Domingo 15 de enero. 2017
Mis ojos se abren con pesadez, me duele todo el cuerpo, el día de ayer fue muy estresante. Luego de hablar un rato con todos los chicos nos fuimos a dormir, todos se quedaron acá por lo que justo ahora Macaia está a mi lado, peleo bastante para dormir con Gracie, pero a la final Mónica ganó.
Me levanto con cuidado para no despertarla y me dirijo al baño, donde hago mis necesidades matutinas, me lavo la cara y cepillo los dientes, cuando salgo Macaia está estrujándose los ojos.
–Buenos días–Le digo amablemente, ella y yo no nos hemos llevado del todo bien
–Buenos días–Me devuelve el gesto sonriendo somnolienta, ella se levanta y se dirige al baño por lo que yo aprovecho para cambiarme.
Me coloco un vestido de Gracie, necesita ir de compras en serio, este es ajustado hasta las caderas y luego es suelto, es bonito de hecho, color rojo, mi cabello esta suelto.
Salgo de la habitación y escucho a Gracie, Gunter y Sivor alias Sushi hablando, no es mi intención ser entrometida pero escuche mi nombre
–Everest sigue corriendo peligro, al igual que su hermano, Tanisha no se quedará de brazos cruzados cuando sepa que la elegida está en el reino–Dice Gunter, mi corazón late rápido y corro a la habitación donde está mi hermano, él está durmiendo, Mónica le hizo un hechizo sanador, por lo que sus hematomas apenas se ven, mi hermano es mi vida entera, si algo grave irreversible le pasará yo no podría vivir con eso, desde pequeños hemos sido inseparables, él para mí y yo para él, lo protegería con mi vida.
Sus ojos se abren pesadamente, los círculos oscuros bajo sus ojos siguen allí, me mira y me la una sonrisa, yo me acuesto a su lado y le doy un gran abrazo
–Por todos los dioses, te extrañé Eve–Dice con voz ronca
–Tú ni te imaginas cuanto te extrañe, Northie
Cuando nos separamos me dice que ya sale, así que le doy privacidad para que se dé una ducha y todo eso, salgo y está vez si me notan, Gunter no aparta su mirada azul de mí
–Buenos días, bella durmiente–Me dice Sivor sonriendo, éste chico me encanta
–Buenos días–Camino hasta él e increíblemente le doy un abrazo, él se sorprende y luego me lo devuelve, en serio ya les cogí cariño a todos ellos.
Gracie me da una sonrisa, y también le doy un fuerte abrazo, miro a Gunter quien lleva su cabello rubio suelto y el ladea la cabeza
– ¿También quieres uno?–Le pregunto sonriendo, sacando mi lado divertido, él intenta contener la sonrisa, pero no puede
–Vale–Dice, me acerco a él y él envuelve sus brazos a mi alrededor, yo me siento pequeña en sus brazos, y repito, hay algo en él que simplemente me hace sentir segura.
El hormigueo está presente de nuevo, en serio es muy extraño, es como si electricidad viajará por mi cuerpo, mi corazón late rápidamente, y el suyo también, puedo escucharlo, nos separamos y frunzo el ceño, me quedo atónita cuando veo que sus ojos están brillando, son azules brillantes, como brillan mis ojos, él me mira de la misma manera, ambos miramos a Gracie y ella abre su boca impactada, al igual que Sivor
—¡Por todos los lobos bebés!—Exclama Sivor
– ¡No puede ser!–Grita Gracie, sobresaltándome–. Everest, ¿Gunter y tú se han estado comunicando telepáticamente?–Pregunta ella, yo miro a Gunter de reojo, él ya estaba mirándome
–Sí –Respondo aun mirándolo
–Ay, no puede ser...–Dice ella más bajo, está por decir algo cuando alguien toca la puerta y Sivor va hasta ella, es un caballero, del reino de Noel
–El rey ha pedido ver a sus hijos, Everest y North, deben acompañarme–Dice con esa voz... Ustedes saben, como si no pudiera ser amable, odio que me den órdenes, más así.
El hombre lleva un escudo y un casco de metal, hombreras y rodilleras, ah y claro una espada enfundada.
¿De verdad? Parece sacado de un cuento de hadas
–Bueno muñeco de hojalata, tendrás que esperar, North está en su habitación duchándose, y no ha desayunado–Digo, Todos ríen, incluso Gunter, el hombre me mira fijamente y luego asiente, no es que tuviera una armadura, pero partes sí, y anuncia que estará esperando afuera
–En serio eres dinamita–Dijo Sivor, sonriendo, yo también sonrío, estoy por preguntarle a Gracie que quería decir antes pero Macaia y Mónica aparecen, no hay que negar que ellas son muy hermosas
–A ustedes sí que se le pegaron las sabanas–Murmura Sivor, todos reímos.
Como yo tampoco he desayunado, me siento con ellas y como lo que ha preparado Gracie, minutos más tardes aparece North, por fin veo a mi hermano de nuevo, perdió peso, pero nada que no se pueda arreglar, como si Gracie fuera leído mi mente le da un gran plato de comida, él esta apenado, yo le sonrío y palmeo el banco a mi lado.
North no puede quitar los ojos de Gracie, bueno, ambos no se pueden quitar los ojos de encima, yo me acerco a su oído y le susurro:
–Deja de mirarla, si no quieres que el rubio de cabello largo te asesine
North me sonríe, pero me hace caso, antes de empezar a comer se aclara la garganta
–Quiero darles las gracias por ayudar a Everest a encontrarme, ninguno de ustedes me conoce o a ella del todo, y aun así la ayudaron... Gracias–Dice él, yo me le quedo mirando, todos le sonríen
–No hay de que, todos queríamos ver esa genuina sonrisa de tu hermana–Dice Sivor, yo tontamente me sonrojo
***
North mira a nuestros padres biológicos como si fueran extraterrestres, me mira atónito, él no está tomando esto muy bien
– ¿Estás diciéndome que nuestros padres, no son nuestros padres y que nuestros padres son reyes de un reino oculto y tuvieron que abandonarnos?–Pregunta con deje de molestia
–Técnicamente, sí–Digo, Destiny nos mira impresionada, sus ojos están brillosos casi creo que va a llorar
–Hijo...–Dice Noel
–No me llames así, nos abandonaste–Dice North con recelo.