....

Paso el tiempo y seguí yendo al mismo pub aún sin mis amigas, solo para encontrarme con él, me sentía realmente feliz al lado suyo y él seguía con la loca idea de que fuéramos algo serio, lo cual me alegraba mucho y me llenaba el corazón. Sólo que esas locas ideas solo venían a su mente cuando estaba borracho, pero eso no me importaba.

Entre tantas veces que salimos me di cuenta que tanto Ángel como todos sus amigos les gustaba fumar, yo siempre había detestado eso, pues solía decir que era una forma de suicidarse estúpidamente, además el olor me parecía insoportable, pero al conocerlo a el, todo eso fue cambiando, me iban gustando diferentes tipos de música, la que le gustaba a el, así como su grupo deportivo favorito y hasta sus gustos, cada vez me iba pareciendo mas a el y fue por eso que decidí que aprendería a fumar, quería compartir todo con el y si el quería suicidarse estúpidamente yo también lo haría.

Pero pasando el tiempo las cosas fueron cambiando.

Otro de tantos viernes en aquel pub. Yo sentada al lado de Ángel y sus amigos, pues ya me había vuelto como la chica del parche. Salía con ellos a todas partes. Me invitaban a cualquier cosa. Desde luego, ese era mi plan desde el principio, conquistar a sus amigos junto con el. Pensé que así todo sería más fácil.

—Oye, Lucy, tu amiga Danna, es realmente hermosa, de verdad me gusta mucho — Me dijo mientras me mostraba su celular, donde estaba viendo su perfil en redes sociales.

Su comentario me partía el corazón.

—¿Por qué le gustaba? ¿Qué era lo que veía en ella que no veía en mi? — Pensaba para mis adentros. Me sentía absolutamente frustrada.—Claro que lo se, tal vez es su hermoso cabello dorado, o sus lindos ojos color miel...

Saqué mi celular para ver sus redes sociales disimuladamente y entonces vi que tenía una cantidad de posts para y sobre otra chica, claramente no era Danna, su nombre era "Laura Cortes".

En ese momento me sentí realmente estúpida por querer a alguien que realmente no me quería a mí..

Pasaron los días y seguí saliendo con los amigos de Ángel más que con el. Fui conociendo a uno en particular. Demian. Era alto. de ojos verdes y cabellos dorados y ondulados. Podría ser la pareja perfecta para Danna. Pensaba para mis adentros.

Lo había visto ya en anteriores ocasiones pero debo confesar que no le había puesto mucha atención. Sin embargo después de extraños episodios de indiferencia de Ángel hacia mi, él se había convertido prácticamente en mi paño de lágrimas personal.

Él sabía que me gustaba Ángel y por medio de el pude saber muchas mas cosas sobre su vida, pero estas me decepcionaban demasiado. Sin embargo, agradecía de sobremanera su compañía.

Una noche cualquiera Matías me invitó a una fiesta y yo decidí ir solo para verme con Ángel. Sin embargo nada salió como yo esperaba. Él me ignoró absolutamente toda la noche.

—Lucy mejor vamos a afuera y hablamos un rato, esto se ve como aburrido — Me dijo Demian. Yo sabía que lo hacía por que era más que evidente que me sentía mal.

—Esta bien, vamos— Le dije

Fuimos a un parque cerca y nos sentamos en los columpios. Entonces Demian saco una cajeta de cigarrillos de su pantalón.

—¿Quieres? — Me dijo. Yo aún no sabía fumar bien,

—Esta bien, dame uno, pero no lo se hacer bien.— Le dije

—Tranquila, yo te enseño— Me dijo y me pico el ojo.

Fumamos el resto de la noche. Lo había logrado, había logrado aprender la forma en como suicidarme estúpidamente y que ni siquiera me importase.
 

Días después en la universidad mis amigas empezaron a hablar de un concierto que iban a dar en la ciudad. Prepararon todo un plan para ganar boletas y poder ir. Así que un día cualquiera de universidad decidimos capar clase e ir a la emisora que estaba regalando boletas.

No fue muy difícil, sólo teníamos que grabar un video bailando una de las canciones de alguno de los cantantes que iría.

Fue vergonzoso pero lo conseguimos. A cada una nos dieron dos boletas para entrar. Y eso me pareció la oportunidad perfecta para tratar de pasar un buen rato solo con Ángel.

Días antes del concierto le envié un mensaje a Ángel preguntándole si le gustaría ir conmigo... Aunque me lo pensé dos veces, pues de un tiempo para acá yo empecé a estar distante con el, luego de todas las cosas que me había contado Demian me parecía que Ángel no era ni de cerca la persona que yo pensaba que era. Pero el corazón quiere lo que quiere.

Me dijo que si iría y por supuesto quedamos de vernos en aquel pub para pasar tiempo juntos.

—Últimamente te noto muy alejada de mi — Me dijo mirándome con esos tiernos ojos.

—Lo siento, he estado ocupada con cosas de la universidad. —

— Esta bien, entonces mas vale que recuperemos el tiempo perdido — Me dijo mientras me cogía la mano y me sacaba a bailar. Estaba sonando la canción "Señorita".

En medio de la pista acercó sus manos a mi rostro y me acarició suavemente. Entonces empezó a acercar sus labios a los míos y me besó apasionadamente. La manera en que él me besaba era simplemente perfecta. Ternura, mezclada de pasión. Hacía tanto tiempo que no sentía esta felicidad, para ser honesta desde la última vez que me besó.

Al terminar la canción me fui a arreglar un poco al tocador y luego volví a la mesa donde nos sentábamos con los demás chicos. Noté que no estaba.

— ¿Y Ángel?—  Les pregunte a los que quedaban en la mesa

— Esta afuera, como que pasó algo.

— ¿Cómo así que pasa algo? —  Contesté preocupada.

Entonces salí rápidamente del pub y afuera noté que había un grupo de chicos y que ahí estaba Ángel. Ellos querían pelear con el. Yo me asusté mucho, no quería que nada le pasara.




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