Miedo a perderte

Liam y Aika se miraron al llegar a la cueva escondida tras paneles de hielo sólido. Joy parecía conocer demasiado bien el camino. Antes de entrar se detuvo y los miró.

_Quiero aclararle que la persona que vamos a ver tiene algunas diferencias conmigo…-No alcanzó a decir la última sílaba cuando una mujer de la misma estirpe de Joy lo tomó por el cuello colocando una daga sobre él._ Les Presento a Nina…una vieja amiga.

Liam meneo la cabeza, no sabía si reír o escaparse de toda esa locura.

_Mal nacido cómo te atreves a regresar-La mujer a quien Joy, increíblemente, no se resistía apretaba con fuerza su cuello.

_Si me dejas decir alguna cosa podría explicar-contesto Joy casi sin aire y morado.

_Hablar maldito…si te dejo hablar me convences de que soy la mujer más hermosa del mundo…

_Y lo eres…créeme-dijo Joy entornando sus ojos.

_Yo creo –intentó decir Liam.

_ Tú te callas muchachito esta rata y yo debemos aclarar cuentas._ Lo llevo hacia dentro de la cueva seguidos por Liam y Aika._ Bien rata dime quiero escucharlo…anda dilo…

Joy apenas movió sus ojos para mirar a Liam y Aika sin entender…Aika movió sus labios: “Perdón”…

Joy abrió sus ojos comprendiendo.

_Oh…oh sí…perdón, perdón mi hermosa Nina, soy el hombre más estúpido del mundo por haberme ido sin decirte, sin haberte dado un último beso sin…

Nina se abalanzo sobre él atrapando los labios de Joy en un beso casi desesperado. Liam revoleo sus ojos, ese era un espectáculo que no esperaba en aquel momento tan dramático, por los dioses estaban tratando de salvar al mundo…

Aika le palmeo la espalda y le hizo señas que la siguiera.

_Démosle su tiempo…lo necesitan…

Liam la acurrucó contra una de las paredes de la cueva y la beso. Aika se desmoronó ante sus labios era una adicción que cada vez la consumía más. Las manos de Liam navegaban por el cuerpo de Aika y el deseo era un animal que los devoraba sin poder detenerlos. Sus respiraciones se entrecortaban, eran jadeos llenos de lujuria debían poseerse debían ser uno o ser el universo mismo. Se escurrieron hacia un rincón entre besos y abrazos desesperados, como la pasión puede anular la razón en solo segundos. Liam miró fijamente a Aika mientras la poseía allí de pie sintiendo cada embiste de su cuerpo como un grito de libertad Aika no podía controlar las sensaciones que ese hombre provocaba en ella era como si estallaran miles de fuegos en su cuerpo, si moría en ese momento moría en la gloria. Se abrazaron como dos náufragos a su tabla de salvación, un suspiro de placer, de amor, de vida.

_Me has hechizado…no puedo dejar de pensarte, desearte…

Aika colocó su dedo índice sobre los labios de Liam._ Calla por favor solo bésame.

¿Qué es el beso? Más que el grito tácito del corazón en llamas, el beso manso, el beso infierno, el beso que prohíbe y que remata al caído y resucita a los enamorados…el beso que para ellos era como el aire que los convertía en almas solo buscándose, perdonándose.

Aika beso los ojos de Liam y una lagrima rodo por los suyos.

_ ¿Por qué?-preguntó él…

Aika no contesto, no podía, no podía decirle que sentía miedo de perderlo…