Era muy común que los fines de semana los jovenes de mi facultad dedidieran salir a bailar a los pequeños antros de la ciudad o a tomar en alguna cafeteria, regularmente tan metida en mi mundo, era de los pocos "aburridos" o "matados" que no disfrutabamos de socializar como la gente normal. Al menos eso decía mi mejor amiga Alexa, era diferente a las demás chicas y no solo por la familia de la que venía, sino por algo más escondido en su interior. Cuando nos conocimos nuestra forma de ser nos acerco a ser enemigas, pero un sólo instante de bromas despejo cualquier enemistad y nos convertimos en inseparables, debo aceptar que los celos era uno de los sentimientos que comunmente poseía cuando veía a mi mejor amiga conquistar rapidamente a las personas, pero despúes de observar su forma de actuar comprendía la razón y aquel obscuro sentimiento desaparecía. Reflexionaba acerca de eso cuando escucho su salida de la regadera, algo tímida por lo que pensaba decirle, me mantiene en las sombras:
- Alexa - se oye mi voz como un lamentable lamento.
- ¿Si? ¿Dime Jes? - sonrío, quizas es por que es la única de la facultad que me llama así, la mayoria me dice B- rabbit.
- ¿Está noche también saldrás?
-Pues claro, iré con Marianne a tomar unas copas, je - sonríe mientras prende la secadora de cabello y se sienta al borde la cama con el espejo para iniciar el proceso de belleza. Suspiro, jamás pensé llegar a creer que me diera miedo mostrar un lado de mi personalidad.
-Quería pedirte un favor. - junto los dedos, haciendo que las puntas choquen entre si, mientras agacho la mirada, se que mis mejillas estan enrojecidas por los nervios que me corroen, jamás eh hecho esto. Alexa sólo sigue maquillandose, pero se que me mira por un lado del espejo- Quería decirte que me lleves contigo, quiero ir de cacería. - digo en alto y lo más rápido que puedo, sólo pienso "que torpe soy" - por favor- termino como recordando mis modales.
Alexa voltea, en sus ojos negros hay sorpresas, pero sonríe. - Claro, pero...estás absolutamente de acuerdo en querer ir?, digo tú sabes a que vamos cada fin de semana, cierto? - hay cierto temor en sus palabras, como queriendo evitar una desilución. Suspiró, pienso para mis adentros "Claro que lo se, es algo elemental y básico en cualquier raza, pero como todos suponenen que soy una mogijata amigable, es fácil pensar que no se me da la cacería." dejo de chocar los dedos, la miro a los ojos y de la manera más seria amable posible le digo.
- Ale, no se si te das cuenta, pero tan inocente no soy, bueno, quiero decir, no vivo en un hongo, además ya me bañe...- no entiendo porque no puedo decirle que desde hace días siento una sed y ansiedad, algo me dice, me pide que la acompañe, realmente creó será el tiempo que llevo huyendo de la emoción de la cacería.- Entonces, ¿Qué dices?
- Qué te estás tardando... ponte algo lindo y sexy y trae ese cabello y cara para arreglarlo. - sonríe, manda un whatssap y salgo algo nerviosa. Suspiro al cerrar mi cuarto de aquel departamento que rentamos, no se porque estaba nerviosa, sabia de antemano que Alexa no se negaría a mi petición, sobre todo cuando un mes atrás ella misma me lo pidió, pero siendo una ama de lo aburrido me negue, pero esta noche no solo la luna se ha negado a salir sino también su séquito de estrellas, esta nublado, son las noches que más prefiere Alexa.
Me acerco a mi armario veo toda clase de ropa, vestidos, abrigos, blusas con y sin escote, entre todos hay una que se hizo para salidas así, una blusa blanca sin mangas, levemente escotada, la tomo y sin pensarlo, me lo pongo arriba de un sujetador con tirantes transparetes, ya que la abertura de la espalda, hace que me sienta más sensual, lo convino con unos jeans de mezclilla deslavados, unas zapatillas negras de tacon medio (es decir, ni altas ni bajas), pensaba en vestido, quizás por eso me depilé las piernas, pero no quería parecer una prosituta, al menos si lo quería pasar bien, iba ser de forma elegante. Por si las dudas, había comprado en la mañana unas bragas blancas que sujetaban el lado de atrás y de adelante con un ligero liston en color jade. Sonriendo, veo mi rostro y comienzo a maquillarme, solo enchino mis pestañas, les acomodo rimel, aplico levemente un tono dorado y un poco de rubor a mi mejillas, dejo suelto mi cabello rojo.
Para mi estoy perfecta, pero se que para Alexa no será suficiente; chasqueo mis dedos, tomo una bolsa de mano pequeña, donde quepa mis cosmeticos, algo de dinero, mis llaves, y sin duda alguna, mi labial mate que portaré hoy, tan sólo para que mis labios se vean suaves y apeticbles. Salgo y me dirijo a la recámara de mi amiga, que esta lado opuesto del departamento, enfrente del mío para ser exactas. Al entrar quedamos maravilladas, ambas nos vemos muy bien, a decir verdad Alexa, nunca se ve mal, no importa que pase un terremoto siempre encuentra la forma de verse hermosa. Ella me toma de la mano y me hace dar vuelta.
- Realmente te ves muy bien nena, ahora lo único que debemos hacer es planchar el revoltoso cabello rojo que portas.- Sonrió para mis adentro y el proceso así como incia finaliza, todo rápido.
Al finalizar el planchado, Alexa deja su plancha a un lado, me hace mirarme al espejo y sonriendo dice:
- Eres muy bonita, deberías dejar que te arreglará más seguido, no cualquiera posee lo que tú y dime - sonríe de forma perversa.
- S-si- pregunto tímida.
- Porque no te quitas esos pupilentes, realmente son molestos y creo que cautivarás mejor sin ellos, tienes unos ojos hermosos.- me hace girar quedando frente a frente. Yo también creo que tengo ojos bonitos, pero anteriormente sufrí de mucho bulling por culpa de ese color que poseó, además de eso, realmente no veo bn, todo es borroso. Suspiro- Bueno, lo se, pero de igual forma quiero y deseo encontrar algo bonito y si no los llevó, ps puede que termine con un ogro como acompañante y siendo honesta, eso daría que me de un ataque, si sabes a lo que me refiero. - sonrió con la esperanza de que no insista con los ojos.