Capítulo 4.

Habían pasado algunos días, desde que le había prometido a Bella no actuar de esa forma estúpida, los deseos de tomar su sangre no habían cambiado, la deseaba, pero he podido controlar el ardor en mi garganta cuando estoy cerca suyo, a este punto ya no planeaba alejarme de Bella.

¿Otra vez está pensando en esa humana?

Todo se arruinará por su culpa.

La irritante voz de Rosalie y sus pensamientos me cansaban, siempre me alejo cada que piensa eso, aunque no es la única, las cosas en mi familia solo han estado más tensas desde que Alice confesó la otra parte de la visión, Carlisle y Esme me apoyaban, Alice estaba muy ansiosa de tener una amiga humana, Emmet por su lado no le tomaba importancia y Jasper solo pensaba en no perder el control si Bella llegase a estar cerca.

¡No es posible!

¡Ay no!

Edward.

Leí los pensamientos de Alice, ahora más que nunca protegería a Bella, era claro lo que pasaría hoy, Bella se enteraría de toda la verdad, la visión de Alice no era algo que se podría cambiar, ella ya lo sabe solo esperaría a hablar conmigo.

-Debo buscar a Bella-dije mientras tomaba las llaves del auto apresurado.

-Está en la estación de policía con Charlie-estaba nerviosa, era obvio.

-Alice-quería que dijera que todo estaría bien.

-Está bien Edward- su voz parecía insegura.

Salí rumbo al auto, no estaba pensando claramente, empecé a manejar, iba a toda velocidad, no era necesario ir en auto con mi velocidad llegaría igual o incluso más pronto, pero no podía arriesgarme a que hiciera preguntas, más de las que seguro haría.

El tono de Alice me hacía creer que quizas este era el día en que quizas mataría a Bella, y eso solo hacía que me hirviera la sangre, no puedo permitir que eso pase.

Llegue a la estación de policía, habían asesinado a unas personas, decían que fueron unos osos, mentira, existen más de nosotros y estos no seguían nuestra dieta de sangre animal, ¡Genial! Ahora tengo algo mas de que preocuparme, cuidar a Bella se hacía cada vez mas dificil, y esto solo iba de mal en peor, si Bella ya sabe lo que mi familia y yo somos es muy probable que crea que fuimos nosotros.

- ¡Edward! -dice una dulce y confundida voz.

-Hola Bella-intente actuar tranquilo.

- ¿Qué haces aquí? -no parecía asustada.

-Supe que estabas aquí-me aclaré la garganta para calmar la sed-y quería invitarte a comer.

-Oh-estaba sorprendida.

-Si quieres-me puse nervioso-, o ¿tienes planes? -estaba tratando de actuar normal.

-Bueno-se pone algo nerviosa-, iba a cenar con Charlie, pero creo que estará ocupado con unos casos, seguro terminará tarde –empezó a apretar los labios.

- ¿asi qué? -esperaba que dijera que sí.

-Si-seguía nerviosa-, si-repitió, pero más tranquila.

- ¿no le avisarás a Charlie? -le sonreí algo picaro.

-Le enviare un mensaje-respondió ya seria.

- ¿estás segura? -quise que dudará de ir.

-Si-se veía apresurada.

Caminamos hacia al auto, quise abrirle la puerta, pero ella ya se había adelantado, sonreí.

-Es un lindo auto-se apretaba las manos- ¿pero no es muy ostentoso? -su voz se tornó timida.

-Quizas-sonreí sin gracia-, pero deberías de ver el de Rosalie, lo es aún más-esta vez me reí.

-Ah, si-ligeramente se ríe-, lo he visto.

Seguimos hablando todo el camino al restaurante, ese momento en el auto fue maravilloso, breve, pero maravilloso.

Entramos al lugar, la camarera tenía pensamientos demasiado intensos sobre mí, y unos ofensivos hacia Bella, asi que la ignore todo el rato.

- ¿Por qué actúas asi? -dijo Bella mientras se llevaba el vaso a la boca.

- ¿de qué forma? -me puse algo tenso.

-La camarera-su expresion se tornó algo seria.

-Oh ya veo-sonreí pícaramente.

-Lo disfrutas, ¿no es asi? -bajo su mirada hacia el plato.

-Ya se a lo que te refieres y no-intente estar serio.

- ¿y por qué no? -se veía intrigada.

-No me interesa, es todo-intentaría ser lo más honesto con ella.

-Pues creo que tú a ella si-apretó los labios-y mucho-evadía mi mirada.

Bella estaba nerviosa, su pulso se aceleró, podía oír su respiración que se volvía más rápida cada vez más, pero el tono de su voz parecía desanimado, desearía poder leer su mente en estos momentos, era muy dificil descifrarla.

- ¿estas nerviosa? -le pregunte sin querer ser intimidante.

-No-respondió a la defensiva.

-Lo pareces-le sonreí con picardía.

-Bueno-dejó los cubiertos y bajo sus manos- quería hablarte sobre algo.

Supongo que era algo que en algún momento de la noche pasaría, Bella querría saber la verdad, y la tendrá.