Lunes 12 de Septiembre. 2016
Dos semanas ya habían pasado desde el extraño suceso en la cafetería, el chico que le hablo a Everest, se disculpó con ella por lo que dijo su ex novia, al parecer la chica no lo había superado, Everest le dijo que no era su culpa y así empezaron una conversación amigable, North como todo hermano celoso y protector, estuvo a su alrededor en todo ese tiempo, aunque él sabía que Everest por los momentos sólo quería hacer amigos, pero igual estaba vigilando, el hermano de la chica jamás querría que la lastimaran.
El profesor de ciencia entro al laboratorio donde se encontraban los mellizos, empezó a dar una clase, hablando de moléculas, átomos y sustancias, Everest y North prestaban atención a lo que este decía, así se fueron las horas de clases hasta que llegó el momento de ir a almorzar, los mellizos se encontraban en la fila, tal como dos semanas atrás, lograron ver a su hermana, quien se paseaba con un grupo de chicas y chicos, bastante guapos los chicos para Everest, su hermana siempre fue así, donde llegaba la quería, era el tipo de chica popular, lástima que ella no era así, cuando ambos hermanos obtuvieron su comida se fueron a sentar, ambos comían en silencio, hasta que Melody vertió “sin querer” jugo sobre Everest, todos a su alrededor comenzaron a reír, la chica se paró de su silla echando por las orejas
– ¡¿Acaso estás loca?! –Exclamó Everest
–Loca estás tú, al creer que puedes venir aquí y robarme a mi novio
– ¡Tú novio no me interesa, joder! –Everest visualizó la bandeja de Melody, donde se encontraba un envase de agua, la chica deseo poder verla mojada con esto pero no hizo nada
– ¡Tú solo eres una zorra! –Le gritó la rubia, haciendo que Everest perdiera los estribos pero se detuvo cuando algo muy extraño sucedió, Melody se encontraba empapada de agua, y el envase yacía vacio en el suelo, la peligris parpadeo un perpleja intentando entender lo que había pasado
–Eve–Llamo su hermano, ella lo miro, él abrió los ojos–. Está pasando, vamos–El chico la tomo del brazo, llevándosela a rastras de la cafetería
– ¿Qué pasa, Northie?
–Tus ojos, hacen eso…–Su mellizo se apunta a los ojos–. Brillan. Esto es muy extraño Eve
–Leí que… El color de ojos puede volverse más intenso dependiendo los sentimientos–Dice Everest
–Los tuyos brillas sobrenaturalmente–Le dice sarcásticamente su hermano, él lo sabía, él estaba allí cuando leyeron eso
–Cálmate North, no soy un fenómeno, ni nada así
–Lo sé Everest, pero igual me preocupa–North le da una mirada de soslayo, ella lo mira conmovida
–Te quiero North–Dice ella antes de abrazarlo
–Y yo a ti Eve
***
– ¡Tamía Allen! –Le reprende su padre por haber dicho una mala palabra
–Vamos papá, ya no soy una niña–Le replica la castaña
–Pero ellos si–Dice Ethan señalando a Teo y Tiana
–No tienes que alterarte Tami–Le dice Everest intentando calmar la situación
–Tú cállate pelo de vieja–Le dice Tamía tajante, Everest eleva las cejas sorprendida y actúa como si no le fuera dolido, su hermano pasa una mano por su espalda, en señal de apoyo
–Está vez te sobrepasaste, Tamía–Dice North y tenía razón, Everest siempre apoyo a Tamía, jamás pensó que Tamía sería una abusona con ella
–Y eso te ayuda menos a salir, estás castigada–Le dice su madre enfadada, Tamía se levanta de un tirón molesta, haciendo que la silla casi caiga, la castaña da pisotones para subir las escaleras, pero antes Everest la detiene
–Ah y Tamía…–Murmura
– ¿Qué? –Responde ella, seca
–A partir de hoy, imagina que sólo tienes tres hermanos–Le dice Everest tajante, su hermana da un paso atrás, como si la fueran golpeado, abre la boca para decir algo pero luego la cierra y sube sin protestar, pensar que esa tonta pelea salió solo por el hecho de que ella quería hacer una fiesta en casa pero su madre y padre no la dejaron.
– ¿Estás bien? –Pregunta North en un murmullo, la platinada asiente y termina de comer en silencio, cuando sube a su cuarto, se coloca sus auriculares y busca su cuaderno de dibujo, lo que le había dicho Tamía le había dolido, empezó a trazar líneas molesta y dolida, tomo su caja con colores y tomo el negro y empezó a dibujar un oscuro cielo alrededor de la silueta que había hecho, que no sabía que era porque estaba muy molesta pensando en que había hecho mal para que su hermana la tratara así, sombreo, ilumino, hizo una luna y estrellas, con el blanco y el negro hizo el pelaje y cada vez era más claro lo que hacía. Su hermano siempre le decía que nunca dejará de dibujar y que tenía un gran talento, que sus dibujos eran muy realistas. Con el azul dibujo su ojo, para después difuminarlo con verde y gris y negro, ella no sabía cuánto tiempo había pasado hasta que vio el reloj, 2:10am, miro su dibujo y frunció el ceño, un lobo blanco en una noche oscura, sus ojos azules, estaba de perfil, ¿Por qué ella había dibujado eso? Cerró su cuaderno y abrió los cajones en donde se encontraban las pijamas, se cambió y se metió en la cama, pero Everest no podía dormir, su mente vagaba por lugares que ni ella sabía ¿Por qué había dibujado un lobo? ¿Qué significa? Ella no lo sabía pero intentaría descubrirlo.