Capitulo 7

-A un metro y medio de distancia, Julieta-me aparta Nick con su brazo, un patético intento de no asesinar a aquel desgraciado- no quiero terminar en una estación de policía por ti, por mí tal vez pero no por ti.

 Estamos dentro de la oficina de Romeo, claro después de un pequeño escándalo con la secretaria y algunas pesadas miradas y murmullos por parte de muchas personas. Nick me aparta con un brazo mientras veo la odiosa mirada de despreocupación y superioridad de Romeo Montesco la cual me molesta aún más.

-Bienvenida Mi farfalla-dice de la manera más odiosa, insoportable, molesta posible. Intento liberarme del agarre de Nick para decapitar a aquel desgraciado, pero él aprieta más su agarre inmovilizándome.

-No sabes el inmenso deseo que tengo de decapitarte con mis propias manos-Le digo con desdén-y pienso saciar ese deseo justo ahora.

-Después de lo que te diga te enamoraras de mí de manera inmediata-me sonríe y me guiña un ojos.

-Ni aunque mi vida dependiera de ello lo haría- digo intentando zafarme del agarre de Nick otra vez-¡Nick suéltame!

-Te tengo una propuesta-se asoma en su rostro una expresión seria-prometo que será de tu agrado.

♦♦♦♦♦

-Ya llegue a casa, Nick-le digo a través de mi móvil- no te preocupes tomare una ducha y tal vez tome una cerveza.

 Entro a mi habitación con los tacones en las manos y tirando mi bolso al sillón que se encuentra a una esquina de la misma, me tiro a la cama y cierro los ojos acompañado de un suspiro de cansancio.

-Que alivio-Nick suspira al otro lado de la línea-me alegra que llegaras a casa, te fuiste sin decir ni una palabra, pensé que irías a...

-Ya no soy una niñata Nick-le digo-no necesito un refugio para esconderme

-Lo se-dice-por cierto ¿pensaras en esa propuesta?

-No lo se-digo-no sabría que pasaría.

-Ni yo-suspira-como sea respetare lo que decidas. Te dejo, la abuela llego a Londres y tengo que preparar la cena, ya sabes por el tan buen chef que soy.

-Has algo delicioso-le digo con algo de humor-sabes como la abuela Greta se pone.

-Esa vieja cascarrabias-dice con un fingido tono molesto haciéndome reir-vale, adiós cuídate.

-Adiós, procura no quemar la cocina, otra vez-le digo con un tono regañón.

-¡Como crees!-Nos reímos y colgamos.

 Tiro el teléfono a un lado y coloco mis brazos abiertos mirando el blanco techo de mi habitación. Cierro los ojos con el fin de no pensar más en eso.

Hace unas horas...

-¿Qué clase de propuesta?-pregunto sin delicadeza.

 Aunque esto suene rebuscado estamos sentados uno frente al otro, nos miramos sin expresión en una oficina en total silencio. Yo estoy con los brazos y piernas cruzados y Nick a mi lado mientras el con las piernas cruzadas apoyado de la parte trasera del sofá.

-Una que nos beneficiara a ti y a mí-me dice sin cambiar su seria expresión- ¿Quieres Té?.

-Deja los rodeos, no estoy sentada al frente de ti por gusto-me interrumpe.

-Sal conmigo-Dice de la manera repentina, que esta demás decir que me sorprende.

- ¿Qué?-decimos Nick y yo al mismo tiempo con el ceño fruncido y confusión, una total y remota confusión.

-Dije que salieras conmigo-repite esta vez con un tono más amargado.

 Quisiera decirles que al instante que esas palabras salen de su boca yo me habría levantado y estrangulado hasta matarlo, incluso que me arrestaron y mande a Nick a ocultar el cadáver ayudándome a salir de la cárcel, pero no, lo único que hice fue reír. Si, reír como una lunática, reír hasta llorar. Mientras rio miro a Nick que en vez de reír conmigo por la estupidez de este idiota lo único que hace es mirarme con confusión e incomodidad. Me volteo y miro a Romeo quien está con los ojos cerrados y con los puños cerrados, pero me vale, yo sigo riendo.

-Julieta-dice Nick con un tono algo incómodo-July, creo que lo dice enserio.

-Si, por supuesto que si-digo con sarcasmo un poco más calmada-Romeo, entonces casémonos de una vez.

-Julieta, hablo enserio- dice con una voz neutral-necesito que salgas conmigo.

 Dejo de reír al instante que vuelve repetir lo mismo, frunzo el ceño e intento regresar mi cordura.

-No entiendo-digo- ¿por qué quieres que "Yo" salga contigo?, odio recordártelo, pero tú y yo no somos mejores amigos, ni siquiera buenos conocidos para pedir ese tipo de cosas

-Últimamente han corrido rumores sobre mis salidas con mujeres, muchos dicen que son sin control o que después de dejarlas les doy dinero incluso, hace poco una mujer me amenazo con difundir un rumor de que estaba embarazada a cambio de que le diera dinero o ese tipo de cosas-dice.

-No es como si no fuera real-digo.

-Nunca he negado el hecho de que soy un mujeriego, mi Farfalla-me sonríe-Pero padre me amenazo que si no formalizo algo con alguien o al menos elimino esos rumores sobre mí, simplemente me quitara todo, su herencia, la compañía, absolutamente todo. Por el bien de la compañía lo haría.