Eternity, el tiempo de la luna

Aika se acercó a ambos y Joy pudo percibir la incomodidad que sentí al mirar a Liam.

_Está noche dormiremos aquí, este lugar es ultra secreto, jamás lo encontraran, pero al despertar el día deberemos realizar el último tramo del camino y poder llegar hasta la bruja blanca.

_Y dime mujer de mente brillante ¿cómo saldremos de este agujero?_ Preguntó Joy con su sarcasmo característico.

Aika suspiró.

_Voy a sorprenderte enano, ya verás.

Joy detestaba que le dijera de ese modo, pero sabía que él la provocaba.

_Sorpréndeme…niña

_Ya! Los dos…juro que son insoportables-dijo Liam levantándose, se detuvo ¿a dónde iría?

_Muchacho ven…-Sacha lo condujo por unos pasillos muy angostos dentro de la cueva hasta llegar a una habitación pequeña. Le acercó una pequeña caja de madera y la abrió frente a él, en su interior un anillo de oro macizo con un un sello, el sello de su orden.

_ ¿Lo reconoces?

Liam se mostró asombrado el anillo de la orden sabía de él, sabía que había desaparecido por años y que poseía un poder superior.

_ ¿Por qué lo tiene usted?

_Porque me pertenece…

Liam la miró asombrado. ¿Pertenecerle? ¿De qué hablaba? El sello de la orden podía ser solo portado por el supremo por el gran maestro, ella lo habría usurpado.

_Se lo que piensas y puedo decirte que te han engañado siempre, te han engañado para poder hacerse de poder, un poder que solo tú y la bruja blanca comparten…

Liam la miró ya no sorprendido, su mirada azul denotó miedo.

_Espera no estoy entendiendo nada de lo que dice, me está volviendo loco.-dijo mientras se sentaba y perdía su cabeza entre las manos.

Sacha se sentó su lado, a pesar de su estado esa mujer le transmitía mucha paz.

_Liam no llevas ese nombre por nada, tú no eres alguien ordinario, tu eres el elegido y tu gran maestro o al menos el que crees siempre lo supo…y te utilizó._ Liam intentó hablar pero ella lo detuvo levantando sutilmente su mano. _escúchame pues lo que te contaré aclarará muchas preguntas que te haces. Naciste el mismo día y al tiempo del universo de la bruja blanca, naciste del amor más simple y puro entre dos jóvenes que se amaban más allá de sus diferencias. ¿La diferencia? ella una princesa de Kronos y el un monje del templo de Altea. Eras el nacimiento que comprobaba que ante la fuerza del amor no existen poderes alguno que puedan prevalecer. Tu madre fue condenada por su padre a la oscuridad de la torre más alta de la fortaleza, tu padre huyo contigo antes de que los hombres negros del rey pudieran destruirte. Tu padre fue un buen hombre cuido de ti hasta que un día entendió que nada que hiciese daba tu seguridad. Te entrego a mí, a la orden blanca, tu gran maestro te mintió siempre, yo era la suprema La gran maestre. Entendí que tu misión en esta historia era muy importante pero tu gran maestro fue funesto e inició una rebelión dónde puso toda su maldad al servicio de las brujas del norte y derrocar a las mujeres en los puestos de poder. Por lo que la gran reina Helena, yo y otras tantas influyentes fuimos relegadas a simples adornos de los grandes jefes. Pero la hermandad nunca dejó de actuar y así en las sombras seguimos luchando. La reina Helena nos traicionó la desesperación de una madre puede eso y mucho más, pero su hija sufrió las consecuencias. Ella no parará hasta entregarte a las brujas del norte porque tu sangre es la única manera de despertar a la bruja blanca y la promesa de que su hija regresará a la vida…una triste mentira la cual sabe pero se empeña en creer…Por eso Liam debes confiar en nosotros somos los únicos que te queremos con vida, soy la única que puedo salvarte, pero no evitar tu encuentro con la bruja blanca hay una sola manera de terminar con esta locura ancestral este puñal en su corazón antes de la luna nueva terminará la historia…_El puñal brillaba ante las llamas del pequeño hogar en la habitación, era simple de hoja curva y mango de plata. Liam meneaba su cabeza sin entender nada o sin querer entender. _Tómalo Liam el salvará tu vida y la de todos…